¿A la vida? Sí
En el mundo existen millones de personas pero ¿cuántos de ellos están vivos? ¿cuántos de ellos se dedican a hacer las cosas que les apasionan? A menudo mucha gente hace de su vida, una rutina, una vida en la que los días pasan sin ningún sentido especial. Tienen un trabajo o muchos trabajos, una familia o una pareja pero sienten un vacío interior. Sienten que están viviendo a medias y, por lo tanto, no encuentran la felicidad.
¿Has pensado cómo es tu vida actual comparada con tus expectativas pasadas? Quizás es todo muy distinto a como soñabas y una de las causas puede ser que hayas dejado de vivir. Esto puede deberse a distintas situaciones, pero una muy frecuente sucede cuando te dedicas a satisfacer las expectativas de los demás.
Quizás aceptar un empleo por los grandes sueldos, mantenerse en una relación amorosa que no te satisface por miedo a conocer a alguien mejor, hacer determinada cosa solo para quedar bien con un familiar o amigo, en lugar de hacer lo que de verdad querías. Es en este punto cuando comienzas a decirle “no” a la vida y más importante aun, dices “no” a ti mismo.
La felicidad no es la meta, sino el recorrido que haces en tu vida
Quizás no encuentras la forma de solucionar tu situación, o estás esperando a que todo dé un cambio radical por sí solo. La realidad es que ese gran cambio puedes hacerlo tú mismo el día que quieras. Es algo tan simple como una decisión.
Piensa ¿cuánto tiempo más quiero esperar para tener la vida que quiero? ¿Cuándo voy a hacerme el favor de disfrutar las cosas que me gustan? Recuerda que la vida es sólo una, solo una oportunidad para vivir y experimentar lo que te gusta.
Hay pocas cosas más gratificantes como llegar al final del camino y saber que todo se hizo a tu manera y que bien o mal, hiciste o, por lo menos intentaste, hacer todo lo que te hacía feliz. Pero para esto debes estar dispuesto a sacrificar esa vida de inseguridades y conformismos para comenzar a ser honesto contigo, escucharte y dedicarte a tu felicidad.
El peor castigo es pasar por la vida y no haber sido feliz
Hoy es un buen día para comenzar a vivir, ármate de valor y dile “sí” a la vida, dile “sí” a tu persona. Pero debes estar dispuesto a afrontar los obstáculos de la vida. Todos sabemos que el mundo no es un camino de rosas, pero si conoces tu gran valor como persona y estás decidido a ir por la vida que quieres, sal ahí afuera y consigue lo que mereces. No pongas más excusas para comenzar a vivir diciendo que no lo logras por esto o aquello, los cobardes hacen eso y tú no eres uno de ellos, tú ya has decidido ser mejor.
El cambio está en ti
Nuestra propuesta en este artículo es que hoy te decidas ser tú quien sigue la vida que quieres para ti. No lo hagas para dar una buena impresión a alguien, ni por querer compensar a alguien, hazlo de la mejor manera, por ti y sólo para ti.
R ecuerda que si tienes vida es porque el mundo te necesita y lo que el mundo necesita es gente feliz y positiva que aporte todas sus energías para hacerlo un lugar mejor. Así que decídete, dedícate a las cosas que te gustan, prueba nuevas experiencias, hazlo todo lo mejor que puedas y un poco más y comienza a vivir para que cuando te vayas, te recuerden no con lágrimas, sino con una gran sonrisa de una persona que vivió al 100% todos los días, sin miedos, sin excusas y dando lo mejor que tenía. ¿Te animas a decirle hoy “sí” a la vida?