Los tipos de acoso laboral más comunes (y que puedes estar sufriendo)

El acoso laboral se conjuga en diferentes formas y escenarios. Por eso, si queremos actuar de una forma efectiva, es tan importante conocer las circunstancias del escenario en que nos movemos.
Los tipos de acoso laboral más comunes (y que puedes estar sufriendo)
Valeria Sabater

Escrito y verificado por la psicóloga Valeria Sabater.

Última actualización: 01 abril, 2021

Pocas cosas pueden ser más lesivas para la salud mental como padecer una situación de mobbing mantenida en el tiempo. Hay estudios que dicen que esas experiencias se traducen en trastornos de estrés postraumático. Los tipos de acoso laboral existentes pueden ser muy sutiles al principio, pero poco a poco cogen fuerza hasta hacer mella en el equilibrio psicológico.

Por ejemplo, puede que hayas experimentado en primera persona que ya no estás en el grupo de whatsapp de tu empresa, que no cuentan contigo para cenas o actividades ajenas al propio trabajo. También puedes percibir cómo tus compañeros empiezan a delegarte tareas que ellos no quieren. Todo forma un escenario de intimidación.

Hablamos de situaciones que suelen empezar como una pequeña ampolla. Sin embargo, poco a poco, esa pequeña molestia aumenta y se cronifica. Finalmente, ni los viernes nos calman, porque ya estamos pensando en lo que nos esperará el lunes. Lo problemático en muchos casos es que uno acaba abandonando su empleo para dejar de vivir estas situaciones (Piñuel y Cantero 2002).

mujer preocupada preguntándose si sufre uno de los tipos de acoso laboral

Tipos de acoso laboral que debes conocer

Podemos definir el acoso laboral como esa intimidación repetida y prolongada por parte de jefes y subordinados sobre un empleado de la organización.

El mobbing que se ejerce por parte de compañeros recibe el nombre de abuso horizontal. En caso de que se lleve a cabo por subalternos, estaríamos ante acoso vertical-ascendente. Por último, una forma muy común de acoso laboral es el bossing, es decir, el que se lleva a cabo desde dirección.

Ahora bien, conocemos quiénes pueden ser los inductores, pero es esencial conocer cuáles son los tipos de acoso laboral. Decimos esto porque es muy posible que ahora mismo muchas personas estén viviendo experiencias desgastantes en su puesto de trabajo sin tener claro que están en una clara situación de mobbing. Lo analizamos.

1. Discriminación: la zancadilla constante que te impide avanzar

Uno de los tipos de acoso laboral más recurrentes es el que alza muros y alambradas que hacen de obstáculo para tu proyección profesional.

Ejemplo de ello es que veas cómo tus compañeros reciban propuestas u oportunidades que a ti te niegan. Por alguna razón que nadie comparte contigo de manera explícita, tu nómina permanece congelada, mientras que asistes a el incremento de la calidad de vida de tu entorno.

2- Lo que eres y haces, no tiene utilidad (infravaloración)

¿Eres un fanático de determinadas series o películas? En un contexto de acoso, tus compañeros o jefes siempre infravalorarán todo aquello que te apasione. No solo despreciarán lo que te defina, cómo vistas o lo que opines, tu trabajo rara vez será apreciado, por mucho que te esfuerces.

3- No eres nadie o no existes (aislamiento laboral)

Hablábamos al inicio del hecho de que, en ocasiones, un trabajador se vea de pronto eliminado del grupo de whatsapp de la empresa. Este suele ser un ejemplo de aislamiento laboral, pero hay más formas y dinámicas:

  • Ver cómo los compañeros hacen el vacío (no nos hablan, nos evitan…).
  • En el equipo de trabajo rara vez cuentan con nosotros.
  • En los descansos nadie intercambia ninguna palabra o comentario con nosotros.
  • No se nos informa de citas, reuniones, de eventos relacionados con el trabajo diario.

4- Los tipos de acoso laboral: el exceso o ausencia de tareas

Este es sin duda uno los tipos de acoso más comunes. Consiste en percibir cómo de pronto se nos asigna un volumen más elevado de tareas. No obstante, también suele darse lo opuesto. A veces, es común notar que se nos delegan tareas que pueden resultar denigrantes de acuerdo a nuestra categoría laboral.

Un ejemplo, uno puede ser un investigador en un laboratorio y tener que hacer de pronto el trabajo de logística, de recogida de muestras o de limpieza.

5- Insultos, falta de respeto, boicotear tu trabajo

El tipo de mobbing más evidente es aquel en el que la intimidación es clara, directa y dolorosa. Nos referimos, por ejemplo, al insulto, al empujón casual en el pasillo, a la burla, a que boicoteen nuestro trabajo y nos dejen en mal lugar.

En ocasiones, podemos ver incluso cómo varios compañeros de trabajo se unen para hacer la vida imposible a otro por mero placer, envidia o discriminación.

Esa intimidación cotidiana aumenta el riesgo de que esa persona que padece acoso termine sufriendo un trastorno de estrés postraumático, tal y como nos explican diversos estudios (Mikkelsen, EG y Einarsen, S, 2002).

Hombre pensando en los tipos de acoso laboral

6- Los tipos de acoso laboral: la culpabilidad

Si hay una incidencia, un problema o si se comete un error determinado, la culpa la tienes tú. Ante estas dinámicas debemos tenerlo claro: una forma de minar el equilibrio psicológico de una persona es desgastándolo mentalmente. Para ello, culpabilizar a ese trabajador de todo lo que sucede (y lo que no sucede) suele ser una técnica efectiva.

7. Cotilleos y rumores que difaman

Otro de los tipos de acoso laboral más hirientes es aquel que se basa en extender los rumores infundados. Nada tiene tanto poder en un entorno laboral cualquiera, como los cotilleos y rumores. Sirven para unir al grupo y humillar a una víctima. No importa la difamación, no importa que ese rumor sea del todo falso e infundado, lo relevante es hace daño e invalidar.

Para concluir, a día de hoy el mobbing o acoso psicológico en el trabajo sigue dándose con demasiada frecuencia. Estas dinámicas, estos escenarios contaminados de negatividad, de abuso y boicoteo, no solo deja víctimas a su paso. Todo ello afecta a la productividad y, en especial, a la salud física y psicológica de las personas.

Detengamos la cultura del acoso, no formemos parte de ella y si la sufrimos, no dudemos en tomar acciones legales y pedir ayuda.


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    • Carbo, J. A. (2017). Understanding, defining, and eliminating workplace bullying: Assuring dignity at work. New York: Routledge.
    • Davenport, N., Schwartz, R. D., & Elliott, G. P. (1999). Mobbing: Emotional abuse in the American workplace. Ames, IA: Civil Society Publishing.
    • Peralta, M. C. (2004). El acoso laboral-mobbing-perspectiva psicológica. Revista de estúdios sociales, (18), 111-122.
    • Piñuel, I. (2003). Mobbing: cómo sobrevivir al acoso psicológico en el trabajo. Ed. Punto de Lectura. Madrid.
    • Piñuel, I., & Cantero, A. O. (2002). La incidencia del ‘mobbing’o acoso psicológico en el trabajo en España. Resultados del barómetro CISNEROS II® sobre violencia en el entorno laboral. Lan Harremanak. Revista de Relaciones Laborales, (7).

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