Si eres una persona creativa, enhorabuena: tu cerebro funciona de manera diferente

Si eres una persona creativa, enhorabuena: tu cerebro funciona de manera diferente
Valeria Sabater

Escrito y verificado por la psicóloga Valeria Sabater.

Última actualización: 21 septiembre, 2019

El cerebro de la persona creativa es como un salón de grandes ventanales. En ese espacio infinito la inteligencia se divierte y la intuición se deleita, lo imposible se vuelve posible y lo ordinario se transforma en poesía. Nada es absurdo para esa mente que sabe muy bien que detrás de lo común, se halla lo extraordinario.

A día de hoy, aún hay quien piensa que en la ciencia no hay lugar para la imaginación. Todos los que opinan de este modo, probablemente no hayan leído ni una sola de las aventuras de Sherlock Holmes.

Pocas veces se nos enseña de forma tan clara y entretenida que entre la observación y la deducción hay un proceso fascinante llamado creatividad. Es la parte más festiva, más arriesgada y vital de todos nuestros procesos mentales.

“Nada resulta más engañoso que un hecho evidente”

-Sherlock Holmes-

Personalidades singulares

¿Qué tiene el cerebro de la persona creativa que no tienen los demás? Si pensamos en el carácter del propio Sherlock Holmes o si visualizamos a Salvador Dalí, a Nikola Tesla, Van Gogh, Mozart o Leonardo da Vinci intuimos ya ciertos rasgos donde lo brillante se entremezcla a veces con dimensiones personales algo complejas.  

Tanto es así, que el propio Mihaly Csikszentmihalyi, después de más de 30 años de investigación al respecto de este tema lo tuvo claro. La persona creativa no es un solo individuo, son muchos “yos” en un mismo espacio. Es una entidad compleja, dinámica, a instantes oscura, pero siempre vibrante y receptiva a su entorno.

Sin embargo, hay un aspecto que también debemos dejar claro: la creatividad se entrena. Aunque a muchos nos pueda parecer un don, esta capacidad es como un músculo poderoso que podemos ejercitar cada día.

Noño haciendo de Sherlock holmes

Lo que esconde el cerebro de la persona creativa

 

En 1960 se llevó a cabo una de las investigaciones más fascinantes de la historia. Frank X. Barron, pionero en el estudio de la psicología de la creatividad, invitó a una serie de personalidades de su época a pasar unos días en una residencia de estudiantes de la Universidad de California, en Berkeley.

Entre ese grupo de invitados estaban escritores como Truman Capote o Frank O’Connor, así como conocidos arquitectos, científicos, matemáticos. El propósito era sencillo a la vez que apasionante: averiguar qué les hacía diferentes al resto y de qué manera funcionaba la maquinaria de sus cerebros.

Las conclusiones a las que se llegó no distan demasiado a las que seguimos manteniendo a día de hoy. Esas conclusiones son las siguientes:

Inteligencia y creatividad no están relacionadas

Lejos de lo que muchos puedan pensar el cociente intelectual no se relaciona con una alta creatividad. Es más, a día de hoy no existe ningún test para identificar a la persona creativa. Estamos ante una dimensión tan vasta, ilimitada y multidimensional que es imposible recogerla en las clásicas pruebas estandarizadas.

El lado oscuro del genio creativo

Persona creativa imaginando figuras

Algo curioso que observaron el doctor Barron y su colega Donald MacKinnon es que la creatividad, a menudo, puntuaba un poco más alto en el índice de psicopatología. Hasta un 15% por encima de la media. Ese supuesto “lado oscuro” tenía una explicación muy interesante.

  • La persona creativa tiene pequeños rasgos que encajan en dicha personalidad. Estas personas son introspectivsas, a veces desafiantes, van más allá de lo establecido y a su vez, asumen riesgos.
  • No obstante, su salud mental era superior a la media. La introspección no es patológica, al contrario, es una herramienta tremendamente eficaz para tomar tener una mejor conciencia de uno mismo.

La persona creativa está conectada a su mundo interior y, a su vez, es tremendamente receptiva a lo que les envuelve. En esta armonía perfecta está la magia: en conocer sus oscuridades pero en alimentarse siempre de la luz del entorno.

Si eres una persona creativa eres una persona valiente

Las personas altamente creativas en realidad, abundan muy poco. Puede parecer descorazonador, pero si esto es así se debe a una razón muy concreta, la persona creativa se arriesga y va más allá de lo establecido sin importarle lo que digan o hagan los demás.

Asimismo, tiene la habilidad de asumir riesgos calculados y la capacidad de pensar de forma muy poco habitual. No actúan en base a objetivos externos, a refuerzos que otros les puedan ofrecer. Su motivación es intrínseca, de ahí su alta autoexigencia.

cerebro-gif

El arte del desorden y la magia de la complejidad

La persona creativa hace malabares con su mente. En el caos hallan el equilibrio, el desorden es un desafío y lo complejo en sus mentes, se torna simple.

“La imaginación es la voz del atrevimiento”

-Henry Miller-

En sus mentes habitan comandantes que trazan nuevos rumbos en base a experiencias previas. Hacen simulaciones como el mejor de los arquitectos. Reflexionan como auténticos yoguis para tomar distancia de lo ordinario alcanzando así lo extraordinario.

Asimismo, y viendo todos los afinados procesos que llevan a cabo sus cerebros, podemos deducir que no solo hacen uso del famoso hemisferio derecho, ahí donde se contiene lo intuitivo, los colores, las formas o la imaginación.

creatividad en forma de paleta de colores

La persona creativa es una optimizadora del potencial cerebral. Hablábamos al inicio de Sherlock Holmes. El famoso personaje de Conan Doyle es el mejor ejemplo de cómo una persona creativa hace uso de ambos hemisferios.

Uno empieza observando, haciendo uso de la lógica, de la información lineal, de las secuencias, del análisis y el lenguaje. Más tarde, del hemisferio izquierdo pasamos al derecho para “rellenar” los datos y los vacíos que nos faltan, para ampliar perspectivas mediante la imaginación.

Es así como creamos, es así como deducimos y transformamos nuestro mundo para tomar decisiones más acertadas, más hábiles, más creativas. Es algo maravilloso y lleno de posibilidades que merece la pena propiciar cada día. Atrévete a pensar de modo diferente.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.