Estrategias para mejorar la salud emocional

Estrategias para mejorar la salud emocional
Sergio De Dios González

Revisado y aprobado por el psicólogo Sergio De Dios González.

Última actualización: 06 agosto, 2023

Las personas que disfrutan de una buena salud emocional tienen control sobre sus emociones y su comportamiento. Además, son capaces de manejar los desafíos de la vida, construir relaciones fuertes y recuperarse de los contratiempos.

Pero del mismo modo que se necesita esfuerzo para tener una buena salud física, también es necesario realizar un importante esfuerzo para tener una buena salud mental y emocional. Mejorar la salud emocional puede ser una experiencia gratificante y muy beneficiosa, en todos los aspectos de la vida.

¿Qué es la salud emocional?

La salud  emocional o salud mental es el bienestar psicológico general. Incluye la manera de sentirse hacia uno mismo, la calidad de las relaciones y la capacidad para manejar los sentimientos y hacer frente a las dificultades.

Mujer con buena salud emocional

La buena salud emocional no es solo la ausencia de problemas de salud mental. Estar mentalmente o emocionalmente sano es mucho más que estar libre de la depresión, ansiedad u otros problemas psicológicos.

 

La salud mental y emocional se refiere a la presencia de características positivas como autoconfianza, alta autoestima, capacidad para lidiar con el estrés y recuperarse de la adversidad, gusto por la vida, capacidad para reír y divertirse, capacidad para construir y mantener relaciones satisfactorias y flexibilidad para aprender cosas nuevas y adaptarse a los cambios, entre otras.

Estas características positivas de la salud emocional  permiten participar en la vida plenamente a través de actividades significativas y relaciones sólidas. Además, estas características positivas también ayudan a hacer frente a retos y tensiones de la vida.

El papel de la resiliencia en la salud emocional

Estar emocionalmente sano no significa no pasar por malos momentos o experimentar problemas emocionales. La diferencia es que las personas con buena salud emocional tienen una gran capacidad para recuperarse de la adversidad, el trauma y el estrés. Esta capacidad se denomina resilencia .

Las personas que están emocionalmente sanas tienen las herramientas para hacer frente a situaciones difíciles y mantener una actitud positiva.

Uno de los factores clave en la resiliencia es la capacidad de equilibrar el estrés y las emociones. La capacidad de reconocer las emociones y expresarlas adecuadamente ayuda a evitar quedarse atascado en la depresión, la ansiedad u otros estados de ánimo negativos.

Otro factor clave es tener una red de apoyo fuerte. Tener gente de confianza a la que poder acudir en busca de aliento y apoyo, aumentará la capacidad de recuperación en tiempos difíciles.

 

Cara feliz simbolizando la salud emocional

La salud física se conecta a la salud mental y emocional

El cuidado del cuerpo es muy importante para tener una buena salud emocional. Ya sabes: mens sana in corpore sano. Cuando se mejora la salud física, se experimenta automáticamente un mayor bienestar mental y emocional.

El ejercicio no solo fortalece el corazón y los pulmones, también libera endorfinas, sustancias químicas poderosas que nos dan energía y elevan nuestro estado de ánimo.

Descansar adecuadamente, alimentarse bien, hacer ejercicio, recibir luz solar natural y evitar el consumo de alcohol, tabaco y drogas es básico para iniciar el camino de una buena salud física. Para mejorar la salud mental tienes que cuidar de ti mismo.

Con el fin de mantener y fortalecer tu salud mental y emocional es importante prestar atención a tus propias necesidades y sentimientos. No dejes que el estrés y las emociones negativas se acumulen. Trata de mantener un equilibrio entre tus responsabilidades diarias y las cosas que te gustan.

Si cuidas de ti mismo, estarás mejor preparado para hacer frente a los desafíos cuando se produzcan. Cuidar de ti mismo supone hacer  actividades que liberen endorfinas de forma natural y que contribuyan a hacerte sentir bien. Además de con ejercicio físico, las endorfinas también se liberan naturalmente en los siguientes casos:

  • Haces cosas buenas por los demás y eres útil para otros
  • Practicas la autodisciplina y el autocontrol.
  • Aprendes cosas nuevas
  • Disfrutas de la belleza, de la naturaleza y del arte
  • Gestionas adecuadamente tus niveles de estrés
  • Realizas actividades creativas
  • Reservas un tiempo y un espacio para actividades de ocio

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.