Minimalismo: deshazte de lo que te sobra para hacer espacio en tu mente

Minimalismo: deshazte de lo que te sobra para hacer espacio en tu mente
Bernardo Peña Herrera

Escrito y verificado por el psicólogo Bernardo Peña Herrera.

Última actualización: 12 agosto, 2019

Antes de hablar del minimalismo, mira a tu alrededor y haz recuento de los objetos que ves… ¿Sientes que hay muchas cosas acumuladas? ¿Más de las que necesitas? ¿Eres de las que llevan un bolso enorme del que hace tiempo que no ve el fondo? ¿Tienes ropa que hace años que no te pones? ¿Utensilios de cocina que solo has usado una vez?

Vivimos en un mundo en el que lo normal es que acumulemos más objetos de los que necesitamos, ya sean material de oficina, ropa, zapatos, maquillaje, herramientas…

Estas pertenencias ocupan espacio físico en nuestros hogares, desbordan armarios, cajones, arcones, zapateros… Pero lo peor es que también ocupan nuestro espacio mental y nuestro tiempo, ya que debemos clasificarlas, ordenarlas o limpiarlas.

¿No has pensado alguna vez en disfrutar de las cosas sencillas de la vida? Es decir, vivir con lo necesario y desprenderse de lo innecesario. ¿No sabes que lo que posees acabará poseyéndote?

Hay una anécdota de A. Schopenhauer que decía que cuando paseaba por su ciudad, por la zona de las tiendas, se asomaba al escaparate y, tras echar un vistazo a todo, decía: “cuantas cosas que no necesito”.

Pues bien, existe una filosofía de vida que puede ayudarte a ver y gestionar esta acumulación de manera distinta. Se trata del minimalismo. Y el minimalismo no consiste en tener menos, sino en hacer espacio para lo que de verdad importa.

¿Qué es el minimalismo?

Mujer con montones de ropa

El minimalismo es una filosofía de vida que propone reducir en lo posible el número de objetos materiales que poseemos. La idea es vivir con lo mínimo necesario, que para cada persona, con sus circunstancias, será distinto: tener menos cosas para tener más espacio físico y mental.

Al reflexionar sobre por qué almacenamos objetos que no usamos, nos daremos cuenta de que hay razones emocionales, además del típico “por si lo necesito alguna vez”. Prendas de ropa, regalos, cartas, etc., de los que nons deshacemos porque nos recuerdan a épocas pasadas, como si en los objetos materiales se guardasen los recuerdos.

El minimalismo es un ejercicio que nos ayuda a desapegarnos de las cosas materiales, dándonos cuenta de que los recuerdos viven en nosotros, no en los objetos.

Cuanto menos necesitas, más libre eres

Cómo poner en práctica el minimalismo

Lo ideal es empezar poco a poco, dividir los objetos por áreas y evaluar qué es lo que realmente necesitas, qué objetos no estás seguro de necesitar y de cuáles tienes claro que puedes deshacerte.

  • En la cocina: ¿Qué utensilios de cocina no he usado desde hace más de un año? ¿Realmente uso todas las especias que tengo?
  • En el armario: ¿Qué prendas de ropa o zapatos ya no me valen o no he usado desde hace más de un año?
  • En el despacho: ¿Tengo libretas, agendas viejas o apuntes de hace años? ¿Hay cajones “de sastre” que prácticamente no abro nunca?

Además, existen algunos retos que pueden ayudarnos a poner en práctica el minimalismo:

Proyecto 333

El Proyecto 333 nos anima a elegir 33 prendas de ropa y pasar una temporada solo con esas prendas. No es necesario tirar el resto, solo descartarlas.

Así nos daremos cuenta de con qué poco podemos vestir. Y no solo eso, sino también de cuánto tiempo ahorramos eligiendo qué ponernos cuando no hay tanto donde elegir.

Competición minimalista

Mujer tirandoc osas siguiendo teorías del minimalismo
Otro reto consiste en acordar con alguien que esté en el mismo proceso que tú hacer una especie de competición minimalista. El primer día del mes ambos habréis de deshaceros de una pertenencia; el segundo, de dos; el tercero, de tres… y así hasta el día treinta.

El que sea capaz de aguantar más, gana. Una vez tengas tu conjunto de objetos prescindibles, muchos puedes donarlos o venderlos a tiendas de segunda mano.

Beneficios del minimalismo

El minimalismo no solo ayuda a mantener la casa organizada y libre de “trastos”. Tiene otras muchas ventajas:

  • Ganamos tiempo al no tener que realizar los grandes cambios de armario, la limpieza de vajilla que no usamos, etc. También a la hora de decidir qué nos ponemos.
  • Aprendemos a desapegarnos de los objetos materiales y que los verdaderos recuerdos viven con nosotros.
  • Nos abre al futuro, al eliminar el apego que tenemos sobre los objetos del pasado.
  • Nos hace más libres: tenemos menos cargas a la hora de mudarnos o viajar, con lo que se hace más fácil.
  • Nos hace más conscientes de lo que consumimos, con el consiguiente ahorro, para nosotros y el medio ambiente.
  • Y, sobre todo, nos ayuda a tomar consciencia de que lo verdaderamente importante casi nunca es material

Si alguna vez te has visto desbordado por lo que acumulas, te ha costado encontrar algo o has sentido que pierdes mucho tiempo organizando o limpiando tus pertenencias, te animo a que pruebes a introducirte en esta filosofía de vida. El minimalismo es un camino directo hacia la paz mental


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.