¿Qué es un «cuidador de viaje» en una experiencia psicodélica?
El «cuidador de viaje» en una experiencia psicodélica tiene como función garantizar la seguridad de las personas durante la administración y efecto de las sustancias. Estas drogas se consumían con fines recreativos, pero en los últimos años se han convertido en un recurso con un gran potencial en los ámbitos clínicos y terapéuticos.
Justo ahora es un momento clave en lo que se refiere a los tratamientos con base en psilocibina, MDMA o LSD. Una indagación publicada por Current Psychiatry Reports refiere que se trata de un campo emergente, en el cual combinar este abordaje con la terapia psicológica puede transformar la atención a la salud mental.
Esto explica la necesidad de capacitar profesionales que acompañen y asistan a las personas durante la administración de tales fármacos alternativos. Es un tema de gran interés en el que vale la pena profundizar.
Las investigaciones demuestran que las personas que usaron psicodélicos en un entorno clínico, evidencian avances significativos en la curación de condiciones clínicas como los trastornos de estrés postraumático y la depresión mayor.
¿Qué son las terapias psicodélicas?
Las sustancias psicodélicas arrastran consigo mala fama, desconfianza y prejuicios; no dejan de ser un tipo de drogas con serios efectos. Ahora bien, tal y como destaca una investigación en el Social History of Medicine, a partir de los años 50 inició una profunda labor para usar estas fórmulas con fines terapéuticos, en concreto, para la salud mental.
El doctor Humphry Osmond descubrió el potencial de estas tratando adicciones como el alcoholismo. Así, desde el siglo pasado hasta la actualidad, se realizan cientos de ensayos sugiriendo que la aplicación de estos modelos en entornos clínicos es seguro y eficaz.
Las terapias psicodélicas se alzan ya como un método de intervención prometedor frente a varios trastornos psicológicos y dispone, además, de un amplio respaldo científico.
El centro Johns Hopkins, por ejemplo, lleva años desarrollando medicaciones con psilocibina para el abordaje de los síntomas de la ansiedad, de los traumas y las adicciones.
Es más, desde el Imperial College London resaltan los beneficios de la terapia con psilocibina frente a la depresión, logrando con ella que las redes cerebrales alcancen una mejor interconexión, integración y flexibilidad. Algo esencial para favorecer cambios en el enfoque mental y emocional de esta condición.
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«Cuidador de viaje» en una experiencia psicodélica: qué es y cuáles son sus funciones
El efecto de sustancias como la psilocibina, la ayahuasca, el LSD o el MDMA empieza a los 15 minutos y puede durar hasta 12 horas. El «cuidador de viaje» en una experiencia psicodélica tiene como principales funciones informar, acompañar, guiar y cuidar antes, durante y después de ese periodo.
Cabe señalar, eso sí, que esta figura siempre ha existido; bien en el ámbito recreativo o en escenarios con fines religiosos y/o espirituales.
Pero en vista de que los psicodélicos ya forman parte de muchos entornos clínico-terapéuticos, se ha vuelto necesario capacitar a los profesionales en las competencias de los «cuidadores de viajes psicodélicos». Mira, a continuación, sus atribuciones.
Los cuidadores psicodélicos o de viaje garantizan que la administración y los efectos de los alucinógenos sean siempre seguros.
Funciones de los cuidadores psicodélicos
Instituciones como el Centro Nacional de Información Biotecnológica y la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos llevan a cabo buena parte de la investigación relativa a la terapia psicodélica. Es importante considerar que, en la actualidad, aún no existe una regulación concluyente sobre cómo deben administrarse estas sustancias.
Se recurre a lo conocido como «microdosificación»: administración de una décima parte o incluso una vigésima parte de una dosis normal. El «cuidador de viaje» en una experiencia psicodélica apoya al paciente tanto en las sesiones preparatorias e informativas, como durante y después del consumo de los tratamientos. Además, se encarga de los siguiente:
- Favorece que el individuo se sienta cómodo en todo momento.
- Esta figura procura no ser intrusiva y evita que existan distracciones externas.
- Procura que la persona esté siempre en un entorno seguro donde ningún elemento suponga una amenaza.
- Utilizará afirmaciones positivas que transmitan confianza y tranquilidad, contribuyendo a que la persona diferencie lo que es real de lo que no.
- Una vez ingerida la dosis, el cuidador psicodélico guía al paciente para que experimente, de manera sosegada, todos los efectos.
- Acompaña para que los sentimientos, pensamientos y sensaciones experimentados no sean turbadores, sino todo lo contrario. El propósito es que los psicodélicos se complementen con la terapia psicológica y el paciente integre esas vivencias.
- El «cuidador de viaje» en una experiencia psicodélica sabe actuar en caso de que surjan reacciones adversas, como la aparición de la paranoia u otros efectos indeseados. Pensemos que cada individuo puede reaccionar de un modo diferente a estas sustancias psicoactivas.
¿Quién puede ser un «cuidador de viaje» en una experiencia psicodélica?
La Universidad de Chile dispone de un estudio donde analiza la experiencia de los terapeutas especializados en psicoterapias asistidas con psicodélicos. Es destacable que la figura de estos cuidadores se normaliza en el ámbito clínico, a pesar de que este rol siempre existió fuera de ellos y con fines lúdicos.
- Los profesionales de la salud mental son los más indicados para asumir las competencias de cuidadores.
- Médicos o psiquiatras habilitados en este ámbito conocen los efectos de las sustancias y saben cómo administrarlas.
- Especialistas en psicoterapias psicodélicas saben guiar a los pacientes, para que estas sustancias tengan un efecto beneficioso en la salud mental.
- Un buen «cuidador de viaje» psicodélico sabe que estos compuestos cumplen un fin médico y no recreativo. El objetivo último es abordar el trauma, la depresión o la adicción que sufra el paciente.
Aunque los «cuidadores de viajes psicodélicos» siempre han existido y se alzaban como esa figura sobria que no consumía, para ayudar a quien se le administraba estas drogas, en la actualidad, los profesionales de la salud se habilitan en esta función.
Advertencia sobre el uso de psicodélicos
Las sustancias psicodélicas cambian de forma temporal el estado de ánimo, las percepciones y pensamientos de una persona. No es recomendable usar estas drogas fuera de entornos médicos controlados. Si bien son muchas las personas que dicen consumirlas de forma recreativa, para mejorar su bienestar o por mero interés personal o espiritual, sus efectos pueden ser altamente peligrosos.
La Universidad de Hertfordshire puntualiza como sintomatología patológica asociada el trastorno de percepción persistente por alucinógenos. Es decir, lo que se experimenta es una alteración de la conciencia de forma prolongada e incluye síntomas depresivos, alucinaciones, psicosis, alteración del pensamiento, etc. Esto es común entre quienes consumen de forma habitual tales compuestos.
Evita, por tanto, recurrir a los psicodélicos, sobre todo, sin supervisión especializada; nunca se sabe cómo reaccionará el cerebro y el organismo, aunque lo hagas solo una vez y por mera curiosidad. En la actualidad, no se conocen con exactitud los mecanismos de acción de dichas sustancias. Sé prudente.
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