Psicobiología de la concepción: ¿en qué consiste?

El embarazo es un periodo en el que se producen cambios orgánicos que influyen en la vida mental. Ahora, bien, ¿qué pasa exactamente en esta etapa?
Psicobiología de la concepción: ¿en qué consiste?
José Padilla

Escrito y verificado por el psicólogo José Padilla.

Última actualización: 01 agosto, 2022

En la psicobiología de la concepción, el embarazo se contempla como un proceso complejo por la cantidad de factores que intervienen, incluidos la producción de espermatozoides y óvulos. Para que la concepción sea exitosa, las trompas de Falopio deben estar sanas, de manera que permitan que los espermatozoides lleguen al óvulo. De igual forma, los espermatozoides deben estar sanos para que puedan fecundar el óvulo.

El éxito en la concepción y el embarazo no solo depende de factores biológicos, también de la intervención de factores mentales. El estado mental de la mujer gestante es clave para concebir y para tener un embarazo saludable y exitoso. Los cambios psíquicos tienen el potencial de afectar positiva o negativamente el desarrollo del feto.

¿Qué es la psicobiología de la concepción?

Embarazada mirando por la ventana

Desde que los futuros progenitores conciben la idea de tener un bebé hasta que biológicamente lo hacen, se inicia un proceso de cambio a nivel mental, en especial en la mujer. Estas transformaciones se aceleran durante el embarazo y se consolidan cada vez más a medida que transcurren los nueve meses y los años siguientes al parto.

Sin duda alguna, el embarazo es un momento de crisis que marca el comienzo de una nueva etapa en la vida de la pareja. Ambos progenitores se ven obligados a desarrollar una nueva identidad: la de ser padres. En este periodo es normal que se revise la propia infancia, las expectativas que se tienen sobre la paternidad y la manera en la que esperan proporcionarle una crianza al bebé.

Todos los cambios mentales que van tomando lugar en los padres, en especial en la madre, influyen sobre el desarrollo del embarazo. Incluso pueden afectar el proceso de concepción. Por ejemplo, sabemos que el estrés es un factor que puede afectar el ciclo menstrual de las mujeres y la ovulación. Esto podría retrasar o dificultar la concepción de un bebé.

Estudios longitudinales han encontrado que los cambios en el eje hipotalámico-pituitario-adrenal (HPA) durante el embarazo producen alteraciones en la futura madre y en el feto que pueden perdurar hasta la edad adulta (Glover, 2014).

También se sabe que el estrés psicológico durante el embarazo tiene consecuencias negativas para la madre y su descendencia (Alderdice, et al., 2012). Por ejemplo, un exceso de estrés materno durante el embarazo puede tener consecuencias cognitivas negativas para el bebé, como efectos perjudiciales en el lenguaje, la memoria de trabajo, el desarrollo psicomotor, el razonamiento perceptivo y la velocidad de procesamiento, entre otras posibles consecuencias (Béjar-Poveda y Santiago-Vasco, 2017).

Los efectos de las manifestaciones emocionales

La psicobiología de la concepción permite comprender cómo diferentes emociones pueden afectar la concepción y el desarrollo del embarazo. Partiendo desde los principios de la biología analiza los cambios mentales por lo que atraviesan la madre y el padre. Muchos de estos cambios vienen acompañados por el estrés y la ansiedad.

El estrés

El parto prematuro y el bajo peso al nacer son los efectos más comunes del estrés materno. Cuando este se presenta durante el primer trimestre, aumenta el riesgo de alteraciones congénitas o de tener un aborto espontáneo (Sastre, 2015).

Además, existen hallazgos que indican que el estrés materno durante el periodo fetal puede condicionar el desarrollo emocional y conductual del niño hasta llegada la edad adulta (Romero et al., 2012).

La ansiedad

La ansiedad es una respuesta emocional ante un estímulo amenazante, que se caracteriza por la presencia de sentimientos de inquietud, excitación e inseguridad.

Se estima que aproximadamente el 54 % de las mujeres presentan ansiedad en algún momento de su embarazo, siendo más frecuente y grave en el primer y el tercer trimestre (Marc et al., 2011).

La ansiedad durante el embarazo puede tener consecuencias negativas para el desarrollo del feto, ya que se le expone a niveles hormonales elevados, que contribuyen a la posibilidad de un parto prematuro y aumentan el riesgo de bajo peso al nacer y problemas en el desarrollo neuroconductual en la infancia (Sastre, 2015).

La depresión

La depresión puede derivar en cambios conductuales en la madre que pueden afectar el desarrollo del embarazo. Algunas manifestaciones de lo anterior son el abandono de los controles prenatales, el deterioro del autocuidado que requiere la gravidez, la mala adherencia a las indicaciones médicas, el abuso de tabaco, alcohol y drogas o incluso el suicidio, que a su vez se pueden traducir en complicaciones obstétricas (Jadresic, 2010).

Mujer embarazada

La importancia de la psicobiología de la concepción

La psicobiología de la concepción es importante porque con ella se pueden comprender los cambios psíquicos por los que atraviesa la madre durante el embarazo. Además, permite analizar cómo los factores emocionales pueden afectar el proceso de concepción y el desarrollo cognitivo del bebé.

Al concebir se producen una serie de cambios hormonales que afectan el estado de ánimo de la mujer gestante y no solo eso, también afectan a la estructura y el procesamiento de la información en el cerebro, preparándola así para ser madre. En este contexto de continua transformación, la psicobiología de la concepción establece el nexo entre los cambios biológicos y el comportamiento.

Para concluir, la concepción es un proceso en el que intervienen diferentes variables. Los cambios biológicos que se van produciendo en este periodo transforman la mente, propiciando la aparición de nuevos comportamientos y creencias. Es precisamente en ese nexo entre la mente y lo biológico durante el embarazo donde se mueve la psicobiología de la concepción.


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  • Alderdice, F., Lynn, F., & Lobel, M. (2012). A review and psychometric evaluation of pregnancy-specific stress measures. Journal of Psychosomatic Obstetrics & Gynecology33(2), 62-77.
  • Glover, V. (2014). Maternal depression, anxiety and stress during pregnancy and child outcome; what needs to be done. Best practice & research Clinical obstetrics & gynaecology28(1), 25-35.
  • Béjar-Poveda, C. y Santiago-Vasco, M. (2017). Influencia del estrés materno durante el embarazo en el desarrollo cognitivo del niño: una revisión. Matronas 18(3): 115-122.
  • Jadresic, E. (2010). Depresión en el embarazo y el puerperio. Revista chilena de neuro-psiquiatría48(4), 269-278. https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?pid=S0717-92272010000500003&script=sci_arttext
  • Marc I, Toureche N, Ernst E, Hodnett E, Blanchet C, Dodin S, Njoya, M. (2011). Intervenciones cuerpo mente durante el embarazo para la prevención o el tratamiento de la ansiedad de la mujer. https://doi.org/10.1002/14651858.CD007559.pub2
  • Romero, A., Gay, A, y Fernández, O. (2012). Maternidad y salud: ciencia, conciencia y experiencia. Madrid: Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
  • Sastre, I. (2015). Aspectos Psicológicos y Emocionales durante la gestación y el puerperio. https://uvadoc.uva.es/bitstream/handle/10324/11938/TFG-?sequence=1

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