Los efectos secundarios de la depresión
Las investigaciones sobre la depresión aumentan también en todo el mundo. Cada día sabemos un poco más de este mal, pero aún no se encuentra una cura permanente. Psicólogos, psiquiatras, sociólogos y antropólogos lo evalúan desde diferentes puntos de vista y no hay consenso sobre cuál es el mejor tratamiento. Hoy, además de ver cómo nos afecta esta enfermedad, veremos los efectos secundarios de la depresión, algo de lo que casi no se habla.
Una primera forma de luchar contra la depresión es informarnos acerca de sus causas, manifestaciones y efectos. La ciencia ha encontrado datos sorprendentes sobre las consecuencias de este trastorno en nuestras vidas. Enseguida te contamos cuáles son algunas de ellas.
La depresión altera la memoria
Las personas que sufren de depresión tienen más problemas con su memoria. Un estudio desarrollado en la Universidad Brigham Young, concluyó que quien está deprimido sufre una especie de nublamiento en la memoria. Este es uno de los efectos secundarios de la depresión principales.
Esto lo comprobaron mediante un experimento sencillo. Se reunió un grupo de personas que habían sido diagnosticadas de depresión y otras que estaban sanas. A todos se les presentó un conjunto de objetos y se les pidió que los retuvieran en la memoria. Después se les pasó la imagen de otro grupo de objetos y se les preguntó cuáles de ellos ya habían visto.
“La depresión te destruye silenciosamente, sin que nadie lo note, pero tú sabes que tu vida se está hundiendo y aún así no dices nada”.
-Anónimo-
Las personas deprimidas se mostraron menos capaces de identificar cuáles objetos habían visto ya y cuáles no. Al parecer, no lograban retener detalles y por eso se mostraban inseguros a la hora de recordar. Era como si tuvieran un velo frente a su mirada y no lograran percibir plenamente la realidad.
Hay reducción en el tamaño del cerebro
En la Universidad de Yale se hicieron algunos estudios en los que se pudo observar que muchas de las personas deprimidas también habían sufrido una reducción en su volumen cerebral. Otro de los efectos secundarios de la depresión donde las neuronas se habían vuelto más pequeñas y eso causaba una especie de encogimiento en el órgano vital.
Al tener neuronas más pequeñas y menos volumen cerebral, la conexión entre estas células era más pobre. Esto probablemente se traducía en una actividad intelectual más pobre y menos eficaz.
Para llegar a esos resultados los científicos se valieron de análisis de los tejidos cerebrales, en personas deprimidas y otras que no padecían esta enfermedad. Los investigadores concluyeron que estos cambios orgánicos incidían también en el funcionamiento de la corteza prefrontal del cerebro; por lo tanto, funciones tales como la toma de decisiones y el control de los impulsos también resultaban afectadas.
Mejor manejo del tiempo
Puede parecer curioso, pero otro de los efectos secundarios de la depresión es que las personas deprimidas alcanzan una percepción del tiempo más precisa que los demás. En un experimento realizado en la Universidad de Hertfordshire se pudo detectar que quienes sufrían de depresión lograban calcular de una manera muy exacta el paso del tiempo.
“El término depresión clínica se abre paso en demasiadas conversaciones hoy en día. Uno tiene la sensación de que se ha producido una catástrofe en el panorama psíquico”.
-Leonard Cohen-
Para explicar este fenómeno se habla del “realismo depresivo”, una característica que está presente en las personas tristes. Se trata de un rasgo que induce a percibirlo todo sin adornos, de una manera cruda y sin altas expectativas emocionales. Esto otorga una cierta neutralidad que les permite a las personas deprimidas ser muy precisas frente al paso del tiempo.
Cada vez son más las personas que presentan estos efectos secundarios de la depresión, debido a que esta enfermedad está cada vez más presente entre nosotros. Aprender a prevenirla cuidando nuestra mente y manteniendo un estilo de vida lo más saludable posible nos hará sentir mucho mejor y evitará que la depresión se presente un día por sorpresa destruyéndonos.