Cuando mi pareja se enfada y no me habla ¿por qué lo hace?
Cuando mi pareja se enfada y no me habla, no sé cómo debo actuar. ¿Le pido perdón por algo de lo que quizá no soy responsable o mejor me espero a que se «desenfade» y reanudemos de nuevo la relación? Esta serie de cuestiones, por llamativas que nos parezcan, se las plantean a diario un gran número de personas.
Así, una de las situaciones más complejas es sin duda saber manejar las discrepancias a nivel de pareja. No podemos olvidar que ante cualquier diferencia, pequeña desavenencia y enfado, las emociones se magnifican y quedan a flor de piel.
De este modo, quienes no sean hábiles a la hora de comunicar y gestionar ese universo interno terminarán sin duda en situaciones muy complicadas en su relación. En este artículo hablaremos sobre los motivos por los que tu pareja te deja de hablar.
«La razón trata de decidir lo que es justo. La cólera trata de que sea justo todo lo que ella ha decidido».
-Séneca-
Cuando mi pareja se enfada y no me habla…
Para entender la conducta de tu compañero sentimental es necesario distinguir tres categorías generales de silencio. Cada una tiene sus propias motivaciones y su manera de afrontarlo. Vale la pena destacar que no son las únicas que existen, pero por motivos de espacio expondremos solo tres.
1. El silencio como un espacio reflexivo
El silencio puede ser un espacio útil para que una persona reflexione sobre sus emociones. Si se pide, es completamente válido y comprensible, siempre y cuando se establezca previamente. Por ejemplo: «estoy enojado, necesito tiempo para pensar en lo que pasó».
Si el silencio no se extiende demasiado en el tiempo, no tiene por qué ser abusivo. En cambio, puede ser una experiencia positiva al permitir tomar distancia de las emociones y evitar que las situaciones se vuelvan demasiado explosiva.
Cuando tu pareja te deja de hablar para aplicar este tipo de silencio lo hace por varias razones. Veamos algunas de ellas.
Evitar palabras hirientes
Tu compañero sentimental puede usar el silencio para no lastimarte al decir algo en medio de su enojo. En este sentido, también puede usarlo como una estrategia para manejar el conflicto que le permite tener tiempo a solas para reflexionar y analizar la situación.
Reflexionar sobre las emociones y pensamientos
Guardar silencio le puede ayudar a calmar e identificar sus emociones y pensamientos antes de reiniciar la comunicación verbal. Al hacer esto, puede recuperar la tranquilidad, procesar lo que ha pasado y conversar contigo de manera más asertiva.
Procesar la información
Otro motivo por el que usa el silencio es para procesar la información y comprender mejor tu perspectiva. Esto le permite encontrar soluciones efectivas que contemplen tus puntos de vistas y necesidades. Además, le ayuda a conocer mejor las causas del problema.
2. El silencio como un problema de regulación afectiva
El silencio también puede estar asociado con la dificultad de gestionar las emociones. Esta conducta puede ser problemática, ya que interfiere con la comunicación y el entendimiento mutuo.
Al trabajar en habilidades de regulación emocional y comunicación asertiva, tu pareja podría superar este tipo de comportamientos. Este tipo de cambios tiene efectos muy positivos para cualquier relación. Veamos algunas razones para estos silencios.
Incapacidad de gestionar las emociones
Una primera causa puede estar relacionada con la dificultad que tiene tu pareja para regular sus emociones. Cuando este es el caso, es posible que esté evitando confrontar sus emociones y utilice el silencio como forma de escape.
Dificultades para expresar los sentimientos
Aunado al motivo anterior, tu pareja se enfada y no te habla porque no sabe cómo expresar lo que siente. Debido a que es incapaz de regular sus emociones, no sabe cómo manifestártelas de manera asertiva. Esto hace que te deje de hablar a expensas de los beneficios que puede tener para su salud la expresión emocional.
Problemas para controlar sus impulsos
Las emociones suelen manifestarse a través de comportamientos, los cuales pueden ser difíciles de controlar en ciertas ocasiones. Si tu pareja tiene problemas para regular y controlar sus reacciones emocionales, puede recurrir al silencio como una forma de evitar ser dominado por sus impulsos.
3. El silencio como manipulación
Si tu pareja te deja de hablar, es posible que lo haga como una forma de manipulación, de control o castigo. Este tipo de conductas es dañina para la relación, ya que puede interferir con la comunicación, el entendimiento, la confianza y tu bienestar.
Proporcionar un castigo
Por supuesto, tal vez la causa más habitual del silencio en el marco de las discusiones de pareja sea la de aplicar la «ley del hielo» como una forma explícita de castigarte. En estos casos, el silencio de tu pareja se configura como una forma de abuso psicológico.
Obtener algo que se desea
El silencio también puede ser utilizado como una estrategia de manipulación, donde tu pareja lo utiliza para obtener algo que desea, lo cual restringe tu libertad y autonomía. Esto puede ser incómodo y es importante reconocerlo y establecer límites saludables en la relación.
Desplazar la responsabilidad
Tu pareja puede dejarte de hablar para hacerte sentir culpable del problema. Esta táctica puede hacer que él o ella se presente como la víctima y tú como el responsable, lo que puede llevarte a pedir disculpas o intentar enmendar la situación con acciones o actitudes que satisfagan sus demandas.
La ley del hielo y la manipulación
Hay muchos tipos de abuso psicológico, algunos son más burdos y otros un poco más sofisticadas. En ocasiones, es posible que cuando tu pareja no te habla, esté aplicando la ley del hielo. como manipulación emocional.
Quien emplea esta ley es consciente de sus acciones y de sus intenciones. Utiliza el silencio para desgastar al otro, para proyectar sobre la pareja el peso de la culpabilidad y entonces lograr su sometimiento.
También espera que tarde o temprano la otra parte se acerque pidiendo perdón. En este contexto, el silencio es, por encima de todo, un recurso arbitrado por la ira y la manipulación: tú me has ofendido y ahora vas a recibir tu castigo.
¿Qué hacer cuando mi pareja se enfada y no me habla?
A continuación te dejaremos algunas recomendaciones para que aprendas a lidiar con el silencio como espacio reflexivo y como problema de regulación afectiva. Si tu pareja deja de hablarte como forma de manipulación, te recomendamos solicitar la orientación de un psicólogo que te brinde estrategias de afrontamiento de acuerdo con tu caso.
Ten presente que la mejor acción es aquella que da respuesta a las demandas del conflicto y al tipo de silencio que emplea tu pareja. En consecuencia, es propicio que en un principio analices bien la situación que ambos están atravesando.
1. Expresa lo que sientes
Hazle saber a tu pareja lo que sientes cuando te deja de hablar. Un componente esencial para resolver los conflictos es hablar sobre las emociones que despierta el problema. No te quedes callado y abre un espacio de diálogo para ambos. Si la otra persona no quiere, conversa con él o ella cuando esté dispuesto.
2. Sé empático
Comprender la actitud y emociones de tu pareja es imprescindible para salir de su silencio, sobre todo, si este es reflexivo o producto de su dificultad de regularse. En estos casos, la empatía es fundamental. En un artículo publicado en The Permanente Journal, James Hardee sostiene que para ser empático es necesario:
- Reconocer y validar los sentimientos de los demás.
- Imaginar lo que podría estar sintiendo el otro.
- Reafirmar las emociones de la otra persona haciéndole saber lo que observas.
- Ofrecer apoyo.
Descubre: Cómo validar las emociones de los demás
3. No te desesperes y ten paciencia
Dale tiempo a tu pareja de reponerse de su emoción si no quiere hablar contigo inmediatamente. No te impacientes, pero ten en cuenta que hay una diferencia entre un breve momento de silencio y no tener contacto durante semanas. En estos casos debes priorizar tu bienestar emocional y pensar si es conveniente para ti continuar con la relación.
4. Evita la culpa
Si tu pareja se enfada y no te habla, debes evitar internalizar la culpa. Recuerda que lo hace para reflexionar o porque no sabe cómo gestionar lo que siente. Es posible que necesite tiempo para procesar sus emociones antes de poder hablar contigo y resolver el problema juntos.
5. Reconoce tus errores
Si aceptas que su enojo ha sido producto de un comportamiento inapropiado tuyo, discúlpate y permítele expresar lo que siente. Reconocer que te has equivocado puede ayudarlo a salir de su silencio.
Conclusión
Ante la desconcertante situación de que tu pareja no te hable cuando se enoja, es importante que identifiques las causas de su comportamiento para que puedas animarlo a solucionarlo de manera asertiva.
Procura no aceptar el uso del silencio como forma de castigo o manipulación, o como una manera de abuso psicológico que pueda dañar tu estabilidad emocional. Expresa siempre lo que te hace sentir su conducta, lo que piensas y esperas.
Para terminar, recuerda que la mejor forma de resolver los conflictos es conversando, así como haciéndole saber a la otra persona que distanciarse no beneficia en nada a la relación.
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