3 hábitos matutinos para controlar la ansiedad

3 hábitos matutinos para controlar la ansiedad
Sergio De Dios González

Revisado y aprobado por el psicólogo Sergio De Dios González.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 23 agosto, 2023

Aunque la ansiedad pueda parecernos a todas luces un elemento que nos distorsiona y nos aleja de la jornada ideal”, este estado puede darte la oportunidad de entender quién eres y qué necesitas en determinados momentos de tu existencia.

Así, entender la ansiedad como una llamada de atención va a hacernos reflexionar sobre algunos hábitos que, de forma directa o indirecta, pueden estar alimentándola sin que nos hayamos dado cuenta.

Es cierto que la ansiedad en muchas ocasiones no pasa de ser un ruido sordo, constante y monótono al que terminamos aislando en un lugar de nuestra conciencia. Sin embargo, por mucho que nosotros lo ignoremos esta existe y realmente notaremos la libertad que supone alejarla cuando esta ya no esté.

Por otro lado, las primeras horas del día suponen el punto de partida, los minutos en los que vamos a crear la inercia para el resto del día. Si ya nos levantamos alterados o si las primeras tareas las hacemos corriendo, difícilmente vamos a poder reducir este nivel de estrés a lo largo de la jornada.

Romper una dinámica cuesta siempre más que crearla desde cero. De esta manera, hoy compartiremos contigo 3 hábitos matutinos que te ayudarán a comenzar tu día con la mente despejada y lejana de cualquier ritmo frenético y carrera detrás del reloj.

“En un momento me sentí acosada por la ansiedad. Pero me deshice del miedo estudiando el cielo, determinando cuándo saldría la luna y dónde aparcería el sol por la mañana”.

-Louise Bourgeois-

Contra la ansiedad, tómate tiempo para reflexionar

Mujer desayunando tranquila
Hablamos de realizar tanto actividades como momentos de silencio que te permitan conectar con tus pensamientos, contigo mismo y tu esencia vital. Mantener un tiempo para “reconectar” con aquello que deseas sentir a lo largo del día te permitirá separar fácilmente las tensiones que puedan presentarse en el mismo.

Acompaña este momento de “reconexión” contigo mismo con una bebida caliente, como un té o una infusión de hierbas, ya que te facilitarán el calmar la mente para el día que se te aproxima. Además, este momento de relajación lo asociarás sencillamente a ti mismo, a desconectar y podrás emplearlo cuando sientas que comienzas a dejar paso a la ansiedad.

Estira tu cuerpo y equilibra tu mente

Estirando nuestro cuerpo nada más levantarnos permitimos que se prepare para la acción que vendrá a continuación. Nos acostumbramos así a escuchar qué necesita, cómo nos encontramos y vamos a sentirnos. E s importante que te preocupes tanto de tu El poder de la mente como de tu cuerpo.

Para ello, puedes realizar actividades como el yoga, el tai-chi o cualquier práctica de ejercicio físico siempre de forma moderada. Además de permitir estirar tus músculos, estas actividades te proporcionan ejercicios mentales y físicos que ayudan a encontrar el equilibrio aportando grandes mejoras vitales.

“La ansiedad con miedo y el miedo con ansiedad contribuyen a robarle al ser humano sus cualidades más esenciales. Una de ellas es la reflexión.”

-Konrad Lorenz-

Dedica tiempo a tus emociones y las metas propuestas para tu día

Papel y pluma
Un ejercicio estupendo para evitar caer en la ansiedad es ordenar nuestra mente nada más despertarnos. De esta forma nos permitimos adaptarnos a las tareas que tenemos pendientes.

Puedes darte tiempo para revisar los objetivos que pretendes conseguir, incluso para determinar cómo te gustaría sentirte. Haciendo esto estarás generando cambios positivos en tu existencia más importantes y con mayor proyección.

También puedes llevar a cabo un diario emocional, investigando y apuntando cómo te vas sintiendo a lo largo de la jornada. De esta forma entenderás cómo funciona tu sistema emocional y te ayudará a poner en práctica diferentes recursos que impidan que alcances esa sensación de bloqueo interior que suponen los puntos más altos de ansiedad.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.