Amor inconsciente: ¿de qué se trata?
El amor puede producir en nosotros una metamorfosis. Con el amor podemos transformarnos en alguien lejano. Llegamos incluso a desconocernos. Y es que el amor es un sentimiento tan difícil de explicar que a veces podemos referirnos a él como: amor inconsciente.
Ahora bien, cada uno cuenta con su propia definición de amor basada en lo vivido, lo leído, lo escuchado… Aquí hablaremos de él como lo define la Real Academia Española de la Lengua (RAE) “aquel sentimiento hacia otra persona, que naturalmente nos atrae, y que, procurando reciprocidad en el deseo de unión, nos completa, alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear”.
Hoy haremos hincapié en el amor que va más allá de la consciencia. Podremos descubrir de qué se trata, cuáles son las características de este tipo de amor y cómo identificarlo.
“Mientras tememos conscientemente no ser amados, el temor real, aunque habitualmente inconsciente, es el de amar”.
-Erich Fromm-
Amor inconsciente, ¿de qué se trata?
Cuando hablamos de amor inconsciente, hacemos referencia a ese amor que se mueve por nuestros sueños, deseos, miedos, impulsos y emociones, que va de la mano de nuestros instintos y pulsiones. Es de difícil acceso para nuestra consciencia, porque sus contenidos se encuentran reprimidos, o por lo menos parte de ellos.
Ahora bien, alguna vez te has preguntado, ¿por qué se presentan en nuestras vidas personas que nos atraen profundamente, pero que al mismo tiempo son la esencia de nuestras frustraciones? Quizás porque hay aspectos inconscientes que nos llevan a esa atracción, que podría posteriormente convertirse en un amor inconsciente.
Entonces, a veces no sabemos por qué amamos profundamente a esa persona a la que tenemos al lado simplemente lo sentimos con una gran intensidad. Y esa es la clave para que estemos a su lado, siendo felices o no. Además, el amor que describimos es aquel que nos lleva a tomar elecciones más allá de nuestra consciencia. Y, aunque pueda parecer imposible llegar a comprenderlo, lo cierto es que podríamos, al menos en parte.
Sigmund Freud, padre del psicoanálisis, sugirió que el inconsciente se manifiesta a través de los sueños, la creatividad, las equivocaciones, y los síntomas, entre otros factores. Entonces, podríamos reconocer esos aspectos estando atentos a sus manifestaciones. Además, mediante el psicoanálisis también se puede acceder a este contenido.
El psicoanálisis mismo plantea que realizamos elecciones inconscientes, y una de ellas puede ser el amor. Y, lo hacemos según el desarrollo de nuestra personalidad, nuestras experiencias y la influencia de la cultura.
Gracias al papel de los mecanismos inconscientes, buscaríamos un amor que satisfaga nuestras carencias, incluso esas que desconocemos, que tenemos aisladas o encapsuladas. Es por ello por lo que resulta difícil entender por qué hacemos elecciones que pueden resultar tóxicas para nuestras vidas. Al desconocer de dónde viene, lo elegimos sin ser conscientes.
Sin embargo, no hay que confundir el amor inconsciente con el tóxico: puede serlo o no. Eso ya va a depender tanto de los mecanismos como de las vivencias que cada uno posea. También puede tratarse de un amor ciego, en el que no vemos al otro como es realmente e incluso lo idealizamos, esperando que cumpla todas nuestras expectativas.
Características del amor inconsciente
Observemos qué suele caracterizar a un amor inconsciente:
- Idealización. Puede ser un rasgo del amor inconsciente cuando sobrestimamos a alguien, para apaciguar lo que nos aqueja. Es decir, utilizándolo como un mecanismo de defensa.
- Suplencia. Ya que es una forma de satisfacer nuestras necesidades, y una construcción que como sugirió el psicoanalista francés Lacan, tiene que ver con la cultura, y el lenguaje.
- Goce. Se trata de una satisfacción pulsional, es decir del cruce entre lo simbólico con lo real.
- Instintivo. Se trata de un amor que surge a partir de lo más profundo de nuestro ser, los instintos las pulsiones y el deseo. Aspectos que se escapan de nuestro yo consciente.
- Imagen mental inconsciente. Esta imagen afecta nuestras elecciones, y es el resultado de nuestras experiencias, deseos, instintos, miedos y legados.
Amar inconscientemente va más allá de lo que vemos en la realidad. Se mueve por los aspectos de nuestro mundo interno. Y, nos desconcierta porque desconocemos esos mecanismos por los cuáles se mueve.
¿Cómo identificar el amor inconsciente en nuestras vidas?
Aunque parezca complicado, hay formas de sacar a la luz ese amor inconsciente. En contraposición, nunca tendremos un control absoluto sobre este. Veamos algunas formas de identificarlo:
- Autoconocimiento. Estar atentos a lo que sucede en nuestro mundo interior puede ayudarnos a darnos cuenta de ese amor que va más allá de la consciencia. Si bien no podemos acceder a todo su contenido, mediante las manifestaciones del inconsciente podemos ver parte.
- Psicoterapia. El psicoterapeuta puede llegar a ver esos aspectos que nosotros no vemos, porque es un experto en identificar las manifestaciones. Además, es capaz de traducírnoslas en palabras que resulten comprensibles para nosotros.
- No sabemos por qué estamos con quien estamos. Si llegamos a preguntarnos ¿qué hago yo con esta persona?, puede ser un indicio de una mor inconsciente.
- Cuando no sabríamos cómo describir ese amor. Si no sabemos cómo sucedió y no podemos poner en palabras lo que sentimos, podría tratarse de un amor inconsciente.
- Idealizamos a alguien. Al utilizar la idealización como mecanismo de defensa, para evadir nuestras angustias.
- Autoagresión sin saber por qué. Cuando contamos con una relación tóxica, permitimos todo y no sabemos cómo escapar porque hay “algo” que nos ata.
- Nuestras ideas del amor no representan al amor. Cuando el amor que poseemos no representa lo que creemos del amor.
Amor inconsciente es el que puede ir más allá de toda lógica. Es tanto difícil de comprender, como de ponerle palabras. Se trata más bien de un sentimiento intenso que está, pero no sabemos cómo surgió ni por qué.
Es un amor que nace de nuestras viejas heridas, de nuestros deseos, aprendizajes, miedos, legados, impulsos…Es un amor que puede llevarnos a elecciones jamás pensadas. Es un amor que transforma, porque lo vemos tan ajeno… cuando en realidad está estrechamente ligado a nuestro mundo interno.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Miller, J.A. (2003). La pareja y el amor (Vol 15). Madrid, España: Grupo Planeta.
- Lacan J. (1964). Posición del inconsiente. Escritos 2, pp. 509-557.