4 preguntas para cuando te sientes perdido

Formular bien la pregunta, el interrogante que realmente te inquieta, es el mejor comienzo para encontrar la respuesta... o incluso otras preguntas que sean todavía más acertadas.
4 preguntas para cuando te sientes perdido
Angela C. Tobias

Escrito y verificado por la psicóloga Angela C. Tobias.

Última actualización: 16 enero, 2021

Cuando te sientes perdido, pueden acompañarte sentimientos convulsos sobre quién eres o a dónde vas. Estas crisis pueden agitar mares que pensabas en calma. Sin embargo, la mejor respuesta puede comenzar formulando bien algunas preguntas.

En este artículo, te proponemos cuatro interrogantes orientados a reflexionar sobre el pasado, reconstruir el presente y planificar el futuro. En este sentido, formularte las preguntas apropiadas puede hacer que te sientas perdido algún tiempo; sin embargo, si no te las formulas, para ti será mucho más difícil encontrar el norte el día que te sientas perdido o recuperar el equilibrio el día que no seas capaz de identificar algún pilar sólido en el que apoyarte.

Cuando te sientes perdido: ¿Quién eres y a dónde vas?

A sentirte perdido puedes ponerle muchos nombres, en realidad. A veces, puedes hablar de una crisis de edad o de fin de ciclo o, a tener problemas relacionados con parches contraproducentes de excesos o compulsiones. Puedes llamarlo sentimiento de vacío y de que todo lo que haces carece de sentido.

A veces, pueden resonarte frases como “¿quién eres y hacia dónde vas?”. Cuando te sientes perdido, puedes emprender una búsqueda y exploración de tierras que ya creías conquistadas. Aunque no sea un gran consuelo, todas las personas nos sentimos así en algún momento y la calma, tarde o temprano, llega.

Cuando te sientes perdido, te encuentras en un vacío legal: donde lo que te hacía feliz dejó de hacerlo, pero aún no has encontrado una nueva motivación. El estancamiento vital podrá fluir de nuevo, en parte, si das rienda suelta a la espontaneidad y la búsqueda de nuevas oportunidades.

Simultáneamente, es esencial aferrarte a los pilares que te sustentan. Aunque te encuentres en un momento de interrogantes y búsqueda de nuevas oportunidades, es preciso mantenerte fiel a tus principios y esencia propia. Estos elementos son el ancla te permitirá mantenerte a flote en este tsunami imparable que inunda tu estabilidad emocional.

El planteamiento de las preguntas adecuadas puede abrir nuevos horizontes, donde reencontrarte con lo nuevo sin perder tu propia esencia. Algo así como que hagas un nuevo amigo que, paradójicamente, en muy poco tiempo te hace sentir como en casa.

“Las crisis se producen cuando lo viejo no acaba de morir y lo nuevo no acaba de nacer”.

-B.Brecht-

4 preguntas para cuando te sientes perdido

Mujer pensando en cómo vivir con sentido

¿Cómo has llegado a sentirte perdido?

La sensación de estar perdido puede ser  inespecífica. Puedes sentirte perdido ante la ausencia de un ser querido o la ruptura de un vínculo importante. De la misma forma, puede emerger en ti un sentimiento de vacío ante la falta de objetivos vitales, o transformarse en una cortina de humo de anhedonia o excesos.

Por tanto, una de las preguntas más importantes que puedes hacerte cuando te sientes perdido, es cómo has llegado hasta este punto. Para ello, te proponemos un pequeño ejercicio: inventa una historia con un personaje que tenga esta sensación. Inventa su aspecto, sus motivaciones, su entorno y, sobre todo, la historia de cómo llego a esta crisis. Hazlo sin pensarlo demasiado y sin juzgar lo que dices. Tómalo como un juego.

Este ejercicio trata de poner a prueba la asociación libre y dar rienda suelta al inconsciente. Después de crear esta historia y poner el foco del personaje fuera de ti mismo, puede ser más fácil que des respuesta a la pregunta de cómo has llegado aquí y reflexionar sobre lo ocurrido en el pasado.

¿Cuál sería tu milagro?

Imagina ahora que un día, al despertarte de la cama, se ha obrado un milagro. Mientras dormías, todo aquello que anhelabas se ha solucionado. Sigue imaginando entonces cómo ha cambiado tu vida desde ese momento y cómo sería ese nuevo día tras obrarse el milagro.

Esta conocida como “pregunta milagro” es parte de la terapia centrada en solución de problemas de Steve de Shazer. Con este genuino ejercicio narrativo, puedes plantearte preguntas interesantes que te acerquen un poco más a encontrar aquello que estás buscando. Otras preguntas relacionadas pueden ser “¿quién se daría cuenta en primer lugar de este milagro?” o “¿qué te gustaría hacer a partir de ahora?”.

¿Qué harías si no tuvieses esas limitaciones?

“¿Si dentro de poco tiempo se acabara el mundo, qué harías?” es un ejercicio valioso para reflexionar sobre los pilares de la vida y la esencia de tu personalidad. Al fin y al cabo, es igual de importante hacerte preguntas que saber qué es imprescindible para ti, o qué cosas importantes estás procrastinando.

Siguiendo con los ejercicios de imaginación, cuando te sientas perdido puedes preguntarte qué es lo que harías si no tuvieses esas limitaciones que te suelen acompañar. Es decir, qué harías si no tuvieras miedo, te sintieras inseguro o cualquiera que sea la que consideras que es tu gran limitación.

¿Cómo materializamos estos deseos?

Los ejercicios de imaginación, como los anteriores, pueden permitir desbloquearte y poner palabras a la vaga sensación de sentirse perdido. Sin embargo, también es necesario hacerte preguntas encaminadas a poner los pies en la tierra. Dicho de otra forma, convertir tus pensamientos en acciones tangibles para salir de la crisis.

Este interrogante final viene encaminado a permitirte materializar estos milagros y deseos ante la perspectiva de finitud. Para ello, te ayudarán preguntas como qué limitaciones puedes empezar a trabajar y cuáles son externas o escapan a tu alcance. También, puedes preguntarte qué ayudas necesitarás para conseguirlo, si los objetivos elegidos son realmente realizables o positivos para ti y tu entorno, etc.

Mujer aprendiendo a desarrollar la autoconsciencia

Cuando te sientes perdido, hazte buenas preguntas

Sentirse perdido es una sensación tan inespecífica como generadora de malestar. A veces, puedes sentir que estás en una crisis de edad, envuelto en ciertos abusos y excesos o, incluso, puede invadirte un sentimiento de vacío. Cuando te sientes perdido, estás dispuesto a darle a pelear en batallas que creías ganadas y, eso compañero, no es nada fácil.

Cuando te sientes perdido también estás en tierra de nadie, entre lo que hacías pero ya no funciona y la nueva solución que no acabas de encontrar. Y, aunque sea paradójico, lo que puede ayudarte son precisamente más interrogantes y, simultáneamente, aferrarte a aquello que consideras los pilares de la vida.

Preguntarte cómo has llegado hasta aquí cuando te sientes perdido, te ayudará a reflexionar sobre lo ocurrido en el pasado y tu forma de procesarlo. Imaginar un gran milagro o pensar en un tiempo finito te puede llevar a pensar en el futuro y conectar con el propio deseo. Y, para materializarlo hasta el presente, cabe que reflexiones sobre qué de todo esto está en tu mano y qué ayuda necesitarás para realizar cambios.

Más allá de querer exponer los momentos de crisis como algo romántico, realmente, es muy posible que estos convulsos sentimientos de sentirte perdido den lugar a un producto nuevo en el futuro. Esta incomodidad y crisis pone de manifiesto tu motivación por adaptarte. Sigue manteniendo esta curiosidad infantil de preguntarlo todo.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.