Aprende a que los demás no condicionen lo que dice tu corazón
Cuando nos encontramos en el camino de nuestras metas, sueños, logros, aspiraciones… solemos fijar nuestro éxito comparándonos constantemente con lo que consiguen y tienen los demás. Nos educan para buscar la felicidad y la consecución de objetivos, pero no nos entrenan para saber escucharnos fisica y emocionalmente, bailar al son de nuestro propio corazón, y no con el de las personas que nos rodean.
Os contaré mi vivencia. Hace ya unas semanas comencé un curso estupendo, de esos que despiertan el alma y te desarrollan en niveles “magicos” de la vida. El temario alucinante, unos conocimientos que recomiendas al mundo entero.
Después de varios días de clases decidimos,a consentimiento de cada uno, abrir un grupo a través de una de las aplicaciones móvil actualmente mas de moda, y a la que últimamente, soy un poco reacia por el gasto de tiempo que conlleva . El asunto es que en clase, cuando pasaron la hojita de “si o no” a entrar en el grupo, una voz interior me dijo “Paula, si sabes que esto te va a agobiar” .
¿Sabéis que pasó después de una semana en la que me encontré con mucha ansiedad, agobio y autoenfados? Que me di cuenta que había pasado cinco días super enfadada conmigo misma por no haber confiado en mi y lo que me decía mi persona desde el principio. Habia preferido “no ser diferente y caer bien” priorizándolo contra mis deseos y mis verdaderas necesidades.
Esta situación es el ejemplo de muchos de los momentos en los que nos dejamos llevar por los demás. Pero cuando reflexionamos y hacemos lo que de verdad necesitamos y somos nosotros mismos, no hace falta querer caer bien a nadie y seguir el ritmo de los de alrededor. Lo importante es ser valiente, y enfrentarte a tus inseguridades, porque la verdadera persona a la que tienes que seguir el ritmo es a ti mismo.
Todos sabemos que las relaciones sociales es un tema denso y mucho en lo que trabajar aún, pero digno de mención ya que a todos, en pocas o muchas ocasiones, del tipo que sea (familiar, amistades, trabajo, compañeros….) nos condiciona y afecta.
Lo importante es tenerlo en cuenta y trabajar nuestra autocreencia, poniendo y desarrollando nuestros propios recursos, que creerme, todos tenemos infinitos. Personalmente, lo descubrí gracias a estos días y este maravilloso grupo que me enamoró, haciéndome valiente de despedir con todo el cariño de mi corazón 🙂