5 actitudes que indican que tienes una alta necesidad de aprobación

La necesidad de aprobación surge de una serie de inseguridades y distorsiones cognitivas que hacen que las personas renuncien a su personalidad por verse bien con los demás.
5 actitudes que indican que tienes una alta necesidad de aprobación
Alicia Escaño Hidalgo

Escrito y verificado por la psicóloga Alicia Escaño Hidalgo.

Última actualización: 12 agosto, 2024

La necesidad de aprobación ocupa el puesto número uno en la lista de creencias irracionales propuestas por el conocido psicólogo cognitivo Albert Ellis. Muchas personas sufren demasiado debido a esta idea nada realista: necesito la aprobación y aceptación de casi todas las personas significativas de mi entorno para poder ser feliz.

¿Por qué es irrealista? Pues por la sencilla razón de que nunca conseguirás agradar a todo el mundo debido a que cada persona tiene sus propios valores, criterios y opiniones personales y no siempre van a encajar con los tuyos. No son mejores ni peores, sino simplemente distintos.

Por mucho que nos esforcemos en contentar a todo el mundo, no conseguiremos nuestro cometido y además dejaremos de ser personas auténticas, lo que nos creará grandes dosis de ansiedad e incluso algún que otro rechazo extra.

Esto no es incompatible con desear caerle bien a algunas personas. Somos seres sociales, y por ello a todos nos gusta que nos quieran, que cuenten con nosotros para hacer planes, que nos elogien o sentirnos aceptados en un grupo social. Sin embargo, no lo necesitamos de forma absoluta. Si nos decimos lo contrario, entonces sufriremos y seremos esclavos de algo que no podemos controlar directamente: el que nos quieran.

Las personas pensamos que necesitamos el amor de los demás para ser felices, pero realmente lo que más necesitamos es nuestro propio amor. De esta forma, tendremos mejores relaciones con los demás y en consecuencia recibiremos más amor del entorno.

Una necesidad de aprobación exagerada en realidad empeora las relaciones. Se produce la llamada profecía autocumplida: nuestras acciones, de forma equivocada, tienden a confirmar nuestras creencias irracionales. ¿Quieres conocer cuáles son las actitudes típicas que denotan una alta necesidad de aprobación? Sigue leyendo.

Mujer preocupada y triste con la mano en la frente

Actitudes que indican necesidad de aprobación

Justificar demasiado todo lo que hacemos o dar explicaciones excesivas

A veces nos encontramos con que hay alguien que no aprueba alguna de nuestras actitudes. Entonces, como forma de control, podemos tender a justificar lo que hemos hecho, creyendo que así el otro lo entenderá y nos dará la razón. Pero es muy poco probable que esto ocurra: las opiniones personales raras veces se modifican con justificaciones o explicaciones.

Lo más sensato es aceptar la opinión del otro y mantener una buena relación con él, a pesar de esa pequeña e insignificante diferencia.

Cambiar de opinión

Cambiar de ideas es signo de madurez y flexibilidad mental, pero solo en el caso en el que los argumentos de nuestro interlocutor nos han convencido realmente. Si te ves cambiando de opinión constantemente por miedo a ser cuestionado y no ganarte su aprobación, estás siendo víctima de esta necesidad irrealista.

Date cuenta de que uno de los atributos que más valoramos en los demás es que sean ellos mismos y que demuestren firmeza y seguridad. Por lo tanto, se firme en tus opiniones, deseos y valores y acepta el hecho de que quizás otros no estén de acuerdo.

Usar la ira con los demás

Si eres de los que se enfurecen cada vez que alguien no está en consonancia contigo, en realidad, estás reclamando aprobación. El problema es que la ira no es la mejor manera de conseguir que los demás te aprueben. De echo, esta emoción tan negativa, aleja a las demás personas, aumentando sensiblemente las probabilidades de obtener un resultado opuesto al que buscabas: los rechazos, además del malestar tan grande que genera la ira en tu cuerpo.

Quizás una buena forma de acabar con este reclamo, sería aceptar el punto de vista del otro y comunicar el tuyo de forma asertiva.

Miras compulsivamente cuántos “me gusta” tiene la foto que has subido

La era de la tecnología ha resaltado todavía más la necesidad de aprobación. ¿Cuántas personas conoces que no paran de subir fotos de ellos mismos? En realidad, esta actitud encierra una gran necesidad de ser aprobados, la cual se refuerza con la cantidad de “me gustas” o comentarios que reciben.

Son esclavos de la aprobación de sus amigos virtuales. Si no recibiesen muchos “me gustas”, probablemente se hundirían.

Hombre mirando su móvil

No mostrar disconformidad cuando algo no nos agrada

Muchas veces los demás no actúan de la forma que nos gustaría y no pasa nada, porque los errores existen y pueden enmendarse. El problema es cuando tú no eres capaz de darle oportunidad a esa persona de arreglar un fallo. También sucede cuando hay disparidad de opiniones y no eres capaz de respetar la suya, por muy equivocada que piensas que esté.

Por miedo a la desaprobación, te quedas callado sin expresar tu desacuerdo o reclamar aquello que crees que te pertenece. Aguantas tu malestar, te lo tragas y lo pasas mal, cuando en realidad podrías expresarte de forma serena y asertiva con esa persona y seguramente los dos saldríais ganando.

No necesitas gustar a todo el mundo para se feliz. Si te quieren algunas personas de tu entorno, ya puedes sentirte realmente afortunado. Siempre que esté en nuestra mano, intentaremos ser amables, educados y actuar correctamente, pero no olvidemos que también fallamos o que simplemente nos diferenciamos de otros.

No tenemos por qué ser amigos de todo el mundo ni recibir amor allá por donde vayamos. Lo realmente importante que las acciones que hagas consigan tu aprobación, además de ser respetuoso con las discrepancias que puedan rodearte. De esta forma, te darás cuenta como el amor, a modo de boomerang, regresa a ti. Cuanto más te quieras tú, más te querrán los demás.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.