Los 27 tipos de sentimientos
¿Qué tipos de sentimientos existen? Antes de hablar de ello, diferenciemos emoción de sentimiento. Cuando experimentamos una emoción, hay un estímulo que desencadena esta respuesta automática. En cambio, los sentimientos se refieren al modo en el que nos relacionamos con esa emoción; sería la percepción que tenemos de dicha emoción.
En este artículo hablaremos de 27 tipos de sentimientos (aunque debemos tener en cuenta que algunos de ellos también podrían considerarse una emoción). ¿Qué los caracteriza? Vamos a descubrirlo.
Los 27 tipos de sentimientos: características y para qué sirven
Los estímulos y las situaciones que vivimos desencadenan emociones y sentimientos. Las emociones cumplen una función adaptativa, aunque a veces no las gestionamos de manera adecuada, lo que nos puede generar sufrimiento.
Otra cuestión es que los sentimientos que estas nos generan nos conduzcan a sensaciones placenteras o no, a conductas que nos dañan o no, etc. (pero esa ya sería otra cuestión). Sin más preámbulo, te contamos en qué consisten los 27 tipos de sentimientos.
Euforia
La euforia es un sentimiento que nos lleva a sentir una especie de “subidón”. Cuando nos sentimos eufóricos, nuestra percepción de la vida es magnífica; se trata de un sentimiento típico de los episodios maníacos del trastorno bipolar.
Optimismo
El optimismo es otro de los tipos de sentimientos que conlleva ver la vida de forma optimista y esperanzada.
Gratitud
La gratitud es un sentimiento de agradecimiento hacia la vida, las personas, las cosas… Hay estudios que relacionan la gratitud con la felicidad.
Afecto
El afecto se define como una sensación placentera al conectar con las personas. Sin embargo, el afecto también puede ser negativo (cuando ya no hablamos tanto de un sentimiento).
Admiración
Es el sentimiento que nace cuando sentimos aprecio hacia algo o alguien. Sentimos admiración por las cosas que nos parecen interesantes, bellas, diferentes, especiales…
Felicidad
La felicidad puede considerarse un sentimiento pero también un estado. Tiene relación con la forma en la que valoramos la vida, siendo esta de forma positiva, en su conjunto. La felicidad nos produce alegría y también calma.
Alegría
La alegría es un sentimiento que acorde con un buen estado de ánimo. Cuando estamos alegres tenemos ilusión, ganas de hacer cosas, y podemos disfrutar.
Amor
El amor es un sentimiento complejo e intenso (aunque hay muchos tipos de amor). Se trata de un sentimiento de vivo afecto e inclinación hacia personas a las que les deseamos todo lo bueno.
Esperanza
Otro de los tipos de sentimientos es la esperanza. Se define como ‘la creencia de que podemos lograr los objetivos que nos proponemos’. Implica ilusión y una visión optimista del futuro.
Humor
El humor nos hace percibir los estímulos como algo divertido. También nos hace ser a nosotros divertidos.
Satisfacción
Implica una sensación de bienestar o placer. La sentimos cuando se ha colmado un deseo o cuando se ha cubierto una necesidad.
Sorpresa
La sorpresa es la reacción que emitimos cuando percibimos algo como novedoso, imprevisto o extraño.
Agrado
El agrado se define como la ‘afabilidad, un modo agradable de tratar a las personas‘. Pero también puede ser otro de los tipos de sentimientos, que surgen cuando las cosas (o personas) nos producen admiración o satisfacción, cuando nos gustan.
Indignación
La indignación es un sentimiento de malestar que experimentamos cuando consideramos algo injusto.
Compasión
Es aquello que experimentamos cuando sentimos pena o piedad por alguien que está sufriendo.
Impaciencia
La impaciencia es el sentimiento que surge cuando necesitamos algo en un preciso instante y no podemos obtenerlo.
Frustración
Experimentamos este sentimientos cuando las expectativas que tenemos sobre algo o alguien se ven truncadas. También, cuando no conseguimos aquello que nos habíamos propuesto.
Tristeza
La tristeza es otro de los tipos de sentimientos, e implica una sensación de desasosiego interior, que a veces nos conduce al llanto. Nos permite superar pérdidas o desilusiones, liberar tensiones, tomar conciencia de lo que nos ocurre, pedir ayuda…
Enfado
El enfado es el sentimiento de mala disposición hacia algo o alguien, un sentimiento de disgusto, irritación o exacerbación.
Odio
El odio implica una repulsión hacia las cosas o las personas. El odio puede conducirnos a otros tipos de sentimientos, como la ira o la rabia.
Envidia
La envidia es aquel sentimiento que experimentamos cuando deseamos algo que no tenemos y que vemos en los demás.
Celos
Los celos no deben confundirse con la envidia. En este caso, se trata de la respuesta emocional que aparece cuando percibimos una amenaza hacia algo que consideramos propio.
Indignación
La indignación conlleva una sensación de malestar hacia las cosas que consideramos injustas.
Venganza
La venganza implica un desquite contra las personas que nos han hecho daño. El deseo de venganza implica tener ganas de hacer daño a esa persona para que se haga “justicia”.
Miedo
El miedo surge cuando percibimos un peligro (o nos anticipamos a él). Nos alerta de las cosas peligrosas y, en cierta manera, es un mecanismo de defensa.
Hostilidad
Se trata de aquel sentimiento que nos genera una sensación de indignación o resentimiento.
Desesperanza
La desesperanza, como el propio nombre indica, implica la ‘pérdida de la esperanza’. Es un síntoma típico de la depresión (sobre todo, de la depresión grave). Implica la creencia subjetiva de que las cosas nunca mejorarán.
Como vemos, experimentamos diferentes sentimientos a lo largo de la vida (e incluso, ¡a lo largo del día!), y cada uno de ellos cumple una determinada función. Cuando una persona pasa de un sentimiento a otro de forma rápida (o más bien, de un estado de ánimo a otro), entonces hablamos de labilidad emocional.
“La capacidad de expresar los propios sentimientos constituye una habilidad social fundamental”.
-Daniel Goleman-
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