¿Sigues tus sueños o pones excusas?

¿Sigues tus sueños o pones excusas?
Gema Sánchez Cuevas

Revisado y aprobado por la psicóloga Gema Sánchez Cuevas.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 15 octubre, 2020

Soñar es muy sencillo y crear castillos en el aire no cuesta nada. Pero hay una gran diferencia entre quienes logran sus sueños y quienes fracasan: las excusas . Todos hemos pasado por momentos en los que nos dejamos vencer por las excusas generadas por el miedo o la duda.

Esto es muy normal. La mayoría de nosotros ha sido educado para evitar el fracaso tanto como le sea posible. Para hacerlo solemos darnos el permiso de creer que no podemos conseguir aquello que anhelamos.

“Considero más valiente al que conquista sus deseos que al que conquista a sus enemigos, ya que la victoria más dura es la victoria sobre uno mismo”.

-Aristóteles-

Niña con diente de león

 

Así, las excusas se erigen en nuestra trayectoria como justificaciones a nuestros miedos o dudas, pero en realidad son solo obstáculos que no queremos ver. A continuación, os señalamos las excusas más comunes para no seguir nuestros sueños son:

Me falta dinero

 

Claro que el dinero es importante para salir adelante, para comer y para vestir. Sin embargo, el decir que no tienes dinero no te va a ayudar en nada.  Lo cierto es que a nadie le sobra el dinero, ni siquiera a los millonarios. Si lo analizas bien te darás cuenta que ellos han aprendido a administrar su dinero para alcanzar sus sueños .

La fuerza de esta excusa depende más de lo que estés dispuesto a sacrificar ahora mismo. Imagina que tu mayor sueño es viajar por el mundo pero no lo haces porque crees que no tienes dinero. ¿Qué estás dispuesto a sacrificar para lograr esta meta?

“Realmente soy un soñador práctico; mis sueños no son bagatelas en el aire. Lo que yo quiero es convertir mis sueños en realidad”.

-Mahatma Gandhi-

No seré capaz de…

 

Completa la frase con lo que sea que quieras lograr, da igual en qué consista, desde lo más mínimo o sencillo hasta los más grande y complejo. En verdad puede funcionar con cualquiera de los sueños o metas que tengas en la vida.

Esta frase nace de las inseguridades y no es malo pensarla o decirla de vez en cuando. Lo que sí está mal es dejar que esas dudas te ganen. Incluso si crees que no lo lograrás, da el siguiente paso siempre. Atrévete a equivocarte y si lo haces, aprovecha para perfeccionar la estrategia que te ayude a lograr tu objetivo.

“Si has construido castillos en el aire, tu trabajo no se pierde; ahora coloca las bases debajo de ellos”.

-George Bernard Shaw-

No tengo tiempo para perseguir mis sueños

 

Todos tenemos la misma cantidad de horas en nuestro día. A pesar de eso, solo un pequeño número de personas logran sus sueños. La gran mayoría pasa más tiempo quejándose o gastando su tiempo en cosas que los alejan de sus objetivos.  

Mujer en un barco de papel por la noche

A veces, no es que no tengas tiempo sino que tus prioridades no están bien organizadas. Piensa en los compromisos que tienes. ¿Cuáles de ellos son realmente imprescindibles? ¿Qué cosas podrías evitar hacer para liberarte un poco? ¿Tus actividades realmente te ayudan a alcanzar tus sueños o no tienen nada que ver? 

Puede no resultar tan fácil porque todos tenemos obligaciones pero hay que darse tiempo para trabajar por lo que anhelas. paciente y no corras, las prisas nunca fueron buenas.

“Puedes decir que soy un soñador, pero no soy el único. Espero que algún día te unas a nosotros y el mundo vivirá como uno solo”.

-John Lennon-

No es para lo que me educaron

 

Las enseñanzas e ideas que aprendemos en casa nos definen en muchos sentidos. Tus mayores sueños pueden ir totalmente en contra de lo que te han dicho que es aceptable.  Aquí es donde debes tomar una decisión crucial: seguir el camino que te han marcado o el que te lleve a tu sueño. Toma la mejor decisión haciéndote las siguientes preguntas:

  • ¿Soy feliz con lo que hago?
  • ¿Dañaré a alguien si sigo mi sueño?
  • ¿Valdrá la pena seguir mi sueño?
  • ¿Qué es lo peor que puede pasar si hago lo que deseo?

Es estas preguntas, la más importante es la última. Imagina el peor panorama que puede surgir al hacer lo que quieres. Si tus sueños no implican un delito o un daño grave a otra persona o a ti, ¿por qué no hacerlos realidad? Nunca se es demasiado viejo o joven para hacerlos realidad.

“Sólo es capaz de realizar los sueños el que, cuando llega la hora, sabe estar despierto”.

-León Daudí-


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.