¿Qué es la Criminología y cuáles son sus objetos estudio?

Si te preguntamos qué es la Criminología o a qué se dedica un criminólogo o una criminóloga… ¿Sabrías contestar con exactitud? Ahora, al leer esto sabrás qué responder.

Revisado y aprobado por la psicóloga Gema Sánchez Cuevas.

Escrito por Vanessa Viqueira

Última actualización: 07 agosto, 2023

La Criminología, como disciplina dentro del ámbito científico, se origina solo a comienzos del siglo XIX. Esto demuestra que se trata de una ciencia nueva, pero que se considera muy útil y que sienta las bases de una comprensión más formal del comportamiento antisocial. Hasta hace poco la sociedad no era consciente de su gran valor.

Se caracteriza por ser una ciencia interdisciplinar, pues se nutre de otras ciencias aplicadas. Sus objetos de estudio son la delincuencia, el delito, la víctima, los delincuentes y el control social.

Definición de Criminología

Es una disciplina que se encuentra en plena expansión, tanto en lo que respecta a su dimensión científica como al ámbito aplicado. Por ello, definimos la Criminología como una ciencia interdisciplinar, es decir, es el resultado de la confluencia de conocimientos y metodologías que provienen de otras disciplinas, como el Derecho, la Sociología, la Psicología, la Psiquiatría, la Antropología y la Medicina Forense, entre otras.

Una de las primeras constataciones realizadas por la Criminología es que la delincuencia es un problema real y variable en intensidad, puede depender de las sociedades humanas. Otra conclusión relevante es que la delincuencia es un fenómeno construido a partir de la reacción social de rechazo que provoca entre la ciudadanía.

Con base en estas dos premisas, la Criminología es aquella ciencia que estudia el comportamiento delictivo, pero también la reacción social frente a éste. En una publicación de la revista Derecho y cambio social se define como «ciencia social encargada del estudio de la conducta delictiva y antisocial y los mecanismos de reacción social empleados para su control».

Objetos de estudio

Respecto al objeto u objetos de estudio de la Criminología, existen dos posturas claramente diferenciadas: la primera es reduccionista y sostiene que su objeto de estudio es el mismo que el del Derecho Penal: el delito. Quienes defienden esta postura, en verdad afirman que la Criminología carece de un objeto de estudio propio. La segunda, y más seguida en la actualidad, mantiene que sus objetos de estudio son cinco:

• La delincuencia, como fenómeno social.
• El delito, como acción individual pero también como acción grupal.
• Los delincuentes, en cuanto actores que cometen los delitos.
• Las víctimas, como las personas pasivas que sufren las consecuencias de los delitos.
• El control social, como reacción frente al delito.

Esta segunda postura, al igual que la anterior, también ha recibido críticas. Quienes critican la misma, mantienen que no es posible construir una auténtica ciencia con pretensiones que son tan diversificadas.

La Criminología tiene diversos fines, entre los cuales destacan la prevención e intervención del fenómeno delictivo. De esta manera, se pretende así conseguir un control y una reducción de los fenómenos criminales, así como también la reinserción de los penados y las penadas.

Clases de Criminología

De acuerdo con el libro Manual básico de criminología de Carlos Elbert (2021), podemos delimitar cuatro clases de esta disciplina:

1. Científica: esta clase alude a un rubro de teorías y métodos que abarca la criminalidad como fenómeno individual y social, y engloba al delincuente, a la víctima y a la sociedad.
2. Aplicada: está conformada por los aportes de la Criminología científica y se caracteriza por ser práctica y por ir más allá de los límites del sistema penal.
3. Académica: es la Criminología del aula, de la enseñanza. Está conformada por la sistematización y la divulgación del conocimiento, con el objetivo de instruir y entrenar.
4. Analítica: su propósito es analizar si las otras clases de Criminología cumplen con su objetivo. Su tarea principal es la supervisión.

Esta disciplina se manifiesta de varias formas, siendo cada una esencial para su comprensión y desarrollo. Gracias a sus diversas clases, el criminólogo puede desarrollas nuevas teorías, formar a otros, aplicar los conocimientos y supervisar el quehacer de cada vertiente.

El rol del criminólogo

La función de este profesional  pueden varias dependiendo de la clase de Criminología a la que se adscriba. No obstante, hay algunas características generales de su rol. Estas son las siguientes:

• Observa: describe los sucesos tal como son o como él los encuentra.
• Ideólogo: genera razonamientos que respaldan o desafían la situación actual y propone ideas sobre cómo deberían ser las circunstancias ideales
• Teórico: explica las asociaciones que existen dentro del campo de la criminología.
• Práctico: contribuye a que las circunstancias evolucionen como deberían.
• Metodológico: acoge los estándares y pautas de la metodología científica para llevar a cabo su labor.

Otras de las responsabilidades del criminólogo son las siguientes:

• Investigación y análisis: analizan datos para comprender la naturaleza, la etiología y los efectos negativos del crimen. Esto puede incluir el estudio de patrones criminales, perfiles de delincuentes, y las circunstancias sociales o económicas que pueden contribuir al delito.
• Asesoramiento en políticas públicas: aconsejan a los gobernantes y a las fuerzas del orden sobre cómo las políticas y las prácticas pueden afectar al crimen en una sociedad. Esto puede incluir recomendar cambios en las políticas.
• Educación: Algunos de estos profesionales trabajan en entornos académicos, donde enseñan a futuros criminólogos, realizan investigaciones que contribuyen al desarrollo teórico y práctico de la disciplina.
• Trabajo con delincuentes y víctimas: pueden trabajar con delincuentes, en un esfuerzo por entender sus motivaciones y ayudar a prevenir futuros delitos. Asimismo, trabajan con las víctimas para brindarles apoyo y asesoramientos, entre otras cosas.
• Prevención del delito: los criminólogos también pueden ejercer funciones de prevención y usar sus conocimientos para llevar a cabo programas sociales que sean capaces de reducir las tasas de criminalidad en una comunidad.

En resumen, el criminólogo juega un papel crucial en la sociedad al ayudar a comprender y abordar el crimen, empleando técnicas de investigación. Asimismo, pueden identificar patrones y causas de comportamiento criminal, desarrollar perfiles de criminales, y sugerir estrategias de prevención y rehabilitación.

La Criminología y la Criminalística no son sinónimos

A pesar de que en la actualidad buena parte de la comunidad piense que la Criminalística y la Criminología son términos que aluden a lo mismo, no es así.

Como ciencia que aún se encuentra en fase de consolidación, la Criminología se ha dado a conocer, en gran medida, a través de programas y series televisivas que distan mucho de la realidad. En ellas se tiende a realizar un mal uso del término Criminología para referirse a funciones que son propias de la Criminalística, de ahí la confusión.

¿Qué diferencia a la Criminología de la Criminalística?

La Criminalística es la disciplina científica que determina la existencia de un hecho criminal y que además se encarga de la recogida de pruebas e indicios criminales.

La Criminología, por su parte, intenta responder, a través de la investigación empírica, a preguntas acerca de qué factores sociales o individuales influyen en el comportamiento delictivo que muestran las personas, cómo influyen los sistemas de control en la sostenibilidad de la conducta delictiva, etc.

Además, la Criminalística también ayuda en la identificación de las personas responsables del hecho delictivo y de su grado de participación. A pesar de que, tal como hemos visto, ambas disciplinas son diferentes, se complementan.

Conclusión

La criminología, aunque es una disciplina reciente, ha demostrado ser fundamental para comprender y abordar el problema del crimen en nuestra sociedad. Además, al ser una ciencia interdisciplinaria, puede realizar grandes aportes basándose en otras ciencias aplicadas.

Sus distintas clases (científica, aplicada, académica y analítica) permiten una aproximación multifacética al fenómeno criminal, incluyendo el estudio de la delincuencia, los delincuentes, las víctimas y el control social. Gracias a ella se puede tener un acercamiento científico a los delitos que se cometen en nuestras sociedades.