Los 4 tipos de sugestión

¿Qué es la sugestión? ¿Cómo nos afecta? ¿Qué podemos hacer cuando queremos protegernos frene a su efecto? En este artículo contestaremos a estas y otras interesantes preguntas.
Los 4 tipos de sugestión
Sergio De Dios González

Revisado y aprobado por el psicólogo Sergio De Dios González.

Escrito por Edith Sánchez

Última actualización: 21 abril, 2022

La sugestión es un canal a través del cual se introduce algún contenido en la mente de una persona, sin que esta sea consciente de ello. Esto se puede lograr mediante palabras, gestos, signos, sensaciones, atmósferas, etc. También hay varios tipos de sugestión, dependiendo de la forma como operan o del canal que utilizan.

Todos los tipos de sugestión tienen en común el hecho de que se logra un cambio en el pensamiento, las emociones  o la conducta de la persona sugestionada, mediante la introducción de un contenido externo. De una u otra manera, hablamos de una manipulación de la mente.

Los diferentes tipos de sugestión se han empleado desde hace mucho tiempo. En principio, y quizás sin ser deliberado, se han utilizado para establecer o modificar las creencias políticas, religiosas o ideológicas. También se aplican, con otros propósitos, en los procesos terapéuticos, así como en marketing y publicidad.

En el curso de la próxima generación, creo que los amos del mundo descubrirán que el condicionamiento infantil y la narcohipnosis son más eficaces como instrumentos de gobierno que los garrotes y los calabozos, y que la avidez de poder puede satisfacerse tan cabalmente si mediante sugestión se hace que la gente ame su servidumbre como si a latigazos y puntapies se le impone la obediencia”.

-Aldous Huxley-

Hombre convenciendo a otras personas

Cómo opera la sugestión

Los diferentes tipos de sugestión suponen la existencia de un contenido que se quiere introducir en la mente de algún individuo. Así mismo, debe existir un agente que lo produzca, un canal que sirva de medio/enlace y una técnica para hacerlo posible.

Es habitual que quien ejerce la sugestión sea una figura de autoridad. En ese caso, su dignidad misma hace que sus ideas y mandatos influyan de modo notable sobre quienes están bajo su esfera de poder. Así mismo, es posible sugestionar mediante la repetición continua de algún contenido.

Casi siempre la sugestión está asociada también a signos y señales en un determinado entorno. El ingreso a un templo, por ejemplo, induce de inmediato a conductas específicas. Lo mismo ocurre con una galería o una discoteca. Así mismo, la actitud o la gestualidad de alguien inclina hacia determinadas creencias o comportamientos.

Los tipos de sugestión

Como ya lo señalamos, hay varios tipos de sugestión. Todos tienen características comunes, pero operan de una manera diferente. Así mismo, cambian los canales y los agentes que la provocan.

Desde ese punto de vista, encontramos cuatro modalidades, como veremos a continuación.

1. Directa

La sugestión directa tiene lugar cuando la fuente de la misma es una figura de autoridad  y genera un mandato. La persona sugestionada no se detiene a evaluar la conveniencia o pertinencia de la orden, sino que la cumple sin más. Como se aprecia, este es uno de los tipos de sugestión más asociados al poder.

2. Indirecta

En la sugestión indirecta se emplean medios más sutiles para lograr que una persona modifique su conducta. No se le imparte una orden, sino que se le induce a que haga o piense algo, de manera menos evidente. Por ejemplo, cuando se le dice a alguien que realizar actividad física es un factor que prolonga la vida.

3. Hipnótica

La hipnótica es otro de los tipos de sugestión. Hace referencia al empleo de técnicas y mecanismos que tienen como objetivo inducir a una persona a que entre en un estado hipnótico. En este caso, se opera mediante mandatos dirigidos al inconsciente de la persona sugestionada, es decir, hipnotizada.

Terapeuta haciendo hipnosis a un paciente

4. Autosugestión

La autosugestión es un proceso en el que es la misma persona quien se induce a determinadas creencias o conductas. A veces, esto se hace por repetición, como cuando una persona dice “lo haré, lo haré, lo haré”. También es posible hacerlo mediante una acumulación de argumentos, verdaderos o falsos. Por ejemplo, creer que un gato negro significa un mal día e interpretar los hechos de acuerdo con esta idea.

Otros tipos de sugestión

Los anteriores son los principales tipos de sugestión, pero no los únicos. Como lo indicamos antes, el entorno también tiene un poder sugestivo. Desde ese punto de vista, existen otras tres modalidades de sugestión:

  • Sugestiones motoras. Aquellas que inducen un determinado movimiento -también pueden inducir su inhibición-. Por ejemplo, en un almacén, la indicación de que un producto se encuentra en un determinado lugar va a hacer que nos desplacemos en esa dirección si es el que estamos buscando. Los productos que están a la altura de la mirada del cliente son los más visibles para él; los que están arriba o abajo en las estanterías lo tienen más difícil para captar la atención. Así mismo, junto a las cajas para pagar suelen colocarse productos baratos y que no son básicos. El objetivo con ello es que nos animemos a comprarlos mientras esperamos nuestro turno para que nos cobren.
  • Sugestiones sensorio-fisiológicas. Tienen que ver con las conductas que se inducen apelando a los sentidos o a las reacciones fisiológicas. En las tiendas, por ejemplo, se pone determinada música que induce estados afectivos frente a la experiencia de comprar. La música clásica nunca se escucha, sino ritmos que relajan y hacen que las personas “bajen” sus defensas psicológicas.
  • Sugestiones cognitivo-perceptivas. Aquí también entran en juego los sentidos, pero a ellos se suman contenidos mentales que repercuten en la memoria. Un comercial puede aprovecharse de ello con una imagen y un eslogan. La imagen es impactante para los sentidos; el eslogan resume lo que el vendedor pretende que quede en la memoria del consumidor -un contenido, lógicamente, que le ayude a comprar-.

Los tipos de sugestión pueden ser utilizados de distintas formas. A veces, el objetivo es lograr que la persona sugestionada se identifique con los intereses de quien produce la sugestión. Otras veces incluso puede marcar un camino válido para dejar atrás determinados problemas de conducta.


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