¿Qué da esperanza a los enfermos?
¿Qué da esperanza a los enfermos? ¿Dónde encuentran fuerzas? ¿Dónde van cuando necesitan ayuda? Estas cuestiones se resuelven de forma distinta para cada paciente.
Además, no es lo mismo saber que padeces una enfermedad terminal, una enfermedad crónica con la que puedes convivir o sufrir un accidente que ha cambiado para siempre tu movilidad. Lidiar con el dolor es distinto y la esperanza es diferente para cada uno de ellos.
Cuando estamos muy enfermos, sentimos que no estamos hechos para el mundo. La salud mental se resiente, el malestar impide tener ánimo para realizar cualquier actividad. ¿Dónde buscamos la esperanza entonces?
La esperanza en la enfermedad terminal
Al enfrentarse a una enfermedad terminal -o potencialmente terminal-, la mayoría de las personas suelen relacionar la esperanza con un tratamiento o cura tangible que pueda prolongar la existencia. Esto sucede incluso aunque exista un volumen de información que indique lo contrario.
Parte de esta esperanza ilógica puede derivar de la información inapropiada que dan los profesionales sanitarios a los pacientes cuando les dan malas noticias. Los médicos suelen dudar a la hora de dar noticias devastadoras, y pueden abstenerse de decir la verdad en un esfuerzo por mantener y reforzar la esperanza.
Frecuentemente, atemperan el diagnóstico de una enfermedad terminal con una esperanza “terapéutica” poco realista e involuntaria. Tal esperanza equivocada puede implicar informar a los pacientes sobre tratamientos inútiles.
Los médicos que atienden a pacientes con enfermedades terminales se enfrentan al desafío de equilibrar la comunicación honesta con el alimento de la esperanza. Después de la angustia inicial de los pacientes ante la noticia de su enfermedad terminal, el futuro a menudo se define por la familia, los amigos cercanos y el significado de la vida, en lugar de la cantidad de tiempo restante.
Los pensamientos y las preocupaciones de los pacientes se vuelven más globales a medida que prevén y esperan un resultado positivo para sus familiares y amigos. Luego, a medida que se acerca la muerte, los pacientes a menudo se enfocan en sí mismos, expresando un deseo de serenidad, paz interior y descanso eterno.
La esperanza en otras enfermedades
¿Qué alimenta la esperanza de los enfermos? ¿Dónde encuentran fortaleza? ¿Dónde van cuando necesitan ayuda? Estas fueron preguntas que se hicieron a casi 400 pacientes de 18 a 90 años en un estudio.
Tenían muchas dolencias diferentes, desde huesos rotos hasta cáncer. Algunos todavía estaban siendo tratados. Otros se habían recuperado de la enfermedad. Fueron los estudiantes de enfermería quienes hicieron las preguntas. Posteriormente, debían escribir una bitácora en la que reflexionaran sobre la conversación.
Los participantes experimentaron las preguntas como privadas. Salieron de su propia zona de confort en una conversación muy personal. Al mismo tiempo, experimentaron que era un alivio como pacientes poner esto en palabras.
Y es que lo que da esperanzas a los enfermos puede variar mucho de una persona a otra, pero en realidad podemos encontrar también una serie de factores de esperanza que se suelen repetir de una persona a otra.
Lo que da esperanza a los enfermos
¿Cuáles fueron las respuestas de los participantes? Encontrar consuelo y fortaleza en la enfermedad puede ser de gran dificultad y un gran reto para quienes están pasando por el dolor y la incertidumbre más cruel: la de si sobrevivirán o no.
Algunas de las respuestas de los participantes son descritas a continuación.
1. Alguien con quien compartir pensamientos
La esperanza es importante para soportar el sufrimiento y puede ser crucial para la forma en que enfrentamos la enfermedad.
Los investigadores hacen referencia a estudios internacionales que han analizado a pacientes de diferentes países y con una variedad de diagnósticos médicos. La gran mayoría de los casi 400 pacientes de este estudio dijeron que encontraron esperanza en familiares y amigos.
No hacían falta tantos, bastaba con uno o dos. Pero era importante compartir sus pensamientos con alguien en quien confiar y que pueda escuchar.
2. En algo “allá arriba”
Lo que más sorprendió a los investigadores fue que muchos de los que dijeron que encontraron esperanza en sus seres queridos también dijeron que encontraron esperanza en algo espiritual. Algo intangible fuera de sí mismo.
Muchos describieron esto como una esperanza de que había algo más, algo fuera de nosotros, que pudiera venir a rescatarnos cuando estábamos pasando por un momento difícil. Aunque muchos no eran creyentes, rezaban así “por seguridad”. Tenían la esperanza de que alguien allí los escucharía; una fuerza en el universo que podría ayudarlos.
3. En la naturaleza
En la naturaleza se olvidaron de sus propios problemas. Palabras como calma, paz y consuelo describen cómo encontraron esperanza al aire libre.
Para algunos, era difícil salir a la naturaleza debido a problemas de salud. Por lo tanto, utilizaron películas de la naturaleza para encontrar descanso y fuerza para seguir adelante y olvidar el dolor.
Ya a fines del siglo XIX, Florence Nightingale era consciente de la función curativa de la naturaleza. Una gran cantidad de investigaciones sugieren gradualmente que la naturaleza es importante para la salud, incluida la salud mental.
4. En sí mismos
Aquellos que encontraron esperanza en amigos y familiares, la naturaleza o el universo, a menudo encontraron esperanza en varias de estas fuentes al mismo tiempo. Tenían la confianza de que algo o alguien podía ayudarlos.
La esperanza les había dado fuerza y les había ayudado a soportar el sufrimiento asociado a la enfermedad. Sin embargo, un pequeño grupo había perdido la confianza en una esperanza fuera de ellos. No encontraron esperanza en ninguna parte, excepto en ellos mismos, ya que habían sufrido decepciones que les habían marcado.
5. En las pequeñas cosas del día a día
Para ellos, la esperanza era atreverse a creer que algo mejor era posible. A menudo se trataba de cosas pequeñas y cotidianas, como tener suficiente comida en la nevera o pedir ayuda para lavar y limpiar. También podría tratarse de tener un lugar adecuado para vivir, trabajar o algo más significativo para llenar la vida cotidiana.
Crear una buena red de apoyo
La esperanza aparece con mayor frecuencia con el contacto con los demás. Muchas personas con estos problemas han experimentado decepciones, tanto con ellas mismas como con los demás. Sin embargo, tener a alguien a su alrededor, que tuviera fe en ellos y en quien pudieran confiar fue muy importante para ellos.
La esperanza es algo que surge en las relaciones con los demás. Se trata en gran medida de crear buenas condiciones de vida y entorno. Por ejemplo, tener comunidades generosas e inclusivas.
Para quienes participaron en el estudio, también se trataba de decidir. Aquellos a los que entrevistó estaban preocupados por la importancia de sus propios esfuerzos para lograr el cambio.
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