Gabapentina, un antiepiléptico para el dolor neuropático
La gabapentina, también conocida por su marca comercial Neurontin, es un fármaco antiepiléptico. En España, fue comercializada por primera vez, con este uso, en 1995, aunque había sido ya aprobada en Estados Unidos un año antes.
Posteriormente, en 2002, se añadió una nueva indicación en su ficha técnica: se vio su utilidad para el tratamiento del dolor neuropático, en concreto, de la neuralgia postherpética. Actualmente, también está indicado en otras neuropatías dolorosas, como puede ser la diabética.
¿Qué es la gabapentina?
La gabapentina es un anticonvulsivante de segunda generación y se considera un fármaco neuromodulador. Está relacionado estructuralmente con el neurotransmisor GABA o ácido gamma-aminobutírico. Junto a la pregabalina, forman el grupo llamado ‘gabapentoides’, útiles como analgésicos sistémicos.
Tras su administración oral, suele ser bien tolerado por los pacientes. Por otro lado, se elimina del cuerpo por la orina, principalmente, sin apenas metabolizarse.
¿Para qué se utiliza?
Como hemos dicho, existen dos indicaciones principales de gabapentina, según su ficha técnica:
- Epilepsia:
- Se utiliza, junto con otros fármacos, en el tratamiento de crisis epilépticas parciales en adultos y niños mayores de 6 años.
- Se utiliza como único fármaco en el tratamiento de crisis epilépticas parciales en adultos y adolescentes mayores de 12 años.
- Tratamiento del dolor neuropático periférico: se utiliza en adultos para el dolor neuropático periférico provocado, por ejemplo, por neuropatías diabéticas o postherpéticas.
Sin embargo, la gabapentina es utilizada, a menudo, para otros usos no aprobados oficialmente (off-label). Entre ellos, se encuentran:
- Prevención de los episodios migrañosos, aunque algunos estudios afirman que no existen pruebas que confirmen la eficacia de la gabapentina para esta indicación.
- Tratamiento del nistagmo. Tampoco existen muchos estudios que lo corroboren, aunque se ha utilizado en diversas ocasiones con este fin.
- Tratamiento de los trastornos de ansiedad: podría ser útil, especialmente, en el tratamiento antiepiléptico de pacientes con trastornos psiquiátricos que presentan ansiedad. Se ha visto que mejora el estado de ánimo y el bienestar general de estos pacientes.
- Trastorno bipolar, aunque muchos estudios no encuentran efectividad de la gabapentina para esta indicación.
- Tratamiento de adicciones al alcohol, cocaína y metanfetamina, junto con otros fármacos.
- Tratamiento de la espasticidad causada por la esclerosis múltiple.
¿Qué es el dolor neuropático?
El dolor neuropático es aquel dolor crónico provocado por daños en los nervios. Se trata de un dolor característico que combina algunos síntomas, como:
- Calor y quemazón.
- Dolor pulsátil.
- Dolor punzante agudo.
- Espasmos.
- Hormigueo.
- Entumecimiento.
Tiene un origen neurológico y, por tanto, es difícil de diagnosticar y de tratar. Es una patología que afecta mucho a la calidad de vida de los pacientes y, a menudo, va ligada a otros trastornos, como la ansiedad o la depresión.
Mecanismo de acción de la gabapentina
Aunque estructuralmente, como hemos dicho, la gabapentina es un análogo del neurotransmisor GABA, no se une a los receptores del GABA (GABA-A y GABA-B) ni tampoco interfiere en su metabolismo. Más bien, el mecanismo de acción está relacionado con los canales de calcio tipo N dependientes de voltaje; en concreto, tiene gran afinidad por la subunidad alfa-2-delta.
Así mismo, según se ha visto, reduce la liberación de neurotransmisores excitatorios, como el glutamato, en determinadas regiones del sistema nervioso central. Con esto consigue una disminución de la excitabilidad neuronal.
Efectos secundarios
Los principales efectos adversos que pueden surgir con mayor frecuencia en el tratamiento con gabapentina son:
- Infección viral.
- Somnolencia.
- Mareos.
- Ataxia.
- Fatiga.
- Fiebre.
Otras posibles reacciones adversas son:
- Leucopenia.
- Anorexia.
- Aumento del apetito y aumento de peso.
- Depresión y/o ansiedad.
- Cefaleas.
- Convulsiones.
- Insomnio.
- Hipertensión.
- Náuseas y vómitos.
- Erupción cutánea.
No obstante, se considera un fármaco bastante seguro. Sus efectos adversos más frecuentes, como la fatiga o la somnolencia, suelen desaparecer poco tiempo después de instaurarse el tratamiento. Aún así, en caso de que forme parte de tu tratamiento, no dudes en consultar con el especialista cualquier aspecto que te preocupe.
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