El amor en las personas con autismo

Más allá de la opinión general, una persona con trastorno de espectro autista también tiene empatía, también se enamora y puede mantener una relación de pareja feliz. No obstante, es importante tener en cuenta los desafíos que deben manejar.
El amor en las personas con autismo
Valeria Sabater

Escrito y verificado por la psicóloga Valeria Sabater.

Última actualización: 15 noviembre, 2022

Puede que el dato sorprenda, pero una de las preguntas más comunes en Google sobre el trastorno de espectro autista es si son capaces de tener pareja o casarse. El amor en las personas con autismo sigue alimentando muchos mitos, ideas sesgadas y tremendos desconocimientos. Aún a día de hoy son muchos los que siguen pensando que estos hombres y mujeres no entienden ni sienten el lenguaje del cariño.

Es un error. Algo que saben bien las familias de las personas con un trastorno del espectro autista (TEA) es que agradecen y necesitan el afecto cotidiano. También estos adolescentes y adultos se emocionan, se enamoran y experimentan pasiones y deseos. Es más, algo que señala a menudo quien está dentro del espectro es que, a veces, llegan a «sentir en exceso». Las emociones les desbordan y no saben muy bien qué hacer en medio de ese universo tan caótico.

De este modo, algo que cabe matizar antes de nada, es que no todas las personas con autismo son iguales. Este trastorno neurobiológico del desarrollo se manifiesta de muchas maneras y cada una, presenta unas características y a su vez, unas necesidades. Depende básicamente del punto donde se sitúe la persona dentro del propio espectro autista.

Hay casos más graves donde se manifiestan serias limitaciones en el habla y el lenguaje, podemos tener un síndrome de Asperger e incluso un autismo altamente funcional. Así, y más allá de sus posibles limitaciones, estereotipias o alteraciones sensoriales, todos y cada uno de ellos sienten la necesidad de ser amados, de ser atendidos. Cómo varía más entre unos y otros, y es ahí quizá, donde más apoyo y estrategias demandan para establecer relaciones más felices y satisfactorias.

Chico pensando en el amor en las personas con autismo

El amor en las personas con autismo, ¿cómo es?

El amor en las personas con autismo responde a una necesidad. La misma que tiene cualquier ser humano y que es, básicamente, la de sentirse parte de alguien, la de compartir vida, experiencias, sentir la proximidad de ese ser al que se ama, se admira y se desea. ¿Por qué no habría de poder experimentar una persona con trastorno autista algo así?

Si una parte de la población lo cree de este modo se debe, en esencia, a la desinformación o al hecho de seguir dando veracidad a información obsoleta. Un ejemplo, uno de los autores más conocidos en el estudio del autismo y trastornos del neurodesarrollo es, sin duda, Simon Baron-Cohen. Este psicólogo es conocido por trabajos relacionados con la teoría de la mente o el cerebro masculino autista.

Fue a lo largo de los años 90 cuando se popularizaron muchos de sus libros, como Autismo: un trastorno cognitivo específico de “ceguera de la mente”. A raíz de este trabajo, gran parte de la población asumió que “todas” las personas con TEA (trastorno del espectro autista) era incapaz de empatizar, de conectar con el entorno, de captar y entender las señales sociales.

A ello, también se le une el mundo del cine y la televisión para los cuales, el término «autista» siempre significa lo mismo: personas desconectadas de la realidad, con estereotipias y genios en alguna disciplina. Cuando en realidad, tras esta palabra se halla una gran variabilidad, múltiples grados donde no todos son genios, donde no todos demuestran ausencia de empatía o ceguera mental.

Sabiendo esto… ¿cómo es entonces el amor en las personas con autismo? ¿Cómo lo experimentan?



La empatía emocional: emociones que desbordan

Una de las ideas más extendidas es que las personas con autismo carecen de empatía. Esta afirmación no es cierta, de hecho, presenta importantes matices. En un estudio publicado en el 2019 por la Universidad de Osaka se encontraron datos que apoyaban la hipótesis de que las personas con espectro autista manifiestan carencias en lo que se conoce como empatía cognitiva. Es decir, les cuesta entender por qué alguien sufre, se enfada o se decepciona.

Sin embargo, y aquí llega el matiz, presentan una elevada empatía emocional. Es decir, sienten con elevada intensidad las emociones de los demás. En ocasiones, esa receptividad emocional es mayor incluso que en los neurotípicos (personas sin autismo).



Pareja mirándose pensando en el amor en las personas con autismo

Otras características del autismo en el amor

Es importante tener en cuenta que el autismo puede presentarse de formas muy diversas y, por lo tanto, la forma de vivir el amor también puede ser muy distinta entre las personas con TEA.

Sin embargo, entre la características más comunes del autismo en el amor, está la dificultad para interpretar los estados emocionales propios y de los demás; así como la expresión peculiar de las propias emociones. Lo cual puede entorpecer el establecimiento de relaciones amorosas.

Por su parte, en el autismo también se presenta una rigidez cognitiva, la cual dificulta el cambio en la forma de hacer las cosas y la adaptación a situaciones nuevas. Esto, al igual que la característica anterior, puede ser otro factor que interfiera en el mantenimiento de relaciones de pareja.

Sin embargo, no nos debemos dejar llevar por los estereotipos. Pues, a pesar de estas características, las personas con autismo pueden establecer relaciones amorosas sanas y exitosas.

El amor en las personas con autismo: compréndeme y te comprenderé

Ya lo dijimos, el amor en las personas con autismo no es fácil. Ellos sí son capaces de enamorarse y lo hacen de manera profunda. Sin embargo, si una relación de pareja ya es de por sí complicada, para la persona con TEA aún lo es más. Por ello, la pareja está casi obligada a cuidar de los siguientes aspectos:

  • La persona con autismo no entenderá muchos de los códigos relacionales que surgen cada día. Es posible que la otra persona necesite un abrazo tras pasar un mal día, que aguarde un te quiero antes de salir de casa para trabajar, que agradezca de vez en cuando se le dedique un halago, un piropo, una palabra de apoyo y confort… Muchos de estos aspectos se le pueden escapar a alguien con TEA.
  • De ahí que se esencial la comunicación. Porque si hay algo evidente que necesita este colectivo es que la pareja sea su refugio y el traductor de todos esos códigos, esos que a ellos y ellas se les escapan y que no siempre entienden.
  • De este modo, nunca está demás dejar claro qué se quiere y qué se espera ciertos momentos (aunque cueste). «Me gustaría que al llegar del trabajo me preguntaras cómo me ha ido el día», «si me ves triste, dame un abrazo fuerte», «cuando vayamos por la calle, recuerda cogerme la mano», etc.

Para concluir, el amor en las personas con autismo se da cada día, con sus dificultades, sus matices y sus enormes retos. También esta es un área donde los profesionales pueden intervenir para ofrecer estrategias, apoyos y acompañar a la pareja en ese crecimiento donde, sin duda, muchos alcanzan la felicidad.

Pareja agarrada de la mano
Te podría interesar...
Autismo en adultos: retos psicológicos y sociales para alcanzar el bienestar
La Mente es Maravillosa
Leerlo en La Mente es Maravillosa
Autismo en adultos: retos psicológicos y sociales para alcanzar el bienestar

El autismo en adultos presenta unas singularidades propias que necesitan sin duda, de una respuesta amplia, especializada y sensible a dichas reali...



  • Baron-Cohen, S. (1999). Autismo: un trastorno cognitivo específico de “ceguera de la mente”. International Review of Psychiatry, 19 - 33.
  • Song Y, Nie T, Shi W, Zhao X, Yang Y. Empathy Impairment in Individuals With Autism Spectrum Conditions From a Multidimensional Perspective: A Meta-Analysis. Front Psychol. 2019;10:1902. Disponible en: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6794557/

Los contenidos de La Mente es Maravillosa se redactan solo para fines informativos y educativos. No sustituyen el diagnóstico, el consejo o el tratamiento de un profesional. Ante cualquier duda, es recomendable la consulta con un especialista de confianza.