El principio de Premack, ¿qué es exactamente?

La importancia del principio de Premack es que, en potencia, cualquier actividad de elevada probabilidad puede ser un reforzador eficaz de una respuesta que el sujeto no muestre inclinación a realizar. Cabe destacar que la fuerza del vínculo es directamente proporcional a la probabilidad previa de la actividad reforzante.
El principio de Premack, ¿qué es exactamente?
Marián Carrero Puerto

Escrito y verificado por la psicóloga Marián Carrero Puerto.

Última actualización: 17 noviembre, 2019

El principio de Premack es una teoría del condicionamiento operante (Skinner), propuesta por el psicólogo estadounidense David Premack.

Dadas dos respuestas en un procedimiento de condicionamiento operante, la respuesta más probable reforzará a la conducta menos probable, mientras que la respuesta menos probable no reforzará a la conducta más probable. Dicho así, es un poco difícil de entender; sin embargo, esperamos que después de leer el artículo puedas volver aquí y le encuentres sentido a estas palabras.

El principio de Premack reconoce el hecho de que las personas tienen preferencias diferenciales. Premack sugiere que los diferentes aspectos de los trabajos se pueden organizar jerárquicamente, los más preferidos en la parte superior, los menos en la parte inferior. Dada la opción, la gente tenderá a pasar más tiempo realizando esas tareas en una posición más alta en la jerarquía de su trabajo.

Desafortunadamente, esto puede significar que otras tareas, igualmente necesarias en la jerarquía, reciben menos atención de la debida. Premack señaló que el reforzador puede ser cualquier situación o actividad que el sujeto valore. Por lo tanto, un comportamiento agradable y frecuente aumenta la ejecución de otro menos preferible o probable, siempre y cuando el primero se haga contingente al segundo.

El principio de Premack brinda la guía para elegir reforzadores eficaces: observar lo que la gente hace cuando tiene que tomar una decisión y ordenar esas conductas en términos de probabilidad. Por otro lado, cualquier reforzador que se aplique con mucha frecuencia puede provocar saciedad y reducir las respuestas.

“Condiciona a la gente para que no espere nada y tendrás a todos excitados con la mínima cosa que les ofrezcas”.

-Ivan Pavlov-

Chica pensando en cómo abordar una situación estresante

Adentrándonos en el principio de Premack

Premack señalaba que las respuestas involucradas con los reforzadores de uso común implican actividades que es muy probable que realicen los animales. En un experimento con reforzamiento alimenticio, por lo general, se priva de comida a los participantes que, en consecuencia, se muestran muy propensos a participar en la conducta alimentaria.

En contraste, las repuestas instrumentales suelen ser actividades de baja probabilidad. Por ejemplo, la probabilidad de que una rata experimentalmente ingenua presione una palanca es mucho menor que la probabilidad de que coma. Premack (1965) propuso que esta diferencia en las probabilidades de las respuestas es crucial para el reforzamiento.

El principio de Premack puede exponerse formalmente de la siguiente manera:

Dadas dos respuestas de probabilidad distinta, Ay B, la oportunidad para realizar la respuesta de alta probabilidad (A) después de la respuesta de baja probabilidad (B) tendrá como resultado el reforzamiento de la respuesta B (B–> A refuerza a B). La oportunidad para realizar la respuesta de baja probabilidad (B) después de la respuesta de mayor probabilidad (A) no resultará en el reforzamiento de la respuesta A (A–> B no refuerza A).

El principio de Premack se enfoca en la diferencia de la probabilidad de la respuesta instrumental y la respuesta reforzadora. Por tanto, se conoce también como principio de probabilidad diferencial. Comer reforzará la presión de palanca, pes, por lo regular, comer es más probable que “palanquear”. Fuera de eso, la teoría de Premack niega que exista algo especial en un reforzador.

Experimentos que se realizaron para probar la teoría

Premack y sus colaboradores llevaron a cabo muchos experimentos para probar su teoría (Premack, 1965). Uno de los primeros estudios se realizó con niños pequeños. Se les proporcionó dos respuestas alternativas (comer caramelos y jugar con una máquina de pinball), para luego medir que respuesta era más probable para cada niño. Algunos de los niños preferían comer caramelos a jugar al pinball, pero otros preferían jugar con la máquina.

En la segunda fase del experimento, se probó a los niños con uno de los dos procedimientos. En uno, se designó a comer como la respuesta reforzadora y a jugar al pinball como la respuesta instrumental. Es decir, los niños tenían que jugar con la máquina de pinball para tener acceso a los caramelos. En congruencia con la teoría de Premack, en esas circunstancias, solo los niños que preferían comer a jugar al pinball mostraron un efecto de reforzamiento.

En otra prueba, se invirtieron los papeles de ambas respuestas. Comer fue la respuesta instrumental y jugar al pinball la respuesta reforzadora. Los niños tenían que comer caramelos para tener acceso a la máquina de pinball. En esta situación, solo los niños que preferían jugar a comer mostraron un efecto de reforzamiento.

“Dame un niño y lo moldearé para cualquier cosa”.

-Skinner-

Niña con caramelos en las manos

Aplicaciones del principio de Premack

El principio de Premack ha tenido un gran impacto en el diseño de los principios de reforzamiento utilizados para ayudar a diversas poblaciones clínicas.

Charlop, Kurtz y Casey (1990) compararon la efectividad de varias formas de reforzamiento en el entrenamiento de algunas habilidades académicas en distintos niños con autismo (Hanley, Iwata, Thompson y Lindberg, 2000).

Las tareas incluían identificar, entre varios objetos, cuáles eran iguales o diferentes de uno sostenido por el maestro, sumar monedas y dar respuestas correctas a oraciones diseñadas para enseñar pronombres receptivos o preposiciones.

En una condición experimental, se usaba como reforzador algún alimento preferido (por ejemplo, un trozo de chocolate, cereal o una galleta) sin que se hubiera programado privación alimenticia. En otra condición, el reforzador consistía en la oportunidad de realizar una respuesta estereotipada durante tres a cinco segundos.

En cada caso, la oportunidad de participar en la respuesta estereotipada generaba un mejor desempeño en el entrenamiento de las tareas que el reforzamiento alimenticio. La ecolalia demorada y la conducta perseverante permitieron incrementar el desempeño de la tarea por arriba de lo observador con el reforzador alimenticio.

Esos resultados indican que las respuestas de alta probabilidad pueden reforzar respuestas de probabilidad menor, incluso si las respuestas reforzadoras no son características de la conducta normal.

Conclusiones: el poder de los reforzadores

Con el principio de Premack, cualquier conducta podría funcionar como reforzador, siempre y cuando fuese más probable que la respuesta instrumental. La probabilidad diferencial como la clave para el reforzamiento preparó el escenario para la aplicación de los procedimientos de reforzamiento en diferentes contextos y problemas.

El principio de Premack hizo avanzar nuestra idea sobre el reforzamiento de manera importante. Animó a pensar en los reforzadores como respuestas más que como estímulos. Sin embargo, problemas con la medición de la probabilidad de la respuesta y un examen más riguroso de los procedimientos de condicionamiento instrumental alejó el principio de Premack los desarrollos teóricos posteriores.


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  • Charlop, M. H., Kurtz, P. F., & Casey, F. G. (1990). Using aberrant behaviors as reinforcers for autistic children. 
  • Journal of Applied Behavior Analysis
  • 23
  • (2), 163-181. Domjan, M. (2003). Principios de aprendizaje y de conducta (5ª edición). Madrid. Thomson. Hanley, G. P., Iwata, B. A., Thompson, R. H., & Lindberg, J. S. (2000). A component analysis of “stereotypy as reinforcement” for alternative behavior. 
  • Journal of Applied Behavior Analysis
  • 33
  • (3), 285-297.

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