Qué es la atención alternante y cómo podemos ejercitarla
Imagina que estás preparando un almuerzo: mientras lavas y cortas las verduras para la ensalada, también debes estar pendiente de que la carne en la parrilla no se queme. Intercalas tu atención entre cortar los ingredientes y controlar la cocción.
En este escenario, estás utilizando un tipo de atención muy relevante en la vida diaria. Puedes ejercitarla mediante juegos de secuencia, como «Simón dice», o de ritmo y música, como Guitar Hero.
A continuación, profundizamos en qué consiste la atención alternante, algunos ejemplos diarios, al tiempo que exploramos diferentes formas para mejorarla y los ejercicios para evaluarla.
¿Qué es la atención alternante?
También conocida como atención alterna, es la habilidad de cambiar rápidamente el foco atencional entre tareas que requieren diferentes formas de pensar, mientras se controla qué información se está procesando en cada momento.
En el modelo jerárquico atencional propuesto por Sohlberg y Mateer (1987) este tipo de atención se sitúa en el cuarto nivel. Cada nivel es más complejo que el anterior. Esto significa que para realizar una tarea que requiera cambiar de enfoque, primero es necesario poder concentrarse en un estímulo (atención focalizada), mantener esa concentración (atención sostenida) y seleccionar lo importante (atención selectiva).
Ejemplos de la vida cotidiana
Hacemos uso de esta función ejecutiva cada día, incluso sin notarlo. La atención alterna es muy significativa en la vida cotidiana, ya sea en el trabajo, en casa, en situaciones sociales o académicas. Repasemos algunas de ellas:
- Conducir: los conductores deben alternar su atención entre diferentes estímulos, como señales de tráfico, peatones cruzando y otros vehículos, mientras mantienen el control del volante y la velocidad.
- Cocinar: durante la preparación de una receta, se necesita atención alternante para seguir los pasos del proceso, controlar diferentes tiempos de cocción y coordinar múltiples ingredientes y utensilios.
- Hacer deporte: por ejemplo, en el fútbol, los jugadores deben cambiar de forma rápida su atención entre la posición del balón, los movimientos de sus compañeros y los movimientos de los oponentes.
- Estudiar: los estudiantes utilizan este tipo de atención de forma constante en clase al escuchar al docente, mientras toman apuntes.
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¿Qué sucede si esta función cognitiva se ve afectada?
Cuando este tipo de atención está alterada, enfrentamos desafíos considerables para responder a las demandas del entorno. Podríamos necesitar mucho más tiempo para modificar el foco atencional entre un estímulo y otro, lo cual impacta en nuestras tareas domésticas, productividad laboral, rendimiento académico y habilidad para interactuar de manera ágil en situaciones sociales. Por ello, es crucial practicar y fortalecer esta función cognitiva.
¿Cómo mejorar la atención alterna?
Si bien la presencia de ciertas enfermedades cognitivas o trastornos neurobiológicos, como el TDAH, pueden hacer que la mejora de la atención alterna sea más difícil de alcanzar o requiera un enfoque adaptado. La mayoría de las personas pueden trabajar este tipo de atención con esfuerzo y técnicas adecuadas, como las mencionadas a continuación:
Juegos de atención
Los juegos son una herramienta excelente para ejercitar las funciones cognitivas de manera lúdica y sin presiones. Al participar en juegos que demandan cambios rápidos entre diferentes tareas o estímulos, puedes fortalecer tu capacidad atencional. Algunos ejemplos incluyen los siguientes:
- Juegos de roles.
- Juegos de estrategia, como el ajedrez.
- Juegos de ritmo y música, como el Guitar Hero.
- Juegos de secuencias, como el «Simón dice» o el Uno.
Actividades deportivas
Deportes como el baloncesto, el tenis o el fútbol te desafían a cambiar tu foco atencional, según el ritmo del partido. Con múltiples estímulos en juego, debes priorizar lo más relevante en cada momento y enfrentarte a decisiones rápidas. Así, mejoras tu agilidad mental y tu habilidad para decidir y actuar en fracciones de segundos.
Attention Process Training (APT)
El Attention Process Training (APT) es un método terapéutico que utilizan los profesionales de la salud mental para la rehabilitación cognitiva en personas que sufrieron alguna lesión cerebral.
Se lleva a cabo en varias sesiones estructuradas donde los pacientes realizan tareas diseñadas para desarrollar su capacidad de concentrarse en la información relevante, mientras ignoran distracciones. Por ejemplo, escuchar pistas de audio con números u otra información y responder solo a estímulos específicos.
A medida que el paciente progresa y demuestra buen dominio de las tareas iniciales, avanza a una versión más desafiante del APT que incluye atención alternante. Por ejemplo, se le pide que alterne entre escuchar nombres de deportes y nombres de animales.
Este tipo de intervención se usa para problemas de atención significativos y requiere de supervisión profesional para adaptar y guiar el proceso según las necesidades de cada persona.
¿Cómo se evalúa este tipo de atención?
Existen diversas pruebas y técnicas diseñadas para medir la capacidad de cambiar entre diferentes estímulos y tareas de forma eficaz y veloz. Algunas de ellas son útiles para detectar signos de deterioro cognitivo que podrían sugerir demencia. Nos referimos a las siguientes:
Trail Making Test (TMT)
Es una prueba neuropsicológica que evalúa varias funciones cognitivas, entre ellas la atención alterna. Consta de dos partes: TMT- A y TMT-B. En la primera, el participante debe conectar números en orden consecutivo. En la segunda, debe alternar entre números y letras, conectándolos en orden numérico-alfabético, lo que requiere cambiar el enfoque entre diferentes tipos de información.
Test de Stroop
El Test de Stroop es una prueba con palabras impresas en diferentes colores, donde el color puede coincidir o no con el significado de la palabra. Por ejemplo, la palabra «verde» puede estar impresa en tinta roja. La tarea del participante es ignorar el significado de la palabra y nombrar el color de la tinta lo más rápido posible.
Test de Símbolos y dígitos (SDMT)
Se presentan pares de símbolos (como formas geométricas) y dígitos (números del 1 al 9) al participante y se le pide que empareje cada símbolo con su correspondiente número en una tabla dentro de un límite de tiempo.
La capacidad de alternar la atención se evalúa de forma indirecta en el SDMT, por ejemplo, al observar cómo el participante maneja la tarea de emparejar símbolos y dígitos. Sin embargo, la prueba se centra más en evaluar la velocidad de procesamiento y detectar posibles deterioros cerebrales en niños y adultos.
¿Alternancia de atención o multitasking?
A menudo, se considera que el multitasking real (hacer varias cosas a la vez) es limitado en los humanos, ya que nuestro cerebro cambia rápidamente de una tarea a otra en lugar de hacerlas al mismo tiempo.
Los científicos sugieren que lo que solemos llamar multitarea, en realidad, involucra una rápida alternancia de atención entre diferentes actividades. Por ejemplo, cuando revisas correos, mientras participas de una reunión, intercalas tu atención entre una cosa y otra, pero no haces ambas en simultáneo. Es como si estuvieras jugando un ping pong mental.
Una función cognitiva que puedes ejercitar en tu vida diaria
Practicas la atención alterna en tu día a día para adaptarte a las demandas del momento —sin siquiera darte cuenta—, por ejemplo, al cocinar, estudiar o conducir. Si buscas fortalecerla de manera más consciente, puedes hacerlo mediante juegos, deportes o entrenamientos especializados.
Sin embargo, es importante no abusar de esta capacidad. Cuando la usamos en exceso y de forma indiscriminada, podemos experimentar fatiga mental y dificultades para mantener la concentración en una sola actividad o estímulo. Aprende a gestionarla con cuidado.
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