Cerrar bien una relación pasada es el mejor punto de partida para una nueva

Cerrar bien una relación pasada es el mejor punto de partida para una nueva
Alicia Garrido Martín

Escrito y verificado por la psicóloga Alicia Garrido Martín.

Última actualización: 28 febrero, 2022

Empezar una relación es empezar un nuevo capítulo en el libro de tu vida. Ello implica aprender las lecciones de los anteriores capítulos para poder sacar todo el provecho de la lectura del nuevo capítulo. Sin embargo, no por ello hemos de estar estancados en capítulos anteriores, como quien mantiene el freno de mano puesto por “lo que pueda pasar”.

A veces nos encontramos con problemas muy comunes a la hora empezar una nueva relación. Dependiendo de cómo hayan sido las anteriores nos volvemos más o menos cautelosos, más o menos precavidos. Andamos a tientas en la oscura incertidumbre de este nuevo reto que nos presenta en la vida.

Lejos de convertirse en un acto espontáneo y natural, enamorarse se convierte en una profesión de riesgo. El miedo nos agarra fuerte de la mano, nos susurra al oído futuros riesgos relacionados con problemas pasados y nos paraliza la espontaneidad y el disfrute. Los aparta. Los relega a una posición de segunda de manera totalmente injusta para nosotros y para esa persona que ha aparecido en nuestra vida.

Antes de empezar otro capítulo reposemos el anterior

La espontaneidad, el gozo, y la paz mental quedan muchas veces soterradas a una vida mejor. Esperando ser recogidas del lugar donde las hemos colocado. ¿Por qué? Quizás porque aparece un miedo atroz a repetir viejos errores. A elegir mal, a no saber predecir las señales o interpretarlas de manera correcta.

Mujer mirando la puesta de sol

Por todo ello hay que dejar un tiempo al pasado para que se repose (en la medida de lo posible). Para que se filtren todos los aprendizajes y las lecciones que este nos ha dado con su transcurrir. Cuando enganchamos una relación con otra no estamos dejando ese tiempo de reposo que nuestro corazón necesita para cribar y entender las experiencias que ha vivido.

“Los que no pueden recordar el pasado están condenados a repetirlo”

-George Santayana-

Sobre todo en los casos en los que la relación pasada ha sido tóxica y perniciosa para nosotros. Debemos ser capaces de encontrar un espacio en el tiempo para entender qué nos ha querido enseñar esa relación. Culpar al otro de nuestra responsabilidad nunca ayuda. Por ello es siempre importante dialogar con nosotros mismos de manera honesta y sincera.

Cuando aprendemos las lecciones del pasado elegimos mejor

Los capítulos siguientes se toman de una manera más libre y sin tantos enganches. Así las personas aparecen en nuestra vida de una manera más natural y menos forzada. Cuando el corazón está tranquilo y ha aprendido las lecciones del pasado, está dispuesto a emprender una nueva aventura de manera más sana y libre.

“Deberíamos usar el pasado como trampolín y no como sofá”

-Harold MacMillan-

Los errores del pasado nos ayudarán a saber elegir a esa persona. Por supuesto no querremos volver a pasar por lo mismo que nos ha hecho sufrir. Por ello es crucial plantearnos cuál ha sido nuestra responsabilidad en todo lo que hemos vivido. Cuáles han sido las heridas que nos han hecho elegir unas personas y no otras.

La incertidumbre forma parte de la vida, no nos puede paralizar

Desde ese lugar limpio, puro y sano, podremos elegir mejor a nuestra nueva pareja. No serán los enganches, ni las dependencias, ni las carencias las que elijan. Si no mi “yo” completo y sano el que quiera elegir, y elegirá a alguien que nos enriquezca, que nos aporte luz y sosiego con su presencia.

Aprender las lecciones del pasado es crucial para seguir caminando en el sendero de nuestra vida. La incertidumbre sobre si todo saldrá bien es algo que hemos de asumir como parte de nuestra existencia. Pero un yo más sabio se habrá erigido y ya no será todo tan caótico.

Es bueno tener cautela y cierto respeto a lo que se avecina, pero también hemos de dar cierto margen a la vida para que nos sorprenda con su devenir. Por ello, cierra capítulos, aprende sus lecciones y comienza el nuevo capítulo con ilusión y entrega. Sólo así podrás recibir lo bueno que está por venir.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.