7 ejercicios prácticos para quererse a uno mismo más y mejor

El amor propio es como un músculo que debes ejercitar cada día, para que no se «atrofie» con las adversidades de la vida. A continuación, te describimos unas técnicas para potenciarlo.
7 ejercicios prácticos para quererse a uno mismo más y mejor
Valeria Sabater

Escrito y verificado por la psicóloga Valeria Sabater.

Última actualización: 02 febrero, 2025

Seguro que en tu día a día te encuentras infinidad de carteles en redes sociales y manuales en librerías que te hablan del amor propio. Te recuerdan lo importante que es cultivarlo y atenderlo para favorecer el bienestar psicológico. Sin embargo, ¿cómo es posible lograr tal artesanía? ¿De qué manera se pueden hacer ejercicios para quererse a uno mismo como se merece y se necesita?

No es fácil. El afecto propio está muy influenciado por las personas que te rodean y por tus experiencias previas. El haber tenido una familia disfuncional o incluso pasar por una relación de pareja complicada puede alterar esta dimensión. Para reparar y fortalecer el autoamor te proponemos llevar a cabo las siguientes prácticas.

1. La cabaña del amor propio

Si hay una figura que nos ha dado herramientas en materia de crecimiento personal, autoestima y amor propio, es la académica Brené Brown. En su libro Los dones de la imperfección. Líbrate de quien crees que deberías ser y abraza a quien realmente eres (2012) recalca la importancia de desarrollar herramientas visuales que actúen como mapa para recordar quién eres y lo que vales.

La cabaña del amor propio es una técnica que te permite desgranar los componentes de esta esfera. Es un bonito ejercicio para todas las edades, que invita a la reflexión y a clarificar quién eres, lo que quieres y qué aspectos deberías reformular en tu vida.

¿Cómo llevarla a cabo?

  • Dibuja una casa con tejado, dos pilares y una chimenea.
  • En la base de la casa escribe cuáles son tus valores y significados vitales.
  • En las columnas de la casa, piensa en las fortalezas y virtudes que te definen.
  • En la puerta, escribe los miedos que limitan tu amor propio.
  • A continuación, en el techo apunta las cosas que has logrado en tu vida y que te enorgullecen. También lo que te gusta de ti y lo que se te da bien.
  • Por último, en la chimenea incluye prácticas y personas que te impiden ser tú y que oscurecen tu potencial. Son esas dimensiones que deberías dejar ir.


2. Mis barreras de protección

Para entender por qué es tan difícil quererse, la clave está en saber de dónde vienes y cuál es tu contexto actual. Tu pasado y las narrativas que tu familia, amigos, parejas y otras figuras inculcaron en ti, pueden condicionarte de muchas maneras. Ello explica por qué, para sanar tu amor propio y autoestima, es necesario poner límites ante lo que no te conviene (abarcando personas).

Al fin y al cabo, no es fácil quererse cuando quien está contigo no respeta tus valores, tu tiempo, tus espacios… Por ello, te recomendamos entre los ejercicios para quererse a uno mismo practicar las barreras de protección, de modo que dejes de actuar en piloto automático y te posiciones con claridad ante lo que no quieres.

¿Cómo llevarlas a cabo?

  • Visualiza: imagina que tienes un jardín extraordinario donde crecen flores de gran belleza. Esta parcela simboliza lo que tú eres, ahí están tus valores, tus sueños, tus metas, tus virtudes y tus necesidades. Ese escenario mágico es tu amor propio.
  • Detecta: a lo largo de tu vida te encontrarás a muchas personas que intentarán introducirse en tu jardín para arrancar esas plantas que te definen y que son parte de ti. Esos actos de intromisión destruyen tu amor propio.
  • Reacciona: esta técnica metafórica debe servirte para saber alzar adecuadas barreras de protección para que nadie vulnere lo que eres. Porque la autoestima, como el autoconcepto, deben protegerse y para ello, es necesario saber decir «no» y poner límites ante lo que no te conviene. Así que recuerda, ten cerca personas que, lejos de hacerte sombra, te permitan florecer.

Si eres un adulto, eres responsable de tu vida y de tu bienestar. Si respetas el principio de autopropiedad, comprenderás que nadie más te posee y que tú no eres dueño de nadie más. Solo sobre la base de esta comprensión puede haber paz en la tierra y buena voluntad entre los seres humanos.

~ Nathaniel Branden (La autoestima cotidiana, 1998) ~

3. La caja de los logros invisibles

Es muy posible que conozcas a Louise L. Hay. Esta escritora fue una de las figuras más destacadas en el campo de la autoayuda y el crecimiento personal. Uno de sus libros más conocidos fue Ámate a ti mismo (1990), un manual de trabajo muy sencillo para mejorar esta dimensión y donde se subraya una necesidad esencial: debemos reconocer a diario nuestras pequeñas y grandes conquistas.

La caja de los logros invisibles es uno de los ejercicios más creativos para quererse a uno mismo y recordar esos actos de amor propio que, a menudo, dejas en el cajón del olvido y no aprecias. Es muy importante que reconozcas tus valías, virtudes y potencial, porque solo así edificas una imagen amable y reforzada de ti.

¿Cómo llevarla a cabo?

  • Prepara y llena la caja: decora una pequeña caja. Una vez la tengas lista, es momento de llenarla de notas sobre esos momentos de tu vida en los que has conseguido cosas que deseabas. Agrega las buenas decisiones tomadas y los instantes en que te diste lo que necesitabas. No olvides apuntar todas esas cosas que te gustan de ti.
  • Recarga logros: a lo largo de la semana, puedes añadir en tu caja los actos que realizas y que te hacen sentirte orgulloso/a de ti, como darte un descanso, lograr un objetivo, superar un miedo o decir «no» a una situación que te generaba estrés.
  • Abre la caja: cuando sientas desmotivación, abrir esta caja te brindará un recordatorio tangible de cómo te has cuidado. Este ejercicio fortalece la conexión entre tus acciones diarias y tu amor propio, ayudándote a valorar los pequeños gestos de compasión contigo. Reconocerlos refuerza la narrativa de que mereces amor y respeto en todo momento.

4. La silla de la autocompasión

La terapia Gestalt usa con frecuencia el ejercicio de la silla vacía. Este enfoque siempre hace hincapié en la necesidad de ser conscientes del momento presente y de aquello que nos falta o necesitamos. Partiendo de este modelo, podemos adaptarlo para trabajar una dimensión que vitaliza, sana y recompone el amor propio: la autocompasión.

Como destacan en la revista Annual Review of Psychology, si aprendiéramos a ser más autocompasivos, nuestro bienestar físico y emocional mejoraría. Es actuar y vivir a través de ese mecanismo mágico y especial, con el que ser más respetuoso contigo, atendiendo tus necesidades y reduciendo la voz molesta del diálogo interno negativo.

¿Cómo llevarla a cabo?

  • Prepara dos sillas, una delante de la otra.
  • Siéntate en una de ellas y piensa en todo aquello que te angustia, en los miedos que se arremolinan en tu mente, en lo que carcome tu autoestima y potencial. Sé consciente de estas dimensiones.
  • Ahora, siéntate en la otra silla que representa la autocompasión y que tienes ante ti. Introdúcete en esta dimensión cálida que busca abrigar tus inseguridades para atenderte con respeto y empatía. Ahora repasa todos tus miedos, limitaciones e ideas negativas para reformularlas a través de este filtro más respetuoso.

5. Técnica del espejo

Mirarte al espejo y hablarte con respeto y cariño puede ser incómodo al principio, no hay duda. No obstante, destaca entre los ejercicios que favorecen el quererse a uno mismo, por ser muy simple para entrenar tu diálogo interno hacia una perspectiva más amorosa. Y es que la técnica del espejo fortalece la autovaloración positiva, enfrentando tus pensamientos limitantes para reemplazarlos con afirmaciones más saludables.

¿Cómo llevarla a cabo?

  • Ponte frente a un espejo en un lugar tranquilo.
  • Mírate a los ojos durante unos segundos para conectar contigo.
  • Ahora pregúntate quién es esa persona, indaga en qué cosas buenas tiene y cuáles son sus sueños, metas y deseos. Insístele en que hay mucha fortaleza en su interior y que puede lograr aquello que desea y anhela si se lo propone.
  • Ten una conversación con ese reflejo que ves en el espejo. Explícale también que no es necesario que le guste o ame todo lo que ve en esa apariencia física. Basta con que se acepte, con que valore ese cuerpo que le permite vivir, abrazar, correr, bailar, hacer lo que le gusta.
  • Haz este ejercicio a diario durante al menos una semana y observa cómo cambia tu percepción propia.

6. Técnica del árbol y sus frutos

De los libros más interesantes para trabajar conceptos como el amor propio, la autoestima y el autoconcepto resalta Autoestima para vivir. Cómo confiar en ti mismo y lograr lo que deseas (2018) de Herminia Gomà. Es un manual repleto de técnicas y ejercicios para quererse a uno mismo, los cuales resultan tan enriquecedoras como interesantes.

El modelo teórico que nos plantea en su texto pone en relevancia la capacidad de reconocer, conectar y potenciar nuestras virtudes. Solo cuando cultivamos estas cualidades, facilitamos que florezca el potencial interno.

De este modo, y basándonos en la perspectiva de la propia autora, te planteamos llevar a cabo la técnica del árbol, inspirada en dicho enfoque. Es sencilla, muy visual y actúa como un buen método para sanar y recuperar el autoamor. Su objetivo es destacar nuestras virtudes y ese potencial dormido que puede florecer si invertimos tiempo y esfuerzos.

¿Cómo llevarla a cabo?

  • Imagina que las raíces (que no se ven) son tus fortalezas ocultas: ¿cuáles son? (valentía, bondad, creatividad, resiliencia, etc.). Descríbelas. Son parte de ti y nutren tu autenticidad.
  • Vamos al tronco: lo que representa aquello que todos ven y que valoran, es esa área de tu personalidad que muestras a los demás y que todos aprecian de ti (soy servicial, soy trabajador, soy divertido, creativo, amigo de mis amigos, etc.).
  • Las flores y sus frutos son lo más importante del árbol (y de ti): pero aún están en fase de maduración.  Es la zona que te hace una persona única y especial, lo que se halla aún en proceso de evolución. Así que descríbelas, porque son tus pasiones, tus deseos ocultos, esos sueños que te llevarán lejos si confías en ti.

7. Querido yo futuro, tenemos que hablar…

¿Cómo te ves dentro de uno o cinco años? El amor propio necesita proyección, que pienses a largo plazo y reflexiones sobre cómo quieres que sea tu vida. La idea es reorientar tu existencia hacia unos caminos que estén en sintonía con tus ilusiones, valores y necesidades. Para reflexionar en ello te proponemos una última técnica.

¿Cómo llevarla a cabo?

  • Escribe una carta a tu yo de dentro de un año.
  • Descríbele tus sueños, metas actuales, y cómo debería tratarse para alcanzar lo que desea.
  • Usa un lenguaje alentador y comprensivo, como si fueras tu mejor amigo. Intenta animar a ese yo del mañana.
  • Recuérdale que quererse a uno mismo sin tener pareja es posible, y que puede sentirse feliz y realizado sin tener una relación afectiva. Al fin y al cabo, el autoamor es la historia que debe durar para siempre. Quédate con esta idea y redacta esta misiva para tu yo futuro. Ese que se siente más pleno, realizado y que se quiere más que hoy.


Quererte bien, para tener la vida que mereces

La autoestima, como el amor propio, configuran ese eje que asienta las bases de la salud mental y el bienestar. Así, los ejercicios aquí listados para quererse a uno mismo pueden actuar de excelentes aliados y potenciar esta dimensión. Pero antes de aplicarlos, entiende algo muy básico: estas tareas no sustituyen a la terapia psicológica.

Decimos esto porque, a menudo, el tejido raído y roto del amor propio, es el resultado de un trauma no integrado. También puede acompañar a una depresión o ser un síntoma más de un trastorno de la conducta alimentaria. Solo un buen diagnóstico trazará el mejor punto de partida para trabajar esta área del bienestar humano. No dudes, por tanto, en solicitar ayuda especializada si la necesitas.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Brown, B. (2012). Los dones de la imperfección. Líbrate de quien crees que deberías ser y abraza a quien realmente eres. Gaia.
  • Gomà, H. (2018). Autoestima para vivir. Cómo confiar en ti mismo y lograr lo que deseas. Paidós.
  • Neff, K. D. (2023). Self-compassion: Theory, method, research, and intervention. Annual Review of Psychology74(1), 193-218. https://www.annualreviews.org/content/journals/10.1146/annurev-psych-032420-031047

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.