¿Cómo se ve el TDAH en adultos?

El TDAH es uno de los frentes de debate más calientes en la psicología. Por otro lado, si bien ha sido muy estudiado en niños, en adultos no tanto. En el siguiente texto podrás conocer más acerca de esta particularidad.

Escrito y verificado por la psicóloga Sara González Juárez.

Última actualización: 26 abril, 2023

El trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) en adultos es, a menudo, olvidado; en especial cuando los síntomas de impulsividad se atenúan en la etapa adolescente. No obstante, contrario a lo que se creía hace unos años, esta neurodivergencia no desaparece, sino que toma otra forma en la vida adulta.

De igual modo, existe el escenario en el que una persona recibe su diagnóstico de TDAH en la adultez. En estos casos, no solo transitó una infancia marcada por sus señales, sino que estas cambiaron con la edad; por norma, ahora son mucho menos salientes, ya sea por la maduración de la corteza prefrontal o porque la persona puso en marcha algunas estrategias efectivas de compensación.

En este artículo daremos visibilidad a esta situación, caracterizando el trastorno por déficit de atención e hiperactividad y añadiendo algunas recomendaciones para convivir con él tras la adolescencia. ¡Vamos con ello!

¿Qué diferencia al TDAH en adultos del TDAH en niños?

Si bien no todas las personas manifiestan los mismos síntomas de TDAH y dentro de esta neurodivergencia se encuentran varios subgrupos, se puede afirmar que sus síntomas centrales son la falta de atención, la impulsividad y el exceso de activación nerviosa. En niños, estas señales suelen originar los problemas en el colegio (mal rendimiento académico, por ejemplo) y en las relaciones sociales.

Pero, ¿cómo se transforma el TDAH en la vida adulta? La persona desarrolla mecanismos que le ayudan a adaptarse a la regularidad, además de experimentar una cierta moderación en los síntomas más llamativos, como la impulsividad. Esto hace que se acerque a una funcionalidad completa y normativa, aunque sufriendo todavía dificultades en, al menos, un ámbito de la vida diaria. Indaguemos en detalle.

Síntomas que presentan los adultos con TDAH

Derivadas del trastorno, los adultos con TDAH evidencian dificultades en una o varias áreas de su cotidianidad. Como se mencionó, en la mayoría de los casos se mitiga la expresión de la impulsividad y la hiperactividad. Los problemas de atención tienden a ser los que más inconvenientes de adaptación generan.

Por tanto, este trastorno se manifiesta a través de señales sutiles e indirectas, de acuerdo con un estudio publicado en la Revista INFAD de Psicología. Algunas de las más comunes son las siguientes:

• Cuando se sienten motivados, se concentran mucho mejor y benefician su memoria de trabajo.
• Inconvenientes para terminar tareas, en especial aquellas que son más tediosas y requieren de atención sostenida.
• Trabas con el control de impulsos, en ocasiones puede derivar en conductas antisociales o peligrosas para el sujeto.
• Mala gestión del tiempo y de la organización de actividades, tendencia a la impuntualidad o a procrastinar, por ejemplo.
• Dificultad para conversar, se pierde el hilo de la conversación, se interrumpe constantemente o se tiene un discurso desorganizado y disperso.
• Baja tolerancia a la frustración y a la demora de la recompensa, este problema está ligado a la impulsividad, aunque no se manifieste como en la niñez. También les cuesta calcular las consecuencias de sus acciones.
• Percepción de una pobre calidad de vida: como se describe en este estudio sobre calidad de vida en la adultez con TDAH, quienes que no obtuvieron su diagnóstico y un tratamiento en la etapa infantil y adolescente, afirman sufrir consecuencias en su desempeño diario y el éxito. Esto se agrava en aquellos individuos que padecen trastornos comórbidos, como la depresión.

Cómo sobrellevar el TDAH en la vida adulta

Sobrevivir en un mundo normativo, frenético y que exige más del 100 % de la energía de las personas, es mucho más difícil para quien padece déficit de atención. Con el fin de llevarlo mejor, se pueden implementar algunos trucos en la vida diaria. Apunta los que planteamos a continuación:

• Utiliza agendas y aplicaciones para organizarte.
• Ponte pequeñas metas a corto plazo. Haz listas de tareas, para reforzarte tachándolas cada vez que cumplas una.
• Aumenta el número de descansos. Si la tarea es muy tediosa para ti, trabaja en periodos de 15-20 minutos y descansa 5.
• No te sobrecargues. Sé consciente de tus límites y el tiempo del que dispones. Es mejor cumplir unos pocos objetivos diarios que abrumarse y no hacer nada.
• Mantén limpio tu espacio de trabajo y a la vista los objetos esenciales. Por ejemplo, deja en el mismo lugar las llaves de casa, las del coche y la cartera, todas juntas.
• Busca maneras de motivarte. Actividades que te gusten, artículos de papelería, cualquier detalle que te haga más llevadera la organización de tu día y la realización de tareas.
• Ejercicio, dieta y sueño. Cuidar estos tres pilares se traduce en que nos sintamos mejor y también en que tengamos más energía mental para controlar la atención o inhibir conductas poco reflexivas. De hecho, la Revista Habanera de Ciencias Médicas enfatiza en la actividad física como un beneficio para la calidad de vida en personas con TDAH.

Esto no ejerce un efecto inmediato en tu desempeño, pero crea una buena base de salud para todo lo demás. Y, por supuesto, acude al psicólogo. Muchas personas adultas se benefician de una terapia y algunas suelen tener medicación de soporte. Por eso, si padeces TDAH o sospechas que podrías tenerlo, no dudes en consultar a un profesional.

TDAH en adultos: perspectivas y retos

El mundo actual es frenético, contradictorio y repleto de estímulos que demandan nuestra atención. Si bien es cierto que el TDAH es un cuadro clínico heterogéneo y circunscrito a la neurobiología del individuo, también lo es su fuerte componente psicosocial, destaca una publicación de la Revista Médica Clínica Las Condes.

El estigma de las neurodivergencias y trastornos mentales no se queda en las burlas del patio de colegio: sin una sociedad educada en la justicia y en la importancia de la salud mental, prevalece la depresión, la delincuencia y el aislamiento, entre otros problemas.

Además, el acceso a servicios de salud mental dignos, por otro lado, es una asignatura pendiente en casi todo el mundo. La Revista (Con)textos se refiere en un artículo precisamente a la importancia de este tema, para autoconocerse con la ayuda de profesionales actualizados en conocimientos sobre TDAH.

Para finalizar, ¿dónde acaba un funcionamiento cerebral alternativo y comienza un trastorno? Esta pregunta lleva en el aire muchos años y, por suerte, caen poco a poco los pilares del capacitismo en cuanto al TDAH. Sigamos trabajando por lograr una sociedad unida, abierta y tolerante.