Consejos para superar con éxito una mala época

Cuando atravesamos una mala época, nuestra actitud puede determinar cuán negativa percibimos la situación y cuánto se alarga esta en el tiempo. Mira por qué.
Consejos para superar con éxito una mala época
Elena Sanz

Escrito y verificado por la psicóloga Elena Sanz.

Última actualización: 07 noviembre, 2022

Seguro que has pasado por una de esas temporadas en las que el mundo parece estar en tu contra, todo te sale mal y la ley de Murphy se cumple a cada paso que das. Cuando atravesamos uno de estos periodos, podemos sentirnos como si estuviésemos achicando agua de una balsa inundada con un agujero al fondo: ninguno de nuestros esfuerzos puede parecer suficiente para mejorar la situación. Pero, ¿por qué sucede esto?

Más allá de sentirnos víctimas de la infortuna, podemos llegar a comprender cómo nuestros sesgos cognitivos contribuyen al mantenimiento de estas “malas rachas”. Y, al hacerlo, estaremos un paso más cerca de lograr superarlas con éxito. Por ello, antes de afirmar que la suerte te ha abandonado, ten en consideración las siguientes explicaciones y consejos.

Chica llorando

¿Por qué se produce una mala época?

Es cierto que en determinados momentos podemos enfrentarnos a un ambiente muy exigente: una mayor carga de trabajo, obligaciones familiares de las que ocuparse o asuntos importantes a los que atender. Los acontecimientos suceden y muchas veces escapan a nuestro control.

Sin embargo, los procesos mentales y el diálogo interno también juegan un papel importante a la hora de interpretar esas demandas y colocarles las etiquetas de amenazas. Así, es frecuente que adoptemos algunas dinámicas:

  • La queja puede ser una herramienta útil en un momento puntual en tanto que nos permite expresar y liberar la frustración. Sin embargo, cuando se vuelve constante, nos hace entrar en una percepción sesgada y negativa de lo que nos rodea. Al quejarnos centramos y mantenemos nuestra atención en los aspectos menos favorables, de modo que estos parecen más frecuentes e intensos mientras que lo positivo nos pasa desapercibido.
  • Cuando encadenamos varias pérdidas o resultados negativos, es común que empecemos a considerar que el fallo está en nosotros -elemento común a todas esas situaciones-. Asumimos que, al igual que anteriormente hemos fallado, continuaremos haciéndolo de ahora en adelante. Y esta creencia se convierte en una profecía autocumplida que nos lleva a rendir peor de lo que lo habríamos hecho normalmente. Así, confirmamos de nuevo que todo nos sale mal.
  • Cuando sentimos que estamos inmersos en una mala época nuestra actitud cambia. Nos mostramos más irritables y retraídos y esto nos lleva a aislarnos y a experimentar interacciones sociales más conflictivas. Así, nos privamos del elemento reforzante y gratificante del contacto humano y las actividades agradables y reconfirmamos que no hay aspectos positivos en nuestro día a día.

¿Cómo superar con éxito una mala época?

Ser conscientes de que estamos en alguno de los puntos anteriores puede ayudarnos a revertir la situación. Pero, además, existen otras pautas que podemos seguir para superar con éxito una mala época.

Recuerda que es temporal

Al atravesar una mala época puedes tener la sensación de que el aspecto del cielo no cambiará; sin embargo, se trata de algo temporal. Acude al recuerdo de otras situaciones similares vividas con anterioridad en las que lograste salir adelante y trata de utilizar los recursos que te fueron útiles entonces.

Delega y pide ayuda

Si en este momento las exigencias ambientales sobrepasan tu capacidad para responder a ellas, no dudes en pedir ayuda. Contar con otra perspectiva puede servirte para pensar con mayor claridad y otro par de manos pueden ayudarte a aligerar el peso de esas demandas exteriores.

Incluso si recurres a los demás únicamente para liberar tu tensión psicológica, el apoyo y la posibilidad de ventilar tus emociones puede resultar muy positivo.

Cuida tu salud mental

Por último, recuerda priorizarte y cuidar de ti en todo momento. La tensión psicológica sostenida puede tener serias consecuencias para la salud mental; así, si te sientes sobrepasado no dudes en tomarte al menos un día para ti mismo.

Desconecta de las obligaciones y responsabilidades sociales y dedícale tiempo a tu recuperación: descansa el cuerpo y la mente, realiza alguna actividad que te resulte agradable y olvídate de las exigencias externas por ese tiempo. Te sentirás renovado.

Mujer aprendiendo a desarrollar la autoconsciencia

Las malas épocas también forman parte de la vida

A todos nos gustaría permanecer en un constante estado de tranquilidad y felicidad; sin embargo, la tristeza, la frustración y la ansiedad son vivencias que también forman parte de nuestra vida.

Si lo permitimos, estas pueden convertirse en grandes maestras: nos muestran cuáles son nuestras actitudes erróneas y también nos recuerdan los recursos de los que disponemos. Así, recuerda y atesora esos recursos para la próxima vez que una mala época trate de instalarse en tu vida.


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