Tener un perro fortalece el cerebro, según un estudio
Tener un perro es una gran responsabilidad, pero al mismo tiempo genera enormes beneficios. Todo aquel que tenga un peludo en casa lo sabe, pero también la ciencia lo ha corroborado en múltiples oportunidades.
Un reciente estudio llevado a cabo por expertos de la Universidad de Basilea, y publicado en Plos One, encontró que tener perro fortalece el cerebro. Los científicos hicieron varias pruebas y así constataron que la actividad cerebral se ve beneficiada por la compañía de nuestros amigos caninos.
El anterior no es el único estudio al respecto. A estas alturas, se cuenta con una evidencia amplia y sólida frente a los beneficios de tener un perro. Veamos lo que nos dice la ciencia al respecto.
El estudio sobre tener perro
La investigación llevada a cabo por los expertos de la Universidad de Basilea pretendía establecer si tener un perro provocaba algún cambio apreciable en el cerebro. Para averiguarlo, conformaron un grupo de voluntarios a quienes se les pidió que entraran en una habitación y eligieran sentarse junto a un perro que estaba echado en el piso o a un muñeco de peluche.
En un comienzo, los participantes solo podían mirar al animal o al muñeco. Mientras estuvieron en la habitación, se hizo una medición del flujo sanguíneo en distintas áreas del cerebro con unos sensores infrarrojos.
En una segunda visita se repitió todo el proceso, pero esta vez a los voluntarios se les permitió que acariciaran al perro o al muñeco, según su elección. Los resultados fueron contundentes. El estudio reveló que quienes interactuaron con un perro mostraban una importante activación de la corteza prefrontal. Esto se incrementaba cuando acariciaban al animal.
La corteza prefrontal está asociada a la atención, las emociones y la toma de decisiones. Pudo comprobarse que el solo contacto con el perro activaba la atención e inmediatamente después había un incremento de las emociones. A partir de esto, se concluyó que tener perro fortalece el cerebro.
Otras investigaciones
La anterior es una de las más recientes investigaciones, pero no la única que habla acerca de los beneficios de tener perro. Un estudio publicado en 2009 encontró que nuestros amigos peludos también son una magnífica opción para reducir el estrés y mejorar el estado de ánimo.
En esa investigación también se evaluó el efecto de acariciar y mimar a un perro. A los participantes se les permitió que lo hicieran durante 10 minutos. Al cabo de ese lapso, hubo una notable reducción de la frecuencia respiratoria y de la tensión muscular. Se evidenció una importante disminución de cortisol, la hormona del estrés.
Otro interesante estudio hizo un cruce de información entre el Registro Nacional de Pacientes de Suecia, datos sociodemográficos, causas de muerte y tenencia de perros. El hallazgo fue sorprendente. Pudo concluirse que tener un perro parece disminuir la probabilidad de morir por una enfermedad cardiovascular.
Más evidencia
Por si todo lo anterior no fuera suficiente, hay otro estudio llevado a cabo por la Universidad de Michigan en 2020. Señala que tener una mascota, en particular perros o gatos, ralentiza el deterioro cognitivo en las personas mayores.
Para la investigación se hicieron una serie de pruebas cognitivas a más de 1000 personas con edades superiores a los 65 años. Algunos de ellos tenían mascotas y otros no. Los resultados indicaron que los que habían convivido con perros o gatos por varios años tenían una mejor puntuación en las pruebas. Al final se concluyó que tener una mascota es muy positivo para el cerebro.
Los científicos señalaron que tener un perro o un gato no hace más inteligente a nadie. Sin embargo, produce efectos muy benéficos, en especial en la reducción del estrés. Estar relajado es un factor que protege al cerebro del deterioro. Además, tener un perro o un gato obliga a su dueño a moverse, salir y socializar más. Todo en conjunto ayuda a mantener bien las funciones cognitivas.
La compañía de un animal doméstico incrementa el bienestar de una persona. Así que, si tienes dudas sobre tener un perro en casa o no, está claro que la balanza se inclina a favor del peludo. Muy recomendado, en especial para quienes tienen niños, las personas mayores y los que viven solos.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Le Roux, M. C., & Kemp, R. (2009). Effect of a companion dog on depression and anxiety levels of elderly residents in a long‐term care facility. Psychogeriatrics, 9(1), 23-26.
- Marti R, Petignat M, Marcar VL, Hattendorf J, Wolf M, Hund-Georgiadis M, et al. (2022) Effects of contact with a dog on prefrontal brain activity: A controlled trial. PLOS ONE 17(10): e0274833. https://doi.org/10.1371/journal.pone.0274833.
- Mubanga, M., Byberg, L., Egenvall, A., Ingelsson, E., & Fall, T. (2019). Dog ownership and survival after a major cardiovascular event: a register-based prospective study. Circulation: Cardiovascular Quality and Outcomes, 12(10), e005342.
- Team, B. A. S. (2022, 28 octubre). Why Having a Pet Can Boost Your Mood and Keep Your Brain Healthy. Cleveland Clinic. https://health.clevelandclinic.org/why-having-a-pet-of-any-kind-may-boost-your-mood-and-keep-your-brain-healthy/.