Latigazo cervical: síntomas, causas y tratamiento

Latigazo cervical: síntomas, causas y tratamiento
Gema Sánchez Cuevas

Revisado y aprobado por la psicóloga Gema Sánchez Cuevas.

Última actualización: 03 junio, 2018

Cerca de 6,000 personas sufrieron un accidente de tráfico en España durante el año 2017. Aún, a día de hoy, los problemas con el coche siguen siendo una de las principales causas de muerte en la población, especialmente en las personas jóvenes. Por otro lado, incluso cuando el resultado de un percance a la hora de conducir no conduce a la pérdida de la vida, puede tener consecuencias muy serias. Una de las más molestas es el llamado latigazo cervical.

El latigazo vertical es un dolor de cuello producido cuando esta zona tan sensible del cuerpo se ve sometida a una aceleración y deceleración muy brusca. Por ello, suele aparecer en accidentes de tráfico en los que se ha tenido que frenar de forma muy repentina o cuando se recibe un golpe por detrás. También conocido como esguince cervical, puede provocar una gran variedad de síntomas tan molestos como peligrosos.

En este artículo te contaremos todo lo que tienes que saber sobre esta patología.

Dos esqueletos con el cuello

¿Por qué se produce el latigazo cervical?

Al frenar muy bruscamente con el coche o recibir un golpe por detrás, la aceleración que llevaba el vehículo se transmite directamente a nuestro cuello. Esto provoca que el peso de nuestra cabeza (que normalmente es de unos 8 kilos) pase a ser momentáneamente de unos 50 kilos; mucho más de lo que las cervicales pueden soportar sin esfuerzo.

La explicación más habitual es que, debido a ello, se produce un desgarro interno en algunos de los ligamentos o músculos del cuello. Esto provoca un gran dolor en esta zona, que puede extenderse a la cabeza o a la espalda, además de producir otros síntomas menos habituales, pero no menos molestos.

Sin embargo, algunos estudios muestran que los síntomas del latigazo cervical no tienen nada que ver con la aparición de un esguince. Algunos expertos sugieren que se trataría de un problema psicosomáticomás relacionado con el estrés que con el daño físico.

En general, no se trata de una patología muy peligrosa y tiende a desaparecer por su cuenta al cabo de unos pocos días. Sin embargo, en caso de que los síntomas persistan mucho tiempo o sean muy agudos, es recomendable acudir a un médico para descartar problemas más graves.

Síntomas más frecuentes

La mayoría de las personas que sufren esta patología presentan una serie de síntomas muy parecidos. Algunos de los más habituales son:

  • Dolor de cuello. Suele aparecer de inmediato, o en las horas posteriores al accidente.
  • Rigidez en las cervicales. Esto se manifiesta como una dificultad para mover el cuello libremente.
  • Dolor de cabeza. Normalmente, en la parte superior de la misma.
  • Mareos o vértigos, con sensación de ir a perder el equilibrio de un momento a otro.
Mujer con dolor de cuello

En algunas ocasiones, pueden aparecer otros síntomas menos frecuentes. Así, no es extraño que las personas con latigazo cervical se quejen de que el dolor se ha extendido a sus brazos o espalda. Por otra parte, también puede aparecer tinnitus (un molesto zumbido en los oídos).

Además, en muchas ocasiones surgen también algunos síntomas emocionales. Esto se debe al malestar causado por haber sufrido un accidente de tráfico. Los más comunes son la ansiedad y el estrés postraumático, pero en ambos casos los problemas suelen ser muy leves y de corta duración.

¿Cómo tratar el problema?

El latigazo cervical suele ser un problema que responde, con tiempo y paciencia, bien al tratamiento. En este sentido, hasta hace poco se recomendaba mantener el cuello inmóvil para acelerar la recuperación. Esto se debe a que se creía que estaba causado por un esguince interno en el cuello.

Sin embargo, investigaciones recientes han demostrado que el uso de un collarín que inmovilice el cuello puede alargar el tiempo necesario para la recuperación. Esto lo provocaría el debilitamiento de los músculos de la zona, al mantenerse demasiado quietos (unos siempre en tensión, otros siempre relajados). Por lo tanto, hoy en día se recomienda tratar de llevar una vida lo más normal posible cuanto antes; y reservar el uso del collarín para momentos puntuales, como la conducción.

Por otra parte, se ha visto que realizar ejercicio físico para fortalecer los músculos cervicales disminuye el tiempo de recuperación. En el caso de que aparezca mucho dolor, podrían utilizarse analgésicos o antiinflamatorios.

Como se puede ver, el latigazo cervical puede llegar a ser muy molesto, pero no suele traer consecuencias graves. Sin embargo, si los problemas emocionales asociados con él perduran, puede ser recomendable ir a psicoterapia para solucionarlos.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.