El eneagrama, nueve tipos de personalidad, ¿tú quién crees ser?

El eneagrama es una valiosa herramienta de autoconocimiento y desarrollo personal. Descubre a qué eneatipo perteneces.
El eneagrama, nueve tipos de personalidad, ¿tú quién crees ser?
Elena Sanz

Escrito y verificado por la psicóloga Elena Sanz.

Última actualización: 07 junio, 2022

Probablemente en algún momento ya hayas escuchado hablar del eneagrama ya que se trata de una de las clasificaciones de la personalidad más conocidas. El mismo se basa en ideas orientales y constituye una valiosa herramienta de autoconocimiento y desarrollo personal.

Cada uno de los nueve tipos de personalidad que describe cuenta con una forma particular de percibir y comprender el mundo. Así los patrones de pensamiento, sentimiento y acción son diferentes en cada uno de ellos.

El eneatipo al que pertenecemos nos muestra las máscaras que construimos durante la infancia. Estrategias que nos sirvieron para proteger nuestra integridad psíquica durante nuestros primeros años de vida pero que aún hoy utilizamos.

Dado que las condiciones han cambiado desde que fuimos niños estas máscaras ya no cumplen una función. Y, además, en la mayoría de los casos entorpecen nuestro desarrollo, pues nos atan a patrones rígidos y automáticos de los que no somos del todo conscientes.  Por ello te invitamos a conocer los nueve eneatipos que existen y a reflexionar sobre a cuál crees pertenecer.

¿Cómo se configura el eneagrama?

Dentro de la clasificación, los nueve tipos de personalidad se configuran en torno a dos variables:

  • El autoconcepto: hace referencia a la sensación mental interna que tiene la persona, considerándose superior, igual o inferior a los demás.
  • La capacidad empática: nos informa de cómo abordan los individuos sus relaciones con el mundo. Así, puede ser antipáticos (van contracorriente), apáticos (toman una postura neutral y de observador externo) y simpáticos (nadan a favor del mundo).

También es posible analizar el eneagrama clasificando las personalidades en función de cuál es el centro predominante: la mente , la emoción o el instinto . En todos los seres humanos operan los tres centros, pero uno de ellos suele ser el que predomina y guía nuestra interpretación de la realidad.

Una última variable a tener en cuenta a la hora de utilizar el eneagrama es la clasificación que surge en función del modo en que la persona gestiona su energía. Así, se distingue entre introvertidos (volcados en su mundo interno), extrovertidos (centrados en los demás y en su entorno) y ambivertidos (equilibrados entre los dos extremos anteriores).

El eneagrama: los nueve tipos de personalidad

A raíz de las anteriores variables surgen estos nueve tipos de personalidad que nos aportan valiosa información respecto a las actitudes y el modo de procesar la realidad de cada individuo.

1. El reformador

Se trata de personas perfeccionistas, meticulosas y organizadas. Individuos éticos, nobles y de principios, con un fuerte sentido del bien y del mal. Pueden ser excesivamente críticos consigo mismos y con los demás, así como bastante rígidos. Además, temen enormemente cometer errores.

2. El ayudador

Este tipo de personalidad se entrega a los demás de forma altruista, generosa e incluso abnegada. Es decir, buscan el amor y la aprobación de los demás a través de mostrarse serviciales y por ello suelen tener dificultades para cuidar de sí mismos y sus necesidades. Son altruistas y bondadosos, pero pueden caer en conductas de manipulación.

3. El triunfador

Son sujetos muy orientados al éxito, preocupados por su imagen y por las apariencias. Tanto que asumen como real la imagen ficticia que quieren dar. Ambiciosos y competitivos, centran su interés en el trabajo y tienden a alejarse de lo emocional. Además, son personas seguras y atractivas.

4. El individualista

Personas melancólicas, sensibles y profundas emocionalmente. Reservados y callados, tienden a ocultarse de los demás debido a su baja autoestima, aunque a su vez pueden sentir desdén por la forma de vida ordinaria. Además, suelen sentirse vulnerables y tienden a caer en la autocompasión.

5. El investigador

Cerebrales, perspicaces y curiosos, desean conocer la clave del funcionamiento del mundo. Pueden ser solitarios y excéntricos, pero también vanguardistas, visionarios y capaces de desarrollar complejas ideas.

6. El leal

Son personas comprometidas, responsables y trabajadoras. Se muestran ansiosos y escépticos y temen ser traicionados. Ante la autoridad pueden someterse o sublevarse y tienden a apoyar las causas de los más desfavorecidos.

7. El entusiasta

Las personas con eneatipo siete buscan llevar una vida placentera, estimulante y maravillosa. Así,  son optimistas y animosos; evitan el conflicto y el sufrimiento y se muestran encantadores. No obstante también suelen ser desorganizados e indisciplinados.

8. El desafiador

Son personas controladoras y retadoras, que se resguardan evitando la debilidad y ejerciendo el poder. Se muestran orgullosos, dominantes e intimidatorios, por lo que suelen tener problemas en sus relaciones sociales.

9. El pacificador

Las personas con el último tipo de personalidad son bondadosas, humildes y afables. Son conformistas y desean evitar los conflictos a toda costa, por lo que les cuesta poner límites. Además, pueden ser excesivamente pasivos y tozudos.

Trabaja con el eneagrama

Identificar nuestro eneatipo nos ayudará a tener presentes esos patrones automáticos que dirigen nuestra conducta. Tendencias de las que generalmente no somos conscientes pero que nos llevan a interpretar las situaciones de un modo determinado. Así como a defendernos con diversas estrategias poco funcionales.

Tomar conciencia del lugar que ocupamos en el eneagrama nos permite hacernos libres para dejar de repetir patrones. Es decir, nos abre una puerta a tomar el control deliberado de nuestros pensamientos y acciones. Así, al despojarnos de las máscaras que portamos podremos dejar salir nuestro verdadero ser.

Entonces no utilices el eneagrama para definirte, etiquetarte o limitarte. Por el contrario, utilízalo para conocerte y desarrollar tu mejor versión.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Palmer, H., & Shtereva, N. (1996). El eneagrama. Los Libros de la Liebre de Marzo.
  • Durán, C., & Gómez, A. C. (2011). Eneagrama: los engaños del carácter y sus antídotos. Editorial Kairós.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.