¡No te contagies del pesimismo!
“El pesimismo es un juego seguro. Así no puedes perder nunca, solo puedes ganar. Es el único punto de vista desde el que nunca te sentirás decepcionado”
(Thomas Hardy)
Hay días en los que nada nos sale bien y nos sentimos desanimados. Pero cuando esta “racha de mala suerte“ se prolonga en el tiempo, puede que el pesimismo haga acto de presencia.
¿Es algo heredado?, ¿algo genético? No, el pesimismo es una postura negativa que adoptamos ante la vida.
Cualquier persona y situación puede contagiarte de su pesimismo. Las personas pesimistas tienen este poder al igual que las situaciones negativas y las cosas que no salen bien también tienen el poder de volverte pesimista de un momento a otro. Pero aunque no lo creas, ¡puedes huir de él!
Una persona pesimista tiene muchas posibilidades de caer en la depresión. Es algo muy doloroso que te mina emocionalmente, desgastándote y prolongándose en el tiempo si no le pones solución. El pesimismo solo atraerá más pesimismo, convirtiéndose en un círculo vicioso del que te costará salir.
“El pesimismo nunca
ha ganado ninguna batalla”
(Dwight D. Eisenhower)
La fatalidad y el desánimo ocuparán tu vida, pero tú puedes salir de esta situación de malestar. No te culpes, no abraces el pesimismo. Esfuérzate por hacerle frente para superarlo y regresar al optimismo que le brindará color a tu vida.
¡No todo está perdido! Tú puedes salir de este estado tan negativo.
¡No te compares!
Una persona pesimista suele compararse con los demás. Lo curioso es que muchas de esas comparaciones son erróneas. ¿Qué queremos decir con esto? Que idealizamos aquello con lo que nos comparamos cuando en realidad sea todo lo contrario.
¿Comparas la relación de un amigo con la tuya propia?, ¿tu vida con la de los demás? Piensa que a lo mejor están peor que tú, ¿quién te dice que sean felices, ¿que no tengan sus propios problemas? Al igual que en cualquier medio no vemos lo que hay detrás.
La comparación de una situación irreal y ficticia, pues nosotros la idealizamos, solo provocará que te decepciones contigo mismo. Esto no hará más que sumirte cada vez más en un pozo hondo y oscuro del que difícilmente podrás salir. ¡Cambia de actitud!
Una forma de evitar compararte con los demás es ¡hacer algo nuevo! Algo diferente, algo que te apetezca. Esto subirá tu autoestima, te hará feliz. Destacarás por tu nuevo reto y lo más importante es que vas a disfrutar. Arriésgate a hacer eso que tanto deseabas, pero que no te atrevías a llevar a cabo. ¿A qué esperas?
Recupera la confianza perdida
“El pesimista ve dificultades en cada oportunidad.
El optimista ve la oportunidad en cada dificultad”
(W. Churchill)
Sentirnos pesimistas es fruto de una serie de situaciones desdichadas en la que nos vemos envueltos. Esto hace que poco a poco perdamos la confianza en nuestras posibilidades para conseguir lo que deseamos, para llevar a cabo proyectos, para hasta hacer o decir algo.
Es aquí cuando se desarrolla el miedo al pesimismo. Un miedo que hay que vencer y evitar que se prolongue en el tiempo. Cuanto más nos encontremos en este estado, más difícil nos resultará salir de él.
Para recuperar esta confianza perdida debes sacar fuerzas de donde sea, algo que requiere esfuerzo y actitud. ¿Qué tal si sales a dar un paseo? Esto te ayudará a pensar, reflexionar sobre tu vida, encontrar opciones ¡buscar una salida! Este estado de relajación, de estar contigo mismo te ayudará a despejar la mente y verlo todo más claro.
Pero no es necesario que te aísles de todo y de todos. Reflexionar y estar solos es bueno y necesario, pero si no tenemos cuidado puede conducirnos a un estado de ansiedad y depresión.
Socializar también será muy positivo para salir de ese estado de pesimismo que te abruma. Esto te ayudará a verlo todo con otros ojos, ¡puedes pedir consejo! Tus amigos o tu familia pueden hacer que veas la vida de otra manera pero, ¡ojo!, aléjate de los pesimistas.
Sentirse negativo y pesimista en algunas ocasiones es ¡totalmente normal! Siempre y cuando este estado no se prolongue en el tiempo y empiece a afectar a tu vida. Cuídate de estar con gente pesimista, reflexiona sobre tu vida y haz ¡algo nuevo! Poco a poco lograrás salir de ese estado de pesimismo para pasar al optimismo y al bienestar que te llevarán a la felicidad.