El método Doman para estimular el cerebro infantil

El método Doman constituye una guía de inestimable valor para estimular el cerebro infantil. En este artículo te contamos cuáles son sus principios y cómo puedes ponerlo en marcha.

Escrito y verificado por la psicóloga Elena Sanz.

Última actualización: 16 octubre, 2022

Los niños son como esponjas, absorben información fácilmente y sin esfuerzo. Durante los primeros años de vida, el cerebro infantil tiene una gran plasticidad y los niños presentan una predisposición innata al aprendizaje. El método Doman precisamente nos dice cómo podemos aprovechar esta ventana.

Una de las peculiaridades de esta propuesta es que se basa en la curiosidad natural de los niños, explotando las posibilidades de las actividades lúdicas para optimizar el aprendizaje. Es decir, se aleja de las imposiciones y las presiones y fomenta un ambiente divertido en el que el infante puede disfrutar aprendiendo.

De hecho, el objetivo último no es transmitir conocimientos, sino estimular el cerebro, de forma que se logre el desarrollo integral de la persona en todos sus ámbitos (intelectual, físico, emocional y social).

¿Qué es el método Doman?

El método Doman es una propuesta pedagógica que surge hace más de 50 años a raíz del trabajo de un grupo de neurólogos y especialistas dirigidos por el doctor Glenn Doman. Las investigaciones de este equipo estaban dirigidas inicialmente a trabajar con niños con lesiones cerebrales. Y es que Doman consideró que, debido a la plasticidad cerebral de la infancia, las neuronas sanas de estos niños podrían establecer las conexiones necesarias para suplir las funciones de las neuronas muertas.

Los resultados fueron muy positivos, evidenciando que con una adecuada estimulación, los niños podían aprender de forma tan eficiente o más que sus coetáneos y desarrollarse plenamente. Así, decidió aplicar el método también en niños sanos para favorecer su potencial.

Generalmente, el método Doman es conocido como una estrategia para enseñar a los niños a leer a una edad temprana. Sin embargo, cuenta con varios programas:

• Lectura y escritura.
• Conocimientos enciclopédicos.
• Lengua extranjera.
• Matemáticas.
• Enseñanzas artísticas.
• Desarrollo físico.

¿Cómo funciona el método Doman?

Este método se basa en los hallazgos y el conocimiento sobre el desarrollo cerebral infantil, y busca estimularlo de forma temprana y adecuada para potenciar su capacidad. Como decíamos, el objetivo es aprovechar la plasticidad cerebral para crear la mayor cantidad de conexiones neuronales. Y, para esto, se usan los denominados “bits de inteligencia”.

Un bit de inteligencia es una unidad de información que el niño puede percibir y procesar a través de los sentidos. Por ejemplo: una palabra escrita, una imagen, un sonido, una textura… Estos bits se agrupan por categorías en función de la rama del conocimiento a la que pertenecen (por ejemplo: zoología) y dentro de cada una se seleccionan unidades básicas de información (por ejemplo: perro, gato, tigre, oso…)

Son estos estímulos concretos los que se le presentan al niño (en forma de inputs), y este a su vez debe ofrecer un output que demuestre que ha podido procesar la información adecuadamente. Por supuesto, estos estímulos deben tener ciertas características para ser útiles:

• Deben tener la intensidad adecuada. Es decir, que tienen que superar los umbrales de percepción del niño para poder llamar su atención.
• Han de ser simples, concretos y claros. Deben mostrar un solo dato.
• Es importante que sean novedosos, para que despierten la curiosidad del niño.
• Se presentan de forma muy breve y en sesiones de muy corta duración. Esto permite que el niño no se sature ni se aburra y siempre quede con ganas de más.

Claves para aplicarlo

Para aplicar el método Doman es importante proponerlo como un juego, incentivar y motivar a los niños a pasarlo bien y seguir unos pasos concretos:

• Elabora los bits de inteligencia. En un primer momento, has de crear cinco categorías con cinco estímulos en cada una.
• Crea un ambiente adecuado. Que sea un espacio tranquilo y sin distracciones, y explica a los niños que han de prestar atención.
• Anuncia la primera categoría a trabajar y comienza a presentarle al niño los estímulos uno por uno, de forma rápida. Hazlo con entusiasmo y alegría para favorecer la motivación.
• Deja un espacio de tiempo entre una categoría y otra.
• Continúa con el siguiente grupo de estímulos y haz lo mismo que con el anterior. Continúa hasta finalizar con todas las categorías.
• Agradece, alaba y elogia a tu hijo por su conducta. Reforzarlos es importante.
• Repite esta sesión cada día, y ve aumentando el número de estímulos y de categorías progresivamente.

Ante todo, recuerda que el método Doman se basa en la repetición, por lo que hay que ser constante. Además, aquí no hay lugar para juicios, exámenes o evaluaciones hacia el niño. Debe mostrarse como un juego y el objetivo es que se divierta al tiempo que se estimula su cerebro.

Este método puede aplicarse en el aula por el personal docente, pero en realidad es muy adecuado que lo apliquen los padres en el hogar. Eso sí, siempre tras haberse informado adecuadamente.