El emotivo encuentro entre Michael J. Fox y Christopher Lloyd
Hay dúos cinematográficos legendarios y uno de los más icónicos es el formado por Michael J. Fox y Christopher Lloyd. Nadie puede negar que Regreso al futuro, el clásico que Robert Zemeckis dirigió allá por 1985, ha dejado una huella indeleble en la cultura pop. Sin embargo, mayor impronta causaron sus protagonistas, los ya inolvidables Marty McFly y Emmett “Doc” Brown.
Ahora, 37 años después del estreno de la trilogía, nos han querido ofrecer un emotivo regalo. El pasado 9 de octubre se celebró una Comic Con en Nueva York. Fue en el Javits Convention Center donde se produjo un emotivo encuentro entre ambos para conmemorar esa fecha y hablar sobre la franquicia. Los dos intérpretes, de 61 y 83 años, respectivamente, recibieron una larga ovación nada más aparecer en el escenario.
Aunque, obviamente, todas las miradas se fueron hacia Michael J. Fox quien, casi sin poder andar y dominado por la descoordinación, no dudó en abrazarse a su compañero de aventuras. El párkinson, que le fue diagnosticado con solo 29 años, ha avanzado de manera notable en su persona. Aunque su actitud y su chispeante sentido del humor ofrecieron esa templanza y resolución de la que tristemente su cuerpo carece…
“El párkinson es un regalo, y no lo cambiaría por nada… Personas como Christopher Lloyd han estado allí siempre para mí, y muchos de vosotros lo habéis hecho. No se trata de lo que tengo, se trata de lo que me habéis dado: la voz para hacer esto y ayudar a la gente”.
-Michael J. Fox-
El encuentro entre Michael J. Fox y Christopher Lloyd, un momento mágico
Vaqueros azules, zapatillas de deporte, aire desenfadado… Michael J. Fox y Christopher Lloyd aparecieron ante sus fans con atuendos muy similares. Aunque la auténtica sintonía estaba en sus gestos, en esas palabras al oído que escapaban de los micros y en los sentimientos contenidos, pero vibrantes.
El pasado domingo (9 de octubre) la Comic Con de Nueva York organizaba un panel sobre el legado de Regreso al Futuro. La presencia de sus protagonistas dejó a los admiradores, y a cualquier aficionado al cine, sorprendidos y emocionados. Las redes sociales empezaron a compartir la escena y en pocos segundos dio la vuelta al mundo.
Era imposible no apartar la mirada de Michael J. Fox, quien con su arrollador humor restaba importancia a sus evidentes problemas de coordinación, equilibrio y habla. Bromeó con ese chicle que se le escapó de la boca e insistió con énfasis en que el párkinson fue le mejor que le había pasado en la vida. Puesto que su propósito no es otro que dar voz a dicha enfermedad para ayudar a la gente.
“El optimismo es sostenible cuando sigues volviendo a la gratitud, y lo que sigue es la aceptación”.
-Michael J. Fox-
El primer temblor llegó con 29 años
Michael J. Fox estaba rodando la película Doc Hollywood cuando sintió una contracción del dedo meñique izquierdo. Tenía 29 años y no quiso darle demasiada importancia. Sin embargo, poco después llegaron los temblores y la rigidez en las caderas. No tardaron en diagnosticarle párkinson. Sabía cómo cambiaría su vida a partir de ese momento y se fue preparando a duras penas.
No hizo pública su enfermedad hasta 1998, momento en que se le practicó una talamotomía para controlar los temblores. Además, empezó a tomar el fármaco Sinemet que le permite regular los síntomas. A partir de ese momento, dejó de beber, mejoró sus hábitos de vida y creó una fundación con su nombre para la investigación del párkinson. No tardó en convertirse, según el New York Times, en la voz más relevante en la defensa de dicha condición.
En la actualidad, es el mayor financiador, sin fines de lucro, para el desarrollo de medicamentos para dicha enfermedad.
Michael J. Fox ha recaudado más de mil millones de dólares para ayudar a encontrar una cura para el párkinson a través de su fundación.
Retirado de la actuación, pero no del activismo
En noviembre del 2020, anunció su retirada de la actuación por las complicaciones evidentes derivadas del párkinson. No obstante, su carrera cinematográfica y televisiva no puede ser más extensa. Ha recibido numerosos premios, tiene varios doctorados en diversas universidades y ha escrito tres libros: Lucky Man: A Memoir (2002), Always Looking Up: The Adventures of an Incurable Optimist (2009) y A Funny Thing Happened on the Way to the Future: Twists and Turns and Lessons Learned (2010).
Lamenta no poder tocar la guitarra como antes y que su memoria no le permita continuar en el mundo de la interpretación. A pesar de ello, y de los instantes oscuros vividos, se declara optimista y altamente concienciado en su propósito: continuar luchando para encontrar una cura para el párkinson y tratamientos que mejoren la calidad de vida de los enfermos.
Una amistad que va más allá del tiempo y el espacio
“La química entre nosotros estuvo ahí desde la primera escena juntos” –indicó Michael J. Fox sobre Christopher Lloyd en la Comic Con-. “Permaneció así durante tres películas y, por cierto, no ha desaparecido. Trabajar con él fue lo mejor”.
Los dos actores rieron y compartieron anécdotas durante el evento. Esa amistad sigue presente en ambos. Tal vez hayan dejado muy atrás las figuras de Marty McFly y Doc Brown, pero esa chispa divertida y cómplice se sigue apreciando en sus rostros.
Ni los años ni las enfermedades han opacado su encanto. Por ello, esperamos sin duda más reuniones futuras, más eventos que nos hagan ver que hay amistades eternas y personas que nos siguen inspirando.
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- Fox, J. Michael (2003) Lucky Man: A Memoir. Hyperion-Acquired Assets