Lo contrario al amor no es el odio, sino el miedo

El amor te dulcifica, el miedo te endurece. El amor te abre al universo, el miedo te encierra en ti mismo.
Lo contrario al amor no es el odio, sino el miedo
Gema Sánchez Cuevas

Revisado y aprobado por la psicóloga Gema Sánchez Cuevas.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 20 marzo, 2023

Tendemos a creer que lo contrario al amor es el odio. Sin embargo, estos dos extremos nada tienen que ver entre ellos. Lo contrario al amor es el miedo. Un miedo que nos paraliza, al igual que otros tantos con los que tenemos que lidiar cada día. ¿Por qué vivimos con miedo?, y mejor dicho, ¿miedo a qué? ¿Qué harías si no tuvieras temores?

«Ama sin medida, sin límite, sin complejo, sin permiso, sin coraje, sin consejo, sin duda, sin precio, sin cura, sin nada. No tengas miedo de amar, verterás lágrimas con amor o sin él»

-Chavela Vargas-

¿Qué harías si no tuvieras miedo?

Uno de los sentimientos innatos del hombre es el miedo. Se trata de una respuesta natural ante un peligro. El miedo nos ayuda a sobrevivir pero también nos limita y ha sido utilizado muchas veces para doblegar voluntades. Además  afecta tanto al cuerpo como a la mente.

Ante el miedo, nuestro cuerpo reacciona con el aumento de la presión arterial, nuestras pupilas se dilatan y el corazón bombea sangre a gran velocidad. Sin embargo, el miedo a veces está solo en nuestra mente, porque puede ser imaginario, cuando no tiene una correspondencia con un peligro real.

Existen muchos tipos de miedo, el miedo al fracaso, el miedo al rechazo, el miedo a la pérdida de poder y el miedo al cambio.

Con miedo no tomamos decisiones, no somos creativos y sobre todo, no somos felices

Carl Gustav Jung, el gran psiquiatra y psicoanalista suizo, sostenía que todos tenemos ciertos rasgos que ocultamos, ya que desde pequeños nos dimos cuenta de que esto era necesario si queríamos ser aceptados. Ese conjunto de rasgos que no aceptamos de nosotros, son como una sombra que aflora en algún momento de nuestra vida. Junto a «la sombra», desarrollamos lo que Freud llamaba «el ideal del yo», que es un yo que creamos para encajar en nuestro entorno y no ser rechazados.

La no aceptación de la sombra conlleva muchos problemas, puesto que no nos aceptamos a nosotros mismos por miedo, no nos queremos. El miedo es lo contrario del amor. No nos amamos por miedo a nosotros mismos y no somos capaces de amar a otros.

¿Qué harías si no tuvieras miedo a aceptarte, a reconocerte, a ser rechazado? Serías libre y disfrutarías de tu amor hacia ti mismo y hacia otros.

«Todo lo que nos irrita de los demás, nos puede ayudar a entendernos a nosotros mismos»

-Carl Gustav Jung-

miedo
No nos aceptamos a nosotros mismos por miedo, no nos queremos.

¿Qué es lo contrario al amor?

Paulo Freire, experto en temas de educación de origen brasileño, sostiene que:

«Lo contrario al amor no es, como muchas veces o casi siempre se piensa, el odio, sino el miedo de amar, y el miedo de amar es miedo de ser libre»

Y es que hasta la neurociencia nos lo ha confirmado. Pues, cuando amamos a alguien, los sistemas encargados de garantizar la supervivencia del organismo se relajan. Como es el caso de la amígdala, una estructura cerebral encargada de procesar las emociones básicas (como el miedo) y poner en marcha las respuestas como la huida, el ataque o el bloqueo (paralización).

En otras palabras, diversos estudios han demostrado que, cuando sentimos miedo, la amígdala del cerebro está activada; pero cuando estamos enamorados, esta estructura cerebral se relaja. Por tanto, podemos afirmar que ambos sentimiento se contraponen también a nivel neuronal.

Cabe mencionar que el amor no se limita a la pareja romántica, la familia o los amigos, sino que también abarca el amor hacia nosotros mismos. 

¿Por qué tenemos miedo de amar?

El amor siempre es un riesgo. En cada ocasión tendremos que asumir ese riesgo y vivir la vida, vivir la pasión de amar. Nuestras experiencias pasadas y nuestras creencias, nos limitan y nos inducen el miedo a amar.

Un artículo publicado en Psychiatria Danubina halló que las personas que tuvieron dificultades para relacionarse con sus padres durante la infancia, debido a la falta de amor, imitan esos patrones disfuncionales en sus relaciones. Es decir, que si no nos manifestaron este cariño cuando fuimos pequeños, es difícil  que podamos expresar este sentimiento amoroso en la etapa adulta.

Por otro lado, nuestro miedo a amar puede derivar también de nuestra falta de amor propio o también llamada falta de autoestima. ¿Si no podemos amarnos a nosotros mismos, cómo vamos a amar a otra persona?

Mujer ojos vendados al lado de un corazón
La imposibilidad de amarse a sí mismo impide que se llegue a amar a otra persona.

«El miedo es la emoción más difícil de manejar. El dolor lo lloras, la rabia la gritas, pero el miedo se atraca silenciosamente en tu corazón»

-David Fischman-

Nuestra autoestima, o la consideración que tenemos de nosotros mismos, es un aspecto que debemos mejorar para lograr amarnos y amar a otras personas. Basándonos en el libro Aprendiendo a quererse a sí mismo de Walter Riso, te sugerimos algunas claves para mejorar la autoestima:

  • Fomenta el autoelogio. Cada vez que hagamos algo bien, o algo positivo, debemos elogiarnos. ¡Qué bien lo he hecho!
  • Prémiate. Cualquier logro de nuestra vida, por pequeño que sea, merece un premio. La gratificación puede ser algo simple que nos guste y nos haga disfrutar.
  • Elimina las creencias represivas que te impiden autorreforzarte. Aunque a veces debemos poner límites a nuestros sentimientos, en otras ocasiones debemos dejarlos salir. ¿Qué tiene de malo llorar en público o demostrar tu cariño hacia alguien ante otras personas?
  • No te avergüences de tus éxitos y tus esfuerzos. Disfrútalos y celébralos.


Corazón dibujado en la arena
El amor propio es fundamental para poder amar a los demás.

La filofobia

El caso extremo del miedo a amar es la filofobia. Una persona que padece filofobia experimenta un miedo muy intenso a enamorarse de otra persona, al compromiso y a mantener relaciones íntimas.

Las personas filofóbicas utilizan varios mecanismos para defenderse del amor y mantenerse en su área de comodidad:

  • Se enamoran de personas imposibles.
  • Comienzan relaciones que están destinadas a fracasar, porque las dos personas son muy diferentes.
  • Provocan las discusiones con la otra persona, para provocar que sea el otro quien rompa la relación.
  • Tienden a buscar defectos en la otra persona. De esta forma se justifican a sí mismos.

Síntomas del miedo a amar

De acuerdo con Cleveland Clinic las respuestas típicas de una persona con miedo a amar son:

  • Evitan tener relaciones íntimas.
  • Sienten ansiedad al estar en una relación.
  • Piensan y se preocupan por la finalización de la relación.
  • Experimentan temor a la otra persona y a las emociones.
  • Alejan a la otra persona.
  • Terminan la relación sin razón aparente y de manera repentina. 

Esta misma fuente señala que cuando la persona se siente enamorada puede presentar algunos de los síntomas clásicos de la ansiedad, estos son:

  • mareos
  • sequedad bucal
  • temor
  • náuseas o vómitos
  • sudoración
  • aumento de la frecuencia cardiaca
  • temblores
  • dificultad para respirar


¿Cómo podemos superar el miedo a amar?

El miedo a amar es un sentimiento normal cuando hemos tenido experiencias negativas, pero no debemos darle la oportunidad a que gobierne nuestras vidas.

Afortunadamente, podemos aprender a amar y, como ya dijimos, el primer paso es trabajar en el amor propio y la autocompasión. Para desarrollar estas cualidades podemos utilizar la meditación como recurso. Pues, diversos estudios en neurociencia señalan que quienes llevan a cabo esta práctica desarrollan diferentes frecuencias de las ondas alfa en el cerebro, en comparación con individuos que no realizan esta actividad.

Esto ayuda a estas personas a ver el mundo con un matiz más amable y con menos prejuicios hacia lo que les rodea. Aquello implica una menor actividad de la amígdala y una mayor sensación de conexión con los demás. Por tanto, si quieres empezar esta práctica, la meditación de bondad amorosa es un buen inicio.

Por otro lado, si sentimos cierto miedo a la relación con otra persona, es conveniente hacérselo saber para que sea partícipe de nuestro sentir. La comunicación es fundamental para superar nuestro miedo. Además, es necesario dejar atrás relaciones pasadas y vivir la nueva relación día a día.

Otras sugerencias para dejar de temerle al amor

De acuerdo con Donna Novak, doctora en psicología clínica, otras recomendaciones que podemos tener en cuenta a la hora de superar el miedo al amor son:

  1. Indagar sobre el inicio del temor. Para poder superar este miedo es necesario saber cómo y cuándo inició. Conocer su causa nos permitirá formular soluciones eficaces que resuelven el problema de base.
  2. Dejar de lado las posibilidades negativas. De nada nos sirve imaginar qué pasaría si… Fantasear con un futuro trágico, triste o negativo sobre las relaciones no es una buena forma de superar el temor, al contrario, es el camino directo para perpetuarlo. Por eso, lo mejor que podemos hacer es soltar esas posibilidades poco optimistas.
  3. Buscar a alguien que nos valore. Es posible que nuestro temor se deba también a no encontrar alguien que no nos comprenda y que no comparta nuestros principales valores. Por lo tanto, pensamos que la relación serpa un fracaso total, lo que nos lleva a replegarnos y no abrirnos a conocer a otros. Una forma de solucionar esto es relacionarnos con quienes comparten nuestros valores centrales.
  4. Acoger las cosas buenas del amor. Las relaciones románticas tienen sus puntos a favor también, no todo es tan negativo como nuestro miedo nos lo hace creer. Tomarnos unos minutos para pensar qué beneficios obtendremos del amor, nos ayudará a aliviar nuestro malestar y no permitirá alimentar la esperanza de tener una relación.
  5. Aceptar los fracasos del pasado. En ocasiones, nuestro pasado amoroso se instala en nuestra memoria para recordarnos que no vale la pena el amor, para decirnos que no lo merecemos. Una manera de lidiar con esto es aceptar los fallos que cometimos y el fracaso que vivimos. Así, podremos vivir el presente abiertos y dispuestos a disfrutar del amor, a pesar de las desilusiones del pasado.
  6. Solicitar ayuda profesional. Si no logramos superar el miedo al amor por nuestra propia cuenta, lo mejor es acudir a un profesional de la salud mental. Un psicoterapeuta sabrá cómo orientarnos en este proceso.

«No amar por temor a sufrir es como no vivir por temor a morir»

-Ernesto Mallo-

Lo contrario al amor: el miedo

En este artículo hemos manifestado que el odio no es el antagonista del amor, sino el miedo. Nuestros temores no nos permiten abrirnos al mundo y al encuentro romántico con otras personas. Son como una voz en nuestra cabeza que nos recuerda algunas experiencias amargas.

Al final de todo, el amor siempre vale la pena, aunque estemos dominados por nuestros miedos. Merece cada esfuerzo por superar aquello que no nos deja gozar de él.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.