La doctora Brené Brown define así a los narcisistas

Brené Brown, reconocida escritora, académica y experta en vulnerabilidad humana, aportó hace poco su visión sobre lo que es un narcisista. Lo definió como el trastorno de la personalidad vergonzoso. Te explicamos su argumentación.

Escrito y verificado por la psicóloga Valeria Sabater.

Última actualización: 16 abril, 2024

Un narcisista es más que una piedra en el zapato. No es solo esa presencia que nos impide caminar con normalidad en buena parte de nuestros escenarios cotidianos. Son esas figuras que nos cuesta tanto entender; aunque lo intentemos. Porque quien vive con un padre, madre, jefe o pareja narcisista nunca deja de preguntarse qué les motiva.

Asimismo, hay quien considera que el narcisismo es moda. Se asume, por ejemplo, que el poder de los medios y las redes sociales está creando una generación más individualista. Sin embargo, los estudios no respaldan esta teoría o, al menos, no lo hacen sin señalar matices importantes.

Por otro lado, aparece otra realidad inherente. A menudo, tachamos de narcisistas comportamientos que, simplemente, evidencian características egoístas, pero que no tienen nada de patológico. Lo que necesitamos, sin duda, es definir y comprender con mayor exactitud cómo es y qué orquesta el trastorno de la personalidad narcisista.

Brené Brown, un nombre de gran relevancia en el campo de la psicología y la investigación, aportó hace poco unas ideas interesantes sobre este tema. Las analizamos.

La doctora Brené Brown define así a los narcisistas

Brown empezó a ser realmente conocida después de una impactante charla TED sobre la vulnerabilidad. A partir de ese momento, no deja de publicar libros con gran éxito. Es profesora de la Universidad de Houston y destacan, sobre todo, sus trabajos sobre la vulnerabilidad, la empatía, el coraje y la vergüenza.

Hace unas semanas participó en el podcast de otro autor de bestsellers y experto en desarrollo de habilidades, Tim Ferris. El objetivo de este programa era actualizar, debatir y comprender mucho mejor la anatomía del trastorno de personalidad narcisista. Al fin y al cabo, estamos ante una realidad que nos es cercana a la mayoría. Es más, muchos lidian con las heridas emocionales ocasionadas por estos perfiles.

Descubramos ahora, qué ideas trascendieron de esa interesante charla.

El narcisismo, el más vergonzoso de todos los trastornos de personalidad

Una idea que a menudo reforzamos sobre el narcisismo es que esta condición se alimenta de grandes dosis de amor propio. No obstante, esta visión no siempre se ajusta a la realidad. La doctora Brené Brown defiende que una de las inclinaciones más naturales de las personas narcisistas es la vergüenza.

Este trastorno de personalidad está impulsado por la grandiosidad, por la necesidad de aparentar una gran resolución, perfección y funcionalidad. Esa ansia esconde, en realidad, grandes cantidades de odio hacia sí mismos. Necesitan, por así decirlo, revertirse de una dorada armadura para camuflar la sensación insignificancia que late en su interior.

La doctora Brown insiste, en el narcisista hay una gran vergüenza y temor y lo que buscan evitar a toda costa es parecer ordinarios. Se desesperan por llevar una corona sobre sus cabezas, aunque eso implique pisotear a los demás e invalidar a todo el que sea posible para ganar ventaja.

Los narcisistas están hechos de miedos

Es evidente que a la mayoría nos puede costar vincular a los narcisistas con una emoción tan concreta como el miedo. Pero es interesante saber que este trastorno de la personalidad está condicionado por el peso de infinitos miedos e inseguridades. Es más, trabajos de investigación como los realizados en la Universidad de Gerona, en España, reseñan algo interesante.

Un narcisista no duda en reírse de los demás, pero si hay algo que le aterra es que se rían de él. Aquellos que evidencian rasgos vulnerables, por ejemplo, temen a las siguientes acciones:

• La crítica.
• El rechazo.
• Equivocarse.
• Pasar desapercibidos.
• Parecer incompetentes.
• No ser el centro de atención.

La doctora Brené Brown también define a los narcisistas como personas con grandes dosis de miedos y vergüenza sin procesar.

Su defecto: no aceptar su vulnerabilidad

Uno de los libros más destacables de Brené Brown es El poder de ser vulnerables: ¿Qué te atreverías a hacer si el miedo no te paralizara? (2016). Entre las ideas centrales resalta que nuestras relaciones como seres sociales orientados a la vinculación y a la interacción podrían mejorar si trabajáramos una dimensión muy concreta.

La capacidad de aceptar y mostrar nuestra vulnerabilidad erige relaciones más humanas y nutritivas. Es, a partir de ese marco, desde donde lograremos ser más auténticos con los demás. Expresamos lo que necesitamos, seremos más sinceros y tendremos mejores herramientas para conectar entre nosotros; con respeto, empatía y humanidad.

Este libro también aborda el tema del trastorno de la personalidad narcisista. Las personas con este rasgo se avergüenzan de su vulnerabilidad y la revisten con un comportamiento agresivo. Buscan tener poder para silenciar sus miedos. Avasallan y humillan a los demás como forma instrumental que apacigua sus inseguridades y la vergüenza soterrada.

Nota final

La doctora Brené Brown define así a los narcisistas, como personas que lidian de forma constante con la sensación de vergüenza. De igual manera, como obsesionados con el éxito, con tener poder sobre los demás y ser ese faro reluciente que apaga la luz de todo el que esté a su alrededor. Bien, es posible que la aportación de la célebre autora e investigadora no nos parezca muy innovadora.

Sin embargo, de algún modo, reafirmamos una vez más esa imagen y esa anatomía de una de las presencias más hostiles y problemáticas de nuestra sociedad. Las podemos tener en casa y también en el trabajo, lo sabemos. Por tanto, la pregunta que podemos hacernos es: «¿cómo lidiar y sobrevivir a la interacción de este tipo de personas?».

Lo cierto es que no siempre es posible poner distancia de las mismas. Cuando no es posible romper por completo la relación con un narcisista, debemos procurar que su efecto sobre nosotros sea el menor posible. Estrategias como la piedra gris es una de las más interesantes.

Consiste en no responder a sus conductas, no desafiarlos, ni dar valor a sus palabras. Implica ser fríos y distantes ante quien quiere controlarnos. Es saber poner límites y no ceder, ni reforzar ninguna de sus demandas. Si un narcisista se nutre de aquello que le dan los demás, retiremos lo que más ansía: nuestra atención y validación.