¿Qué son las identidades múltiples en el trabajo?
Las identidades múltiples en el trabajo están aumentando en los últimos años. Esto se debe a los cambios en las nuevas formas de concebir los puestos laborales y sus tareas. Surgen de la diversidad. Así, en las empresas existen tantas identidades como trabajadores; además, la propia empresa posee una identidad propia.
Tenemos un número equivalente de identidades al de grupos en los que participamos, de acuerdo con la teoría de la identidad social. A través del proceso de identificación con el grupo, se nutre buena parte del concepto que poseemos sobre nosotros mismos. A su vez, contar con identidades múltiples en el área laboral es tener diversidad cultural. Indaguemos más al respecto en esta lectura.
Nuestra diversidad es nuestra fuerza. Qué vida aburrida e inútil sería si todos fueran iguales.
Una aproximación al concepto de identidad múltiple
Si aplicamos el término de identidad múltiple al trabajador, nos estaremos refiriendo a las diferentes identidades que el empleado percibe como fruto de las distintas formas en que se identifica con el grupo. También influye la manera en que se categoriza a sí mismo como perteneciente a dicho grupo.
Por ejemplo, alguien que trabaje escribiendo se categorizará en el grupo de escritores, a la vez que se identificará con el grupo de su empresa que se dedica a la redacción. Hay tantas identidades como grupos con los que nos categorizamos e identificamos.
Por otro lado, las identidades múltiples en la empresa aluden al hecho de que, al existir tanta especialización en los puestos de trabajo, emergen nuevas formas de concebir los puestos que son distintivos, nucleares o determinantes para la compañía.
A continuación, te ofrecemos las principales características de las identidades múltiples que se dan en el trabajo.
Identidades múltiples individuales
Los trabajadores tienen tantas identidades como grupos laborales a los que pertenecen y estas forman parte del concepto que tienen sobre sí mismos. A través de la multiplicidad de identidades, las personas reducen el nivel de incertidumbre y potencian la autoestima.
El número de identidades es grande o pequeño y tiene diferentes niveles de profundidad, en función de lo significativo y relevante que sea el empleo para el trabajador.
Además, hay identidades que tienden a la estabilidad mientras que otras se pierden, como consecuencia del cese de la relación laboral. También pueden ser identidades de gran trascendencia cuando se relacionan con los valores y las preferencias que albergamos.
En suma, las identidades múltiples en el trabajo son producto de un conjunto de relaciones en el que se entrelazan, aparte de las identidades propias del trabajador, las de otros compañeros de trabajo, creando una matriz denominada empresa.
Precisamente la posibilidad de percibirse a uno mismo, a los miembros del propio grupo y a los de los grupos externos, se ha utilizado como una estrategia para la reducción de los estereotipos y los prejuicios.
Identidades múltiples organizacionales
Según un artículo publicado en Academy of Management Review, este concepto alude a las características de la empresa que son consideradas por los empleados como centrales. Por tanto, estas identidades son las que tienden a sobrevivir conforme la empresa crece y perdura.
Como cada trabajador tiene una óptica personalizada sobre qué rasgo es definitorio de una empresa, existirán múltiples identidades organizacionales. Pueden ser implícitas (como el tipo de ropa que los trabajadores llevan) o explícitas (como las normas de fichar a la salida del puesto), así como visibles o invisibles. Del mismo modo, están activadas o latentes de forma permanente.
Por ejemplo, en una empresa de envíos una de las características activadas es «¡entregaremos su paquete en 24 horas!»; mientras que una latente puede consistir en «si se produce un episodio de acoso laboral, tomaremos medidas inmediatas». Es decir, las latentes ocurren ante episodios puntuales y de gran envergadura.
Identidades múltiples y salud mental ¿Cómo se relacionan?
Diferente a lo que ocurre en otros casos, las identidades múltiples en el trabajo son factores protectores frente a la ansiedad, el estrés laboral y la sintomatología depresiva. La forma en que se relacionan es inversa, es decir, cuantas más identidades posean los trabajadores, tendrán menor riesgo de padecer algún problema de salud mental y mayor será el bienestar.
La clave podemos encontrarla en el apoyo social. Conforme más identidades poseen los empleados, será mayor el número de personas que les rodean y que tienen el potencial de ayudar. Asimismo, habrá mayor satisfacción al incrementar la sensación de aportes hechos al equipo.
A pesar de esto, siempre existe un límite y se deben considerar las habilidades de cada persona para evitar reducciones en la eficiencia u otros efectos negativos.
Al respecto, cabe mencionar lo que se plantea en un artículo publicado en Journal of Personality and Social Psychology, dado que allí se señala que las ventajas de los grupos sociales no solo se relacionan con la capacidad de lograr que los individuos se sientan bien, sino que además fomentan la seguridad y el autocontrol.
Ahora bien, hay que tener cuidado de evitar sobrepasar las horas laborales recomendadas, ya que el hecho de poseer múltiples identidades puede ser un factor que incremente el tiempo que dedicamos al trabajo, produciéndose en este caso consecuencias negativas que constituyen un medio para el desarrollo del temido síndrome de burnout.
Cuando las identidades son importantes para los individuos, su mayor número conduce a un mayor bienestar psicológico, siempre que exista armonía entre ellas.
No dejes de lado las identidades múltiples en el trabajo
Si tenemos en cuenta lo anterior, podemos llegar a la conclusión de que tener múltiples identidades en nuestro día a día laboral es muy positivo y aumenta nuestro bienestar, siempre y cuando estas nos faciliten el hecho de adaptarnos, ajustarnos y fluir con las circunstancias cambiantes de la vida.
Por tanto, es necesario que las tengamos presentes y que saquemos el mayor provecho de ellas, para que así nuestro entorno laboral se dote de las mejores condiciones y desempeñemos nuestras funciones de la mejor manera.
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