Terapia con delfines: ¿en qué consiste y cómo puede ayudar?

La terapia con delfines es utilizada tanto con niños como adolescentes y adultos. Se trata de una modalidad terapéutica complementaria a otros tratamientos y que tiene resultados interesantes, según algunos estudios.
Terapia con delfines: ¿en qué consiste y cómo puede ayudar?
José Padilla

Escrito y verificado por el psicólogo José Padilla.

Última actualización: 22 febrero, 2022

La terapias con animales son cada vez más utilizadas por la potencia de sus efectos y el bienestar que se puede generar con ellas. En concreto, la terapia con delfines ha sido implementada con personas que tienen dificultades a nivel cognitivo, social y emocional.

Usualmente, este tipo de terapia con animales es usada en niños con algún trastorno del espectro autista o desórdenes psicomotrices. La delfinoterapia también se ha administrado en adultos con cuadros de depresión o estrés postraumático. Veamos de qué se trata.

¿Qué es la terapia con delfines?

Delfines
La terapia con delfines se utiliza de forma complementaria al tratamiento psicológico o médico.

La terapia con delfines es una intervención que se emplea frente a distintos problemas de salud. En este marco, se diseñan las sesiones para que la persona nade o interactúe con delfines. El objetivo es que este contacto sirva de estímulo para las diferentes habilidades en las que se han detectado dificultades. Además, por norma, se usa como una forma complementaria a la terapia psicológica.

La delfinoterapia se realiza en parques acuáticos o centros especializados. Lo habitual es que se cuente con un equipo de especialistas responsables de desarrollar las sesiones de terapia, de manera que sirvan de apoyo para los pacientes durante la interacción con los delfines.

El objetivo central de las sesiones terapéuticas es aumentar la participación y los comportamientos objetivos en función de un programa personalizado. Así, la intervención se centra en aumentar la frecuencia de determinadas conductas mediante los principios de la modificación de conducta en una terapia intensiva a corto plazo (Nathanson, 1998).

La terapia asistida por delfines tiene muchas variantes que van desde simplemente mirarlos, cuidarlos, tocarlos o entrar al agua y nadar con ellos. Los terapeutas son quienes determinan la modalidad de la interacción entre el paciente y el delfín de acuerdo con la dificultad especifica del paciente y los objetivos que se quieran alcanzar.

La duración y frecuencia de cada sesión varía según el plan de tratamiento. Algunos programas se realizan durante una semana, dos semanas o un mes. Otros duran un par de horas en lugar de los 10 a 30 minutos, siendo esta más rentable (Nathanson, 1997).

Ejemplo de terapia asistida por delfines

En una intervención delfinoterapéutica, los niños, por ejemplo, pasan primero por una sesión introductoria en la que el terapeuta se sienta con él en el borde del muelle, mientras el entrenador de delfines está dentro del agua estimulando y manipulando el movimiento del animal. Por lo general, los niños pueden tocar, jugar o dar órdenes al animal.

Esta primera sesión busca familiarizar y hacer que el niño se sienta cómodo y seguro con el delfín. Una vez se ha completado esta etapa de orientación, comienzan las sesiones terapéuticas programadas.

Durante el desarrollo de las sesiones de terapia, se le permite al niño jugar con el delfín por un corto periodo de tiempo, ya sea desde el muelle o metiéndose en el agua después de emitir una respuesta motora, emocional o cognitiva que se considere correcta.

Niño haciendo delfinoterapia
La delfinoterapia produce cambios en la coherencia interhemisférica en niños con trastorno del espectro autista (TEA).

Fundamento teórico de la delfinoterapia

Algunos partidarios de la delfinoterapia sostienen que el ultrasonido emitido por los delfines mediante los clics de ecolocalización podría tener un efecto sobre el tejido biológico en algunas circunstancias (Brensing et al., 2003). Estos efectos sobre el organismo podrían propiciar la curación al cambiar el tejido corporal y la estructura celular. Sin embargo, la evidencia que la respalda es puramente anecdótica, no científica (McKinney et al., 2001).

Otros teóricos afirman que los delfines son especialmente sensibles a las personas con discapacidad y que pretenden “ayudarlas” prestándoles una atención especial mediante la expresión lúdica (McKinney et al., 2001). Esto ha sido reconocido como “lenguaje secreto” por algunos terapeutas defensores de la delfinoterapia.

También se ha sostenido que el contacto humano con los delfines produce emociones intensas de reconexión y felicidad que parecen aumentar el bienestar del paciente.

Más investigación

Las esperanzas que depositemos en la delfinoterapia deben contar con un punto de prudencia, pues se ha detectado un gran peso de las diferencias individuales a la hora de precisar su eficacia. Además, se ha encontrado que la mayoría de los estudios que se han realizado tienen serias debilidades metodológicas y hoy en día es un proceder que conocemos sobre todo por estudios de casos únicos (Fiksdal et al., 2012).

Con respecto a los posibles cambios sobre el comportamiento que pueda tener esta terapia, se puede afirmar que estos pueden ser el producto del deseo del paciente de interactuar con los delfines. Es decir, los delfines actúan como un refuerzo positivo que aumenta la aparición de determinadas conductas.

Así pues, el cambio no se produce por una propiedad inherentemente sanadora o rehabilitadora de los delfines, sino por la influencia del condicionamiento operante.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Belmonte-Parralo, J. F., Rojo, V. I., & Muñoz-Vico, F. J. (2018). Efecto de la terapia asistida con delfines en los niveles de estrés fisiológico en niños con discapacidad de origen neuropsiquiátrico. Cuestiones de fisioterapia: revista universitaria de información e investigación en Fisioterapia47(1), 25-33.
  • Brensing, K., Linke, K., & Todt, D. (2003). Can dolphins heal by ultrasound?. Journal of theoretical biology225(1), 99-105.
  • Fiksdal, B. L., Houlihan, D., & Barnes, A. C. (2012). Dolphin-assisted therapy: claims versus evidence. Autism research and treatment. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3420785/
  • McKinney, A., Dustin, D., & Wolff, R. (2001). The Promise of Dolphin-Assisted Therapy. Parks & Recreation36(5), 46-50.
  • Nathanson, D. E., de Castro, D., Friend, H., & McMahon, M. (1997). Effectiveness of short-term dolphin-assisted therapy for children with severe disabilities. Anthrozoös10(2-3), 90-100.
  • Nathanson, D. E. (1998). Long-term effectiveness of dolphin-assisted therapy for children with severe disabilities. Anthrozoös11(1), 22-32.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.