Las ventajas del tu lado obsesivo
Repetir una actitud muchas veces durante el día, ser fanáticos del orden o de la limpieza, por ejemplo, pueden ser benéficos para nuestra existencia, a diferencia de lo que se cree. Si cuando éramos niños nos reprendían por algo, queríamos hacerlo de nuevo. Algo similar ocurre en el caso de los síntomas obsesivos. Es preciso recuperar la capacidad de disfrutar de estos trastornos.
La obsesividad, cuando no llega a los niveles patológicos que requieren tratamiento psiquiátrio, también tiene sus ventajas. Volviendo al ejemplo de cuando teníamos pocos años de vida, seguramente recordemos esas canciones que repetían, hasta el hartazgo, la misma historia. O el simple hecho de pedir a nuestros padres o abuelos que nos lean una y otra vez el mismo cuento antes de dormir.
¿Cuáles son las ventajas de la obsesividad?
-Permite terminar lo que se comienza: Muchas personas dejan “a mitad de camino” sus proyectos por diversas razones, desde desmotivación a falta de recursos, también por los obstáculos que se van presentando a lo largo del trayecto. Quiénes tienen un lado más obsesivo pueden ser más tenaces, emprender proyectos que terminan, disfrutar del éxito, lograr mejores resultados, etc. La obsesión es un motor muy potente para nuestro comportamiento. Muchos artistas y científicos de la historia lo eran y por ello se hicieron famosos por sus obras y descubrimientos.
-Ayuda a formar nuevos hábitos: Está comprobado que para formar un nuevo hábito se necesitan 21 días, o tres semanas completas, según la persona. La mayoría abandona antes de que eso se consolide. Los obsesivos tienen un punto a favor, ya que como se decía anteriormente, terminan aquello que empiezan. Cuando hallan algo que les reporta satisfacción o ciertos beneficios, no dejarán de hacerlo, les resultará más fácil repetir ese comportamiento hasta que, sin dudas, se transforme en un hábito. Es una tendencia natural que demanda menos esfuerzo. Por ello es que los obsesivos van al gimnasio todos los días, dejan de fumar cuando se lo proponen, siguen una dieta estricta, etc.
-Sirve para terminar tareas de mejor calidad: La obsesión suele estar ligada a la perfección (o al perfeccionismo de quién la utiliza). Los expertos indican que existe un “perfeccionamiento sano”, donde la persona se esfuerza por hacer una tarea obteniendo la mayor calidad posible, siendo a su vez consciente de sus habilidades y sus límites. Los que presentan rasgos obsesivos se centran más en los detalles y en cuidar el acabado final, por lo que sus proyectos son entre excelentes y sobresalientes.
-Consigue disfrutar más de las tareas repetitivas: Uno de los problemas actuales es, sin dudas, la rutina. De lo que todos nos quejamos a diario. Esto se debe a que las tareas que se repiten todos los días son aburridas para la gran mayoría, los obsesivos no se sienten mal ante ellas, sino todo lo contrario. La repetición nunca será un obstáculo para ellos, sino que pueden llegar a disfrutarla. Pueden realizar esas tareas tediosas con mucha pasión y sacar muy bueno resultados.
-Evita cometer errores: Ya se ha dicho que las personas obsesivas están muy pendientes de los detalles y es menos probable que cometan errores o descuidos. No sólo en el caso de los proyectos laborales o profesionales, sino también en su vida cotidiana. Cuando explotamos nuestro lado obsesivo, logramos aumentar nuestra “visión” de conjunto, lo que se traduce en ver todos y cada uno de los detalles, aún los más pequeños. Eso nos ahorrará tiempo, dinero y a la vez, evitará problemas o tener que rehacer algo.
Por último, vale la pena señalar que si bien estas ventajas de los obsesivos son interesantes, el inconveniente radica cuando la persona actúa de forma impulsiva, sin analizar las consecuencias de sus actos; cuando se centra demasiado en los detalles y se olvida del proyecto global, es decir, que gasta energía y recursos de manera innecesaria o cuando se obsesiona a tal punto que tomar el mando de un proyecto en lugar de ser productivo, se convierte en un obstáculo que afecta las relaciones personales.