Franz Boas, biografía del padre de la antropología moderna
Franz Boas (1858-1942) fue un antropólogo originario de Alemania. Fundó el primer departamento universitario de Antropología en Norteamérica, específicamente en la Universidad de Clark en el año 1888. Además, fue quien instauró una forma más científica de estudiar la antropología, por la obligación de hacer trabajos de campo extendidos.
Conoce más sobre las circunstancias que llevaron a Franz Boas a crear esta nueva y prolija disciplina científica a continuación. Además, profundizaremos en las circunstancias sociales y personales que llevaron a este científico a estudiar este campo de la ciencia humana.
Su descubrimiento de la antropología
Como muchos antropólogos de la época, Boas nació y fue educado en Alemania. Inició su formación cuando tenía 20 años. Estudió física y matemáticas, doctorándose en geografía en 1881. Su tesis se titulaba: Contribuciones al entendimiento del color del agua.
En 1883 emprende una expedición al mar Ártico para estudiar la coloración de sus aguas. Allí se queda durante un año entero conviviendo con los esquimales y balleneros. Descubriendo de esta manera la etnografía, el método de la observación directa para estudiar fenómenos sociales y la importancia de comprender el contexto que lo rodea.
Su estrecha relación con los esquimales del Ártico desarrolló en Boas el interés por la antropología. Se centró principalmente en la investigación de campo en todos sus ámbitos: lingüístico, social y cultural, hecho que le llevó a comprender desde muy temprano que la lengua y la cultura cumplen un papel más importante en las sociedades que las condiciones naturales.
Al terminar la expedición regresó a Berlín, pero años después regresaría a Norteamérica a empezar a dar clases en la Universidad de Clark. Para 1889 ya era profesor en la Universidad de Columbia, cargo que despeñaría por el resto de su vida. Además, fue conservador del Museo Americano de Historia Natural en la sección de Etnología.
Aportes más importantes de Franz Boas a la antropología
Las contribuciones de Franz Boas a la antropología son numerosas y difíciles de sintetizar. Sin embargo, se puede decir que contribuyó en todos los aspectos de la instauración de la Antropología como ciencia, fungiendo como profesor, investigador, administrador y fundador de instituciones.
Escribió una inmensa cantidad de libros y artículos científicos, abarcando todos los campos de la antropología. Entre sus publicaciones existían algunas que versaban sobre lingüística, teoría etnológica, antropometría, folclore, problemas raciales, derechos civiles y un largo etc.
Boas estuvo en el centro de grandes hechos que marcaron un antes y un después en la antropología norteamericana. Se involucró en la modernización de la revista American Anthropologist (1889), y la fundación de American Anthropologist Association (1900) y American Folk-Lore Society (1888). Al igual que en la revitalización de la American Ethnological Society (1900).
Además, en 1910 contribuyó activamente en el establecimiento de la Escuela Internacional de Arqueología y Etnología Americanas en México, ejerciendo como director de la institución entre 1911 y 1912.
Uno de los aportes teóricos más importante de Franz Boas a la antropología fue una nueva mirada hacia el estudio de la cultura. La cual renunciaba al pensamiento imperante de la época sobre la evolución social lineal. En cambio, proponía una mirada relativista hacia las diferencias culturales. Esto generó que los antropólogos se centraran más en las particularidades de cada sociedad en vez de comparar culturas para hacer generalizaciones conjeturales.
La generación de antropólogos que educó
Otra de las grandes contribuciones de Franz Boas a la antropología fueron sus discípulos. Boas y sus discípulos construyeron los cimientos de una antropología profesional y universitaria, la cual estaba caracterizada por haber expulsando a los aficionados. De hecho, fue posible al instaurar la investigación etnográfica de campo como lo más importante dentro de la profesionalización antropológica.
Entre sus discípulos más famosos se encontraban: Ruth Benedict, Margaret Mead, Alfred Kroeber, Robert Lewie, Edward Sapir, entre otros. Todos ellos se dedicaron a esparcir la antropología a todo lo largo y ancho de Norteamérica. Kroeber y Lewie fueron a la Universidad de Berkeley. Sapir a la de Chicago, mientras que Mead y Benedict se quedaron en Columbia.
Sus reflexiones en torno a la raza
En 1911, Boas publicó el libro La mentalidad del hombre primitivo. Texto que puede ser considerado uno de los más importantes dentro de su prolífica producción científica. En sus páginas, Boas hace un esfuerzo por aclarar las relaciones entre la cultura y la raza y concluye que no existe relación directa y efectiva entre ellas, por lo que niega la existencia de razas inferiores y superiores. Por tanto, no se puede hablar de primitivo ni civilizado dependiendo del fenotipo que caracteriza a una sociedad.
Boas mantuvó y defendió esta posición teórica durante toda su vida. En 1931 publico un artículo en alemán reafirmando que la cultura no tenía nada que ver con la raza, tal como lo proponían algunos ultranacionalistas. La publicación fue realizada un año antes del dominio de Hitler en Alemania, lo que hizo que sus publicaciones fueran quemadas públicamente en Kiel.
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- Boas, F. (2008). Franz Boas: textos de antropología: Introducción, selección de textos, traducción y notas de Alfredo Francesch Díaz. Editorial Universitaria Ramón Areces.
- Boas, F. (1912). Notes on Mexican Folk-Lore. The Journal of American Folklore, 25(97), 204-260.
- Valdés Gázquez, M. (2006). El pensamiento antropológico de Franz Boas. Universidad Autónoma de Barcelona.